Voces fantasmales, no dejan de susurrarme.
Intentan ahuyentarme de algo que ni siquiera conozco.
Ellas creen que todo cambiará, pero yo creo que nada podría estar peor.
Nos asusta lo que no conocemos.
Esta agonía se hace eterna cuando necesitamos realmente alejarnos.
El descanso en los pies del mundo es la espera de los que no se dejan vencer.
Esta agonía se hace eterna cada vez que quiero cerrar mis ojos.
Sonidos, voces, todo lo que necesito escuchar.
Todo lo que necesito sentir para estar realmente viva.
Esta agonía no me permite continuar, y hace de mí un gran tornado de emociones violentas.
Puedo verte. Puedo sentirte. ¿Realmente existes?
¿Eres tú quien me corta? ¿Debería esta herida sangrar para siempre?
Sólo sé que esta agonía no me permite descansar.
Editado: 21.01.2021