Me aburrí de ti...

Las cosas siguen mal, muy mal, el miedo me consume, le temo a todo y lo demuestro peleando, mis crisis de ansiedad son cada vez peores, mi esposo tiene turno de noche, solo quiero matarlo por todo lo que hace y lo que no. Lo invito a ir a pasear temprano, hace mala cara,  así que decido irme sola, me pregunta a qué hora volveré a lo que respondo que no sé, esperando un abrazo o unas palabras de amor, nada de eso aparece así que me voy. Quien me conozca no me iría a pasar el día sola cuando lo puedo pasar con él, solo necesitaba unos cuantos para pensar, solucionar dudas, respirar y volver. No sé quien soy y estoy tratando de encontrar ayuda y reencontrarme.

Me demoro 30-40min en volver, mientras camino de vuelta pienso en abrazarlo pedirle que me entienda, almorzar juntos y estar de la mano en este duro proceso,  también me pregunto si es justo llevarlo por ese camino, pues quizá solo me coresponde a mi, pero también pienso que se supone el en las buenas y las malas es verdad. Cruza por mi cabeza el pensamiento de que cuando llegue no estará, trato de borrarlo de mi cabeza, estoy a una cuadra y no quiero llegar si no esta, no quiero más decepciones, suficientes con las que ya siento, y como lo esperaba pero no lo quería, no esta. 

Maldigo en mi interior, lloro, lo llamo, no contesta, lo llamo, hasta que contesta le pregunto dónde esta mientras camino hacia allá, pienso en por qué tiene que escapar, por qué no se puede quedar en casa, por qué siempre hay una excusa para todo, por qué le importo tan poco. Llego al lugar donde supuestamente esta, no lo veo, lo llamo, siento mi cabeza estallar, mi pecho colapsar, al final cuando lo encuentro esta vestido para ir al trabajo, que rico pienso, se larga quién sabe con quien, a quién sabe donde, ¿no estaba cansado? eso dijo para no ir conmigo, ¿hace cuánto estaría haciendo eso mientras yo estaba en el trabajo?, lo unico que dice es que va para donde la mamá, seguramente yo almorzaría aire pienso, le digo muchas cosas desde mi miedo, miedo al abandono, a la soledad, a la traición, a la mentira, ¿me habrá visto la cara de imbécil?.

Me dice que no mas, le digo que hablemos, se aburrio, se canso de mi, lo que llevaba temiendo el ultimo mes, paso, alfin pasa, mi culpa, daño todo, mato todo, le pregunto si se irá, lloro, lo abrazo, por qué por qué por qué, me quedo grande, mi mundo es un limbo, no encuentro salida, lo dañe, de mis mayores felicidades la aburrí, ¿todos los sueños? más dolor, ¿acaso hice tanto mal en la vida que debo pagarlo? ¿acaso el en las buenas y en las malas solo aplica al revés? ¿tan fácil se agota de alguien a quien dice amar?, mi familia ¿cuál?, me desgarro, estoy sola.

Decidimos seguir juntos, pero darnos un espacio, me rompe el alma cada día sin un beso, sin un abrazo, sin un mi amor, lo miro y me pregunto por qué llegue hasta tan lejos, por qué tenía que morir e irme con él, por qué quiero llevar a todos a sentir lo que yo siento, es acaso falta de comprensión, miedo, los días se hacen eternos, mi papá y yo hablamos un poco del tema, me aconseja me llena tanto de amor, un amor que pido a gritos sileciosos y él los escucha, es mi papá y al parecer tengo mucho de él en mi manera de ser. Me acompaña a la distancia, me centra, me prepara para lo peor, lo amo, amo a mi esposo eso lo tengo claro, lo que no sé es si él me ame de verdad como esposo o como quien dice amar dentro de una relación que cuelga de un hilo deshilandose. Lo miro mientras duerme, le pido a ese Dios, a la vida a todo lo que exista, hasta a mi antigua yo que no lo dañe más, que se reconquisten, le pido al amor que aparezca, se manifieste, nos abrace y nos acerque, lo veo y es tan feliz que pienso en irme y mas nunca volver, pienso en enterrarlo, para que no duela, para que no me vea morir en vida, no me reconozco, la depresión me lleva de la mano, una mano traicionera, insegura e incluso suicida. 

No me suelo enamorar seguido y mucho menos admitirlo, con él me permití amar desde el día cero, me entregue por completo, nos escogimos como familia, como equipo, como futuro, que si puedo vivir sin él, si, ya he comprobado que ni la muerte mata lo que uno desearía algunas veces, obvio pensando desde el dolor, sin embargo, lo quiero a mi lado, nos quiero juntos, por decisión, por bienestar, por amor, me aferro a mis errores, busco el origen real de ellos, y tomo la decisión de hacerme a un lado, por un tiempo, no pelearé más, no lucharé más y lo más importante adquerir su poder, "seguir adelante".

Me voy de Cali, unos días, semanas, meses....aún no lo sé necesito trabajar en mí, sin nadie cerca ni como "apoyo", necesitamos espacio, digerir todo lo que ha pasado, todo el daño que sin querer nos hemos dado, un ricón para perdonarme y permitirme perdonar a mis alrededores. Me despido y me llevo mi corazón en coma, ve a su costado, pero no interfiere, solo se hace a un lado, busca comprender, se busca.