Café+papel=amor

Capítulo 8

Alex

"Que maravillosa noche la de hoy. Lissandra, la razón de  mi desvelo y la culpable de estar escribiendo por la madrugada.

Parece ser que no me equivocaba en lo más minimo sobre ella. Era como pensé, frágil, tierna, simpática e interesante. Todo eso y más contenido dentro de una fina y delgada envoltura de rudeza y esceptisismo hacía los hombres.

No la culpo, tiene los motivos suficientes para mostrarse de esa manera. Al igual que yo, no ha tenido buenas experiencias en el campo del amor; decepciones al por mayor y lágrimas derramadas sobre el colchón.

Platicamos de distintos temas. Aunque la mayor parte de la noche, el tema central fue sobre el amor, y todo aquello que se le parezca. Supongo que me descubrió, no suelo abrirme tanto en la primer conversación, mucho menos con alguien que conozco en tan poco tiempo. Pero ella a logrado ganarse mi confianza muy pronto, cosa que me parece muy extraña. Aclaró, que nada tiene que ver su belleza física con la confianza, A estás alturas, es lo que menos debería importarme, y mis malas experiencias me lo han enseñado. 

Lissandra es una bella mujer de buenos sentimientos, que merece mi total confianza y respeto.

No voy a mentir. Al tenerla delante de mí, provocaba que todas mis emociones salgan de control. 

Aquéllos ojos grisáceos de mirada tierna y profunda, que hipnotizan.

Aquélla piel tan cálida y confortable como verano, tan blanca y fría como el invierno. 

Aquéllos labios finos y delicados, que con el choque entre sí, desprendían bellas y acertadas palabras que me hacían enloquecer al punto de querer desfallecer en ellos. 

La música siempre en armonía con el aroma del café y las palabras que se paseaban por el aire, creando un ambiente bastante confortable, cálido y romántico.
 

Todo encajaba a la perfección; espontáneo, nada planeado, el ambiente de nuestro lado, lo mejor...

Hace mucho tiempo que no me sentía así.

El café salía uno tras otro, no tengo idea de cuánto café bebimos. Espero no ver afectada mi paga, el fin de semana. 

¿A quien engañó? Eso es lo que menos me importaría que pasara, valió totalmente la pena.

¿Será que me estoy doblegando?... No lo sé, pero debo tener cuidado con el peligroso amor que me asecha, no quiero ser herido y mucho menos quiero lastimar a una mujer como Lissandra. Qué más quisiera. Pero debo mantenerme sobre la raya... 

Un par de horas le han tomado para crear un buen desastre dentro de mí.

Es verdad, de tantas cosas que platicamos olvidé preguntarle cómo es que sabía mi nombre. Tal vez, y la conocí en algún sitio y ya no ls recuerdo, o quizás, lo sabía por la estrecha relación que hay entre nuestras familias. ¿Quién sabe? Pero lo de nuestras familias es algo que también me intriga.

 Por otra parte, tengo aún más curiosidad por saber de su más reciente decepción amorosa. No fue suficiente el tiempo para hablar sobre eso, y supongo que ella igual se quedó intrigada sobre mi última decepción. Ya tendremos el tiempo suficiente para conocernos.

Por esta noche es suficiente de escribir. Hasta la proxima querido diario."


 

Cansado y sobre mi cama, solté mi diario a un costado de mí, el antebrazo reposaba sobre mis ojos y mientras recordaba cada palabra con Lissandra, decenas de suspiros y dudas de mis sentimientos, se apoderaban de mí. Era mejor dormir, en un par de horas comenzaba mi turno en el restaurante. 

 

 



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En el texto hay: humor, romance, amor

Editado: 07.08.2020

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