Capítulo 29 "Tengo que recordar"

Me removí un poco incomoda abrí mis ojos poco a poco al abrirlos por completo grite, simplemente grite luego me calle, Luke estaba frente a mí con cara molesta, cuando era yo la que debía de estar molesta.

- ¿Qué demonios te pasa? –antes de que pudiera decirle algo mi puerta se abrió y aparecieron las ultimas personas que hubiera querido ver en ese momento.

-Bueno me pasa ¡Que tu no deberías de estar aquí! – me cruce de brazos.

-Si, no me culpes; el piso estaba muy cómodo- dijo como si todo estuviera bien y eso lo odiaba.

-Largo- estire mi brazo y apunte a la puerta, Luke volteo los ojos y salió, antes de irse se recostó del marco y me miro con como si fuera el rey del mundo.

-Hablas dormida- sonrió y se fue, suspire me lance sobre mi cama e intente recordar el sueño que había tenido lo único malo es que no recordaba así que no sabía que había dicho y ni siquiera pensaba en irle a decir a Luke que me contara que fue lo que había dicho mordí mi labio inferior voltee mi cabeza y me concentre en un dibujo que estaba pegado a la pared era una chica y en la parte de arriba habían diferentes dibujos montañas, estrellas, animales eran más bien como los sueños que tenía y eso me dio una idea, me levante de golpe y antes de salir me mire de arriba abajo y recordé que aún no me había bañado, ni cambiado y fui directo al baño.

...

Estaba frente a la puerta de James toque, la primera vez no abrió así que volví a tocar estaba empezando a impacientarme iba a tocar por tercera vez cuando James abrió la puerta, parecía que estaba recién salido de la ducha.

-Ahh, hola Aysel ¿Qué tal? – el rubio se hizo a un lado dejándome pasar, tomo una toalla que había en una silla y comenzó a secarse el cabello bruscamente, pero creo que eso a él no le molestaba.

-Necesito que me ayudes con un hechizo- fui lo más precisa posible ya que no quería darle muchas vueltas al asunto, James estaba sentado en la silla en la que antes estaba la toalla la cual ya no veía supuse que la había desaparecido con algún tipo de hechizo; pareció pensarlo un poco, pero luego acepto sin problemas.

-Y, ¿Qué hechizo quieres hacer? – pensé un poco en lo que iba a decir y por fin hablé.

-Uno que me ayudé a recordar mis sueños- James pensó un poco lo que le dije camino hacia su estantería y comenzó a buscar entre todos los libros que habían - ¡Bingo!, sabía que estaba aquí- me acerque a él y en sus manos tenía un libro de cubierta azul oscuro con estrellas en la parte de arriba haciendo un arco y abajo en letras medianas negras decía "Sueños y vidas pasadas" se me hacía muy interesante la parte de la vida pasada.

-Y, ¿Encontraste algún conjuro que me ayude? -James asintió mientras se sentaba frente a la mesa donde estaba su laptop, libros, lápices y demás.

-Si aquí hay uno que te puede ayudar dice que te tienes que sentar alrededor de piedras solares y lunares y entre medio de ellas debe de haber sal negra, después la persona que esta fuera del círculo de sueño (o sea yo) debe repetir unas palabras que están aquí escritas, al final dice que entraras a tus sueños, pero debes de tener cuidado en no perderte en ellos odiaría tener que meterme en tus sueños- fruncí el ceño.

-Y donde se supone que conseguiremos todas esas cosas, iremos a la luna y luego al sol- lo último lo dije en forma de sarcasmo, James se rio por el comentario.

-Odio dañar tu sueño de astronauta, pero todos esos ingredientes los tenemos en la bodega- el rubio sonrió, James tenía una linda sonrisa y eso lo había notado desde la primera vez que lo había visto -Vamos chica de la luna- negué mientras salíamos de su habitación.

Caminamos por la Academia la cual parecía estar desierta James me explico que los fines de semanas los estudiantes van a C.E. y pasan tiempo con sus familias. Después de tanto caminar llegamos a lo que al parecer era el sótano sin ser el sótano ya que no estaba bajo la academia sino que parecía otro salón al entrar se respiraba un aire con olor a flores, brisa veraniega y sentía el frio de otoño e invierno aquel lugar se veía genial habían repisas llenas de frascos con líquidos y sales y distintas cosas mire un frasco que tenía pegado un pedazo de pergamino que decía "Verruga NOST" era una cosa roja arrugada como pasa abrí un poco el frasco para saber a qué olía, me sorprendió mucho por el hecho de que creí que olería horrible, pero en realidad olía como carne seca de las que vienen empaquetadas.

-Se usa para que los vampiros no se vuelvan locos cuando huelen la sangre siempre llevan uno encima, Nattiel por ejemplo siempre tiene uno o dos- se me hizo un poco asqueroso, pero luego pensé en que así tal vez si algún día me cortaba o algo así no me devoraría -mira Sal negra- camine hacia donde estaba James y en sus manos sostenía un frasco de cristal con lo que al parecer tenía sal negra -Ahora a buscar la piedras vamos- el chico abrió una puerta y al cuarto al que entramos parecía un congelador.

- ¡Demonios! ¿Por qué no me dijiste que aquí hacia tanto frio? – a James en cambio no parecía molestarle el frio.

-Lo siento, toma mi mano- mire su mano reacia aun no entendía como eso aliviaría el frio aun así decidí tomarle la mano y enseguida una oleada de calor invadió mi cuerpo entero no entendía como eso era posible aun así me sentía mejor -soy un brujo del Aquelarre de Fuego- no entendía muy bien aun así decidí no hacer más preguntas -mira aquí están las piedras lunares, son grandiosas- las mire más de cerca y tenía razón eran piedras tenía manchas azules y negras por doquier -salgamos- tomo las piedras que estaban en el cesto y movió la mano y desaparecieron dejando una pequeña nube naranja, al salir soltamos nuestras manos y fue algo muy extraño a decir verdad era como si mi temperatura hubiera subido y luego bajado hasta quedarse en la temperatura en la que estaba antes y sin darme cuenta James ya estaba saliendo de la habitación.