Daemon

Capitulo II

Daemon

No aguanto este dolor de cabeza, tal ves no debí tomar así pero tenia que despejarme la mente de tanta mierda. Al principio me aterraba la simple idea de asesinar al hacerlo primera ves a los 15 años aunque fue en defensa propia y mama al igual que papa me querían hacer entender que no fue mi culpa de todas maneras tuve que ir al psicólogo puesto que me traumé a tal punto de tener pesadillas cada noche por casi un mes.

Aun recuerdo todo como si fuera ayer.

Llegué a casa a las 7:00 pm porque jugué un partido de fútbol el cual habíamos ganado 3-1, ya no podía esperar para contarle mi nuevo logro a mamá. Entre a la casa y lo primero que note fueron todas las luces apagadas algo que me inquieto ya que lo mas temprano que han apagado las luces es a las 11:00 pm.

—¡¿Mamá?!— grite.

Ninguna respuesta.

—¡¿Mamá?!—volví a gritar

Nada...

Al no obtener respuesta me dispuse a buscarla por toda la casa, algo me costaría mucho ya que la casa era enorme, sin embargo, al pasar por la puerta que lleva al sótano escuche unos ruidos. Antes de bajar fui por el arma de para que se encontraba en su oficina, cuando la tome volví a donde había escuchado los ruidos.

Abrí la puerta y comencé a bajar las escaleras, cuando me faltaban solo cinco escalones vi una luz la cual me dio esperanza, al estar completamente en el sótano me encuentro a mi madre atada de manos y pies a una silla, con un paño de cocina que cubría su boca, quise desatarla y pedirle una explicación pero ella se dio cuenta de que estaba ahí y como pudo me hizo una seña para que me fuera y hiciera silencio, pero yo no le hice caso. Llego un momento en el que se vio mas aterrorizada que antes, trataba de decirme algo pero no entendía y ahí fue donde me di cuenta de que ella no me miraba a mi sino a algo detrás de mi, di media vuelta y me encontré con un hombre mucho mas alto que yo, vestía todo de negro y usaba un pasa montañas del mismo color de su ropa, note que en su mano izquierda él sostenía un cuchillo el cual tenia sangre y eso me alarmo y preocupo a la ves.

—Así que tu eres el hijo de esa zorra—dijo con burla.

Como pude tome valor y antes de que me atacara con el cuchillo alce el arma, quite el seguro y hale el gatillo, el disparo fue directo a su cabeza callo al suelo y volví a disparar en medio de sus cejas fui corriendo hasta donde estaba mamá, la desate y no le pude pedir una explicación, todo lo que obtuvo de mi en ese momento fueron sollozos.

Al matar por segunda vez me sentía culpable pero no como antes, todavía no se como no fui a la cárcel por haber matado a ese chico a punta de golpes. Ya para los 16 mataba para papá, él me metió en su mundo del cual no estaba claro de cual era ese mundo, lo único que el me informaba era a quien investigar, capturar, torturar, hacer hablar y matar.

Lo único que tenia claro era que no iríamos a la cárcel por un trato que el hizo con la mano derecha del presidente, en resumen hacíamos el trabajo sucio.

—¡Daemon!—me llama papá.

—¿Si?—me giro a verlo.

—Acaban de avisarme que el presidente esta satisfecho de haber acabado con Jay Ross y su gente, pronto nos darán el nombre de la persona a quien vas a capturar, lo único que se es que es alguien muy importante no solo aquí sino en todo Estados Unidos—explicó, quise irme pero me detuvo.

—Hijo, se que nuestra relación no esta del todo bien, pero solo te pido que me des un tiempo mas—trato de darme un abrazo pero lo detuve—Esta bien, te entiendo.

Me fui de ahí antes de que discutiera de nuevo por la misma mierda.

No comprendo porque papá se niegue a decirme de una puta vez en que consiste su mundo. Comencé con esto desde los 16, en unos unos meses cumplo 21, si esto no es suficiente tiempo, no entiendo cuanto tiempo mas necesita.

Quede con los chicos para decidir en donde planearíamos para próxima misión, no obstante, tuve que ir a casa porque mamá me tenia que decir algo muy importante como para no decírmelo por teléfono.

Llego a casa y bajo del auto, entro y no veo a mamá así que voy a la cocina y me encuentro con Susi, ella mas que una ama de llaves es como mi abuela desde que tenia 16.

—¿Y mamá?—preguntó tomando una manzana del refrigerador.

—La señora Jasmine se encuentra en el invernadero regando sus planta—dijo—¿sabe? desde que que usted decidió irse irse de la casa ese es su único refugio, ella constantemente se siente sola porque ni siquiera el señor Collin llega a cenar sino cuando su madre ya esta dormida— explicó y su voz sonó triste.

No supe que responder a todo lo que Susi me dijo, no sabia que mamá se sentía así, si lo hubiera sabido antes vendría mas a menudo.

Me dirijí al invernadero que esta el la parte en la parte trasera de la casa y en efecto mamá se encontraba regando sus plantas. Entre y la abrace por detrás, me sentía culpable por la infelicidad de mi progenitora.

—¿Como estas cariño?—giró a verme.

—Bien mamá y tu ¿como estas?

Esa pregunta estaba de mas, ya sabia como estaba y no era bien

—Bien hijo—mintió—te mande a llamara decirte que dentro de 2 semanas tu padre y yo cumplimos 25 años de matrimonio y haré una reunión con familia y amigos, y de verdad quisiera que esta vez si te presentaras-vi la suplica en sus ojos y no puede negarme.

—Esta bien mama, vendré—sonrió y con eso tuve suficiente.

Nunca me han gustado esas reuniones. La familia de mamá es muy preguntona y odio que me pregunten tantas estupideces.

—¿Como van las clases?—inquirió.

—Bien, dentro de 30 minutos es mi primera clase y si no quiero llegar tarde tengo que irme ya— bese su frente y ella mi mejilla.

Estoy en la universidad no porque quiera, mi mamá quiere que aunque sea tenga una carrera universitaria y ¡Joder! amo a esa mujer, quiero que se sienta orgullosa de mi aunque no sea del todo.