El camino a casa fue lento, cansado, Mario estaba pensando en la forma de decirle a sus padres que su uniforme estaba sucio, no quería decirles que un niño más grande lo humillaba, sabía que en cuanto les dijera irían a la escuela y le provocan más problemas en la escuela. Cuando llegó encontró a su madre preparando la comida, el saludo rápido y se subió a su habitación. Se cambió de ropa y emp
La mañana del viernes llegó, era calurosa, la alarma sonó, eran las 7:30. Marine se levantó con pereza, se sentía agotada,hace dos meses, cuando aparecieron los dos cadáveres, que no lograba dormir a gusto. Las pesadillas la envolvían, era como un laberinto, pero sin salida, no importaba la dirección que tomará, todas las noches se dirigía hacia otra dirección, pero el resultado era el mismo, no había escapatoria.
Se levantó sintiendo los pies pesados. Tomó una ducha rápida, se coloco unos pantalones de vestir negros, una camisa verde que resaltaba sus ojos y unos zapatos negros. Siempre le habían incomodado las zapatillas, pensaba que eran una clase de tortura y te hacían ver mal. Se miró al espejo y notó sombras bajos sus ojos, no era fanática del maquillaje, pero tenía que cubrir esa oscuridad que opacada su cara. Cuando terminó de cubrir la realidad de sus noches, se apresuró a darle de comer a Toby, su canario. Tomó las llaves de su auto dispuesta a trabajar.
Cuando llegó a el salón donde los aprendices hacían sus hipótesis o donde ese le explicaban los casos, noto que los jóvenes platicaba sobre la demostración de ayer. Fue entonces que uno de los estudiantes les indicó a los demás que su maestra Marine ya había llegado.
—Bien, dejen la plática para después a menos que quieran que conteste a algo. Un joven rubio alzó la mano esperando que se le diera la palabra.
—entonces Arturo, ¿que duda tienes?
—si, bueno, ayer durante la demostración, cuando preguntar el nombre, usted respondió con el suyo. ¿Por qué lo hizo si tenían la grabación?
Los demás murmuraron en aprobación.
—Bien, cuando obtuvieron la grabación claramente no usó su nombre, pero si nos brindó su edad —los miro a todos por un instante —¿saben por qué lo hizo? O mejor dicho, ¿se han preguntado acaso porque llamó?
Espero a que alguien tuviera aunque sea una vaga respuesta,pero todo quedó en silencio, un dolor de cabeza parecía devorar la paciencia de Marine. Algunos murmuraban, otros solo se quedaban callados tratando de formular una respuesta.
—¡no puedo creer que nadie diga nada! — gritó enojada — ¿creen que serán alguien en la vida si no cuestionan todo? Este es su trabajo! ¡Estamos hablando de una asesina que está desquiciada, que cree que lo que hace es arte! Necesitan pensar como los asesinos, necesitan pensar que ganarían con lo que hacen. ¿Es para impresionar al mundo? ¿O es para demostrarse a sí mismos de lo que son capaces? ¿Lo hacen por gusto, o porque no tienen otra opción? ¿Alguien detendrán? ¿Que los impulsó hacer lo que hacen? Deben pensar en cómo utilizar el error que cometió para poder atraparla. Así que preguntaré de nuevo ¿porque llamó?
Verónica era una joven pelirroja , quien habló sin rodeos.
—¿puede ser que haya sido porque preocupada? ¿O más bien decepcionada?
—explicate —dijo Marine mientras da paseaba por la sala.
—Bueno, yo pienso que… —se quedó callada, sinceramente tenía miedo a decir algo equivocado.
Pero Mauricio un joven regordete continuó.
—Usted dijo que a los 4 primeros les arrancó los pulmones pero al último lo destripo y le arrancó la lengua. Puede que hay marcado para disculparse.
—un asesino que se disculpa? —dijo interesada —¿porque arriesgarse?
—Porque rompió su forma de dejar su arte, según ella. Tal vez iba a disculparse ¿sabe?
—no creo que sea eso —dijo la joven negra.
—por qué opinas eso ¿Jenny? —si no era para disculparse ¿que la impulsó? —dijo Marine.
— Era una burla. Una burla para los policías, para la familia.
Marine aplaudió fuerte. A los demás les pareció desagradable.
—por fin alguien que piensa adecuadamente. Exacto, fue una burla. Fue una demostración, de que no importa su edad, su género, ella seguía matando, incluso que puede romper su patrón. Aunque eso le perjudique, porque chicos. Este año estoy yo, y ustedes, somos mentes brillantes y nuevas, el cambio de ideas, nuestras ganas de atraparla la detendrán. Porque yo les enseñaré a tener otra perspectiva. Serán los asesinos en su mente—se sentó en su silla de cuero —y así atraparon al más peligroso. Pero deben recordar que deben exigirse más. Y nunca olviden quiénes son, a veces esto también es un arma de doble filo, no quiero que se pierdan en su mente.