Capítulo siete: Valores.

- ¡Gyeuol NO!

Era muy tarde Gyeuol había estampado la cara del tipo contra la mesa. Y su nariz estaba botando mucha sangre, todos nos estaban mirando y creo que alguien ya había hablado a un supervisor.

- No te escuche bien, vuelve a repetirlo.

- ¡Pero que mierda te pasa! -Gyeuol tenía la cabeza del tipo contra la mesa y por más que este se removía no podía quitarse la presión que Gyeuol ejercía con sus manos.

-Eso no fue lo que dijiste, vuelve a repetirlo, hace unos momentos te paseabas como pavorreal ladrando pura basura y ahora no puedes si quiera repetir un poco.

- ¡Gyeuol basta no vale la pena!

-Eres una loca, le das repulsión a la gente nadie quiere cerca de una tipa que parece un muerto viviente...

Y de nuevo su cabeza fue a dar contra la mesa. Ya no le detuve sabía que no valía la pena, pero no podía merecerse menos llevaba toda la semana riéndose a espaldas de Gyeuol, acerca de como a veces se quedaba mirando un punto fijo o como sus ojeras y tono de piel pálido le hacían verse como un zombi, no había dicho nada porque Gyeuol lo había visto una vez burlándose de una chica y ella solo dijo "solo Mariconerias de ese tipo"

-Escúchame bien saco de hormonas y cerebro desinflado - Gyeuol presionó más su cabeza y ella también se inclinó hasta dar con el oído del tipo - no me interesa quién eres, no me interesa si me conoces porque me ves sentada en el comedor en la semana o porque vamos en el salón, no me importa ni una hectárea del arco del triunfo quien demonios seas, pero tú conoces mi rostro y sabes mi nombre, mientras te hundes en el olvido murmurando pestes de mi nombre haciéndome más famosa, a mí me da igual tu existencia, porque eso es lo que mereces, que nadie sepa ni recuerde tu nombre.

La secretaria Gabriela llego abriéndose paso entre todos los alumnos y yo me levante rápido, para que Gyeuol dejara al tipo en paz, aunque la aparte y el tipo se dejó caer dramáticamente al piso ella no dejaba de mirarle con rencor.

- ¿Cassiopeia Pero que crees que estás haciendo?

- ¿Y yo que? -hablo la nombrada atrás de la secretaria, sentada en la mesa con su compañera rubia donde habían comido tranquilamente desde que todo había empezado.

-Ay... la costumbre, lo siento - la secretaria volvió a mirar a nuestra dirección y abrió los ojos impresionada - ¿Gyeuol?

No tardamos mucho en estar sentadas en la oficina el tipo lloraba desconsoladamente sacando de quicio de nuevo a Gyeuol.

- ¿Y bien que paso?...

-Estaba almorzando tranquilamente y esta salvaje se me fue a golpes...

-Hey cuida tu boca - le interrumpe la secretaria y el tipo comienza a llorar de nuevo Gyeuol no dice nada y entonces ahí es cuando decido intervenir.

-Ella solo se defendió...

- ¿de qué exactamente? yo no hice nada cuando ella solo estampo mi cara contra la meza.

- ¿Gyeuol me podrías dar la versión de tu historia?

-Él tiene la razón...

- ¿Que? - El tipo preguntó casi gritando destrozando los tímpanos de todas.

- ¡Cállate Joder!

- ¡Gyeuol el vocabulario!

-solo deme mi castigo y dígame que me puedo marchar.

-dos semanas edificio "C" que firmen tu hoja y al finalizar la primera semana me traes la hoja con tus asistencias empezando desde... Hoy.

-está bien... - Gyeuol miro confusa las dos hojas - ¿Por qué son dos?

-El otro es para tu amiga.

-no somos amigas... Lo que sea, ella no tiene nada que ver yo lo golpe no ella.

-Ella también lo hizo y me insulto...

-Realmente eres tonto del trasero porque cabeza no tienes para pensar las consecuencias.

- ¡Gyeuol basta! Por favor retírense.

Salimos con el tipo siguiéndonos los pasos y Gyeuol suspiro pesadamente y luego me miro con su cara seria pero reprochadora.

-ahora vez porque es malo andar conmigo.

-no te estoy reprochado nada.

-Y ni se te ocurra estas consciente de que no are nada para enmendarlo ¿verdad?

-muy consiente... - Gyeuol miro a nuestras espaladas y miro al tipo que seguía nuestros pasos pues no había otra salida más que el estrecho pasillo...

- ¡Hey! ¿No tienes curiosidad? - la mirada de Gyeuol seguía fría y sin expresiones pero había un toque de sarcasmo maquiavélico que hizo temblar al chico y a mí me produjo un escalofrió - o ¿solo te di más de que hablar de mí?

-Vámonos Gyeuol -trate de tomarla, pero ella no me lo permitió.

-Tal vez si pueda hacer algo para enmendar...

- ¿Te gusta ponerte con los hombres...?

- ¿Y a ti con las mujeres? Todo un marica

-No soy Gay

- ¿No te cansas de ser estúpido? Te dije marica no Gay mi insulto no depende de tus preferencias sexuales. Hablo acerca de cómo no fuiste lo suficientemente valiente como para confesarle a la secretaria que te di una golpiza por cotillear a mis espaldas, que no dicen que el chisme y el cotilleo es para las mujeres - Gyeuol dio tres pasos al frente lentamente al mismo tipo que el tipo daba los mismos pasos pero hacia atrás. - Te diré otra cosa más porque se ve que no pones atención a las clases, soy una mujer hecha y derecha y no ando por ahí hablando de mis compañeras o compañeros. Y por si te preguntabas vuelvo a ganar, como me recordaran como la que le dio una paliza al tipo que hablaba de las mujeres ¿y a ti...?

-Ya vámonos... Por favor - le suplique

-Me aburres chico suerte componiendo tu vida.

El tipo no dijo más y yo solo le miré con un poco de lástima, pero corrí tras Gyeuol pues había caminado con mucha prisa y sin mirar atrás.

-Él estaba golpeado y una vez empezara a hablar él no lo iba a admitir o ¿viste que pusiera pegas cuando yo me eche toda la culpa? Incluso te culpo a ti, sería una pérdida de tiempo si me pongo a discutir con él y la secretaria, él seguía botando sangre de todas formas le pegué y aunque me hubiera defendido la secretaria solo diría esas no eran formas y aun así me daría un castigo - Gyeuol caminaba apresurada y yo tras de ella casi corriendo para seguirle el paso. - Aun así, tú tienes un castigo y no repare toda la tarde para disculparme por algo que tu no hiciste, aun así ¿quieres seguirme el paso? -se detuvo en seco y yo tuve que retroceder unos pasos con mi respiración errática por la corredera que di tras Gyeuol. - ¿Que te pasa?