Capitulo 1: Un nuevo aspirante.

Un nuevo aspirante

No todas las personas sienten que el mundo es tal y como lo conocen, algunas de ellas sienten que algo en el mundo no es lo que aparenta, otras personas sienten que algo falta, otras sienten que algo sobra.

Son pocas las personas que sienten que el mundo está bien tal y como es… pero, hay otras personas que sienten que el mundo debe ser destruido para dar paso a uno mejor, sin embargo, a pesar de que algunas personas puedan llegar a contrariarse, otras están de acuerdo. Creemos que son pocas las personas dispuestas a dar un paso para destruir la vida, pero en realidad, son cada vez más quienes están de acuerdo.

Los reinos de Note y Sion regresan al conflicto, los guardianes que impedirían este desastre están ausentes, pues, en la tierra, capital de la vida humana, algo terrible estaba por suceder. El regreso de la oscuridad.

Mientras la guerra celestial sucede, los 5 caminos se enfrentan a la noche y el destino de la tierra y del universo entra en juego.

El día en que las sombras probaron el poder:

¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar por algo que deseas? Es buena pregunta, en mi clase ese fue el tema de debate, nos dieron al mundo como deseo ¿es un buen mundo? ¿es un mal mundo? ¿puede cambiar? ¿debe destruirse? La mayoría en mi clase estuvo de acuerdo en que debía destruirse, no debían quedar ni sus cenizas, así no volverían las memorias del mundo que fue destruido.

El debate termino, yo seguía considerando que el mundo puede cambiar, que no debía ser destruido. Fuimos pocos los que consideramos eso, pero, nadie dijo si seria capas de hacerlo ¿qué es lo mejor? … siempre he leído comics, mangas, cuentos y varias historias en las que el héroe se opone a la destrucción del mundo por mas que el villano tenga razón, pero ahora me pregunto ¿y si el villano hubiese ganado y tenido total razón?

• ¿en qué tanto piensas, Thomas? – Pregunto una chica de pelo negro, ojos cafés, labios delgados, no muy alta y una complexión delgada, de tez blanca.

• Me has asustado, cristina, pues, estaba pensando en el debate de hoy, a decir verdad, quede algo insatisfecho.

Cristina, quien sonreía, torno su rostro pensativo −igual yo, el tiempo no fue suficiente y fue injusto que al final el profesor fuese quien decidiera.

Thomas giro en dirección a cristina – Tienes razón, me habría gustado participar, pero no pude evitar sentirme nervioso, así que no hable… pero en cambio, tu si que tuviste de que hablar, hasta el profesor tuvo que silenciarte.

Cristina se sonrojo, en medio de la vergüenza contemplo a tomas, notando una vez mas que Thomas era de su misma altura, unos 1.68 metros, ojos cafés, tez trigueña, labios delgados, pelo negro. Cristina no pudo evitar pensar que por poco terminarían pareciéndose demasiado.

• No sé si me ofendes o si me estas halagando.

• ¡oye! ¡oye! ¡es un halago! – respondió Thomas, recordó la semana anterior, Cristina lo había vapuleado por un comentario erróneo de Thomas – Esta semana no quiero amanecer en el hospital −suspiró.

Cristina no pudo evitar reír al recordar aquello − ¿Qué harás hoy? Parece que tenemos la tarde libre hoy, no hay trabajos para mañana. – comentó con una inocente sonrisa.

Thomas amo oír eso, por fin podría ponerse al día con los animes que había dejado inconclusos, aunque lo hacia todos los días y para él valía la pena desvelarse, para luego no escuchar el despertador y ser levantado por un baño de agua proporcionado por su madre, quien temía que un día quedara en coma por dormir demasiado; Si hubiese un deporte referente a ese habito de seguro Thomas sería el campeón.

−hare muchas cosas importantes – pronunció tratando de lucir serio.

Cristina frunció el ceño −veras anime nuevamente ¿verdad? –

Thomas apresuro más su paso – ¡muchas cosas importantes! −

Cristina lo siguió – te acompañare, no hay nada que hacer−

Thomas se detuvo, tomo del hombro a cristina − ¿estás segura? Una vez que empiezas no hay vuelta atrás−

Cristina golpeo amistosamente a Thomas − ¿ya te he dicho que a veces parece que te gusta exagerar las cosas? –

• Eso decía yo y mírame ahora
• Mejor démonos prisa.

Llegando a casa de Thomas, este sintió que algo venia hacia ellos, se giro para ver, pero no había nadie por aquella calle que aparentara seguirlos, una fuerte brisa choco con Thomas y cristina.

• Estos vientos… lloverá pronto
• Sera mejor que nos demos prisa, no queremos mojarnos y menos llegar tarde a la hora del almuerzo.