Victoria
-¿Pero estas segura de que quieres eso puede que lo que descubras no te guste y te traiga mas dolor?-Pregunta Alexander.
-Si y es lo único que tengo seguro ahora, voy a vengarme de todos los que me han hecho daño.
Es eso lo que quiero acabar con todo el mundo si es necesario, igual que han acabado con el mío. La vida me ha arrastrado a estos extremos, me han traicionado, mentido y engañado, han matado a sangre fría a mis padres, a mi nana y a mi entrenador, todo el día de mi cumpleaños y supongo que nunca sabré cual es mi verdad, los secretos que escondían mis padres pero si no puedo saber las verdades del pasado crearé unas propias.
-¿Quién eres Alexander? Y quiero la verdad algo muy malo esta ocurriendo y no consigo entenderlo.-Digo y todo este dolor que sentía se ha convertido en furia y odio hacia los que se han convertido en mis enemigos, hay un caos dentro de mi.
-Soy Alexander Black, empresario, veintiún años, hijo del líder de la mafia japonesa.
No me sorprendo con su revelación porque ya me lo esperaba.
-¿Y quien es el hombre que me secuestro y me trajo aquí?
-Mi rival en la mafia, hijo del líder de la mafia rusa, Gerald.
-¿Y yo?
-Tú te has convertido en su presa, va tratar de hacerte daño para llegar a mi ¿Te lastimo o te hizo algo, dímelo y ahora mismo acabo con él?
-No solo me pillo desprevenida y me durmió. Créeme no soy un objetivo fácil, antes de dejar que me use contra ti acabo con él.
-Bien pero Gerald es de cuidado tenlo en cuenta además yo jamás permitiré que él se acerque otra vez a ti.
-Yo se defenderme sola aunque gracias por tú ayuda, no estoy en mi mejor momento.
-Lo se y tienes mi apoyo para lo que decidas hacer.
-Eso significa que tenemos otra tregua.
-De momento digamos que somos socios pelirroja, tengo mucho que contarte y hay mucho que hacer.
-Bien pero antes que nada necesito hacer algo.
Alexander y yo nos dirigimos hacia el cementerio para despedirme de mi familia y antes nos paramos en una floristería, en el camino Alexander me explica que él se encargo de todo los preparativos del funeral y que estuvieron todos sus empleados que los adoraban y los amigos mas cercanos de la familia. Por lo menos no estuvieron solos en su despedida.
Nos acercamos y coloco los ramos de rosas blancas en la lápida de mi madre, eran sus flores preferidas.
Alexander me da espacio para que pueda despedirme de ellos.
-Perdónenme papas por no haber estado para despediros, me gustaría haber estado aquí en vuestros últimos momentos. Sabéis sois la mejor familia que he podido tener en este mundo así no seáis mis padres biológicos. a mi eso nunca me importo, me lo disteis todo y no me refiero a las cosas materiales, sino a todo el cariño y el amor que tuve gracias a vosotros. Siempre me protegisteis y me educasteis a pesar de que no teníais que hacerlo y ahora me toca a mi, voy a averiguar quien nos hizo esto y logro separarnos , voy a vengarme a si sea lo último que haga.
Después de salir del cementerio regresamos al edificio de Alexander y el me explica como funciona todo, me enseña el lugar y me sorprendo con la base de operaciones que tienen en el sótano. El lugar esta dividido en varias salas la principal es una sala de juegos donde pasar el rato, también hay estantes repletos de libros, en otra sala tienen todos los dispositivos electrónicos que pueden serle útiles a un hacker, en otra una especie de laboratorio y muchos equipos médicos y lo que mas me gusta es una sala de armas donde también hay un gimnasio y un ring de boxeo.
-¿Y no habéis tenido nunca problemas con la policía?
-No Lara se encarga de eso.
-¿Quién es Lara?
-Es mi compañera.
-¿Es decir tu novia?-Digo y el se empieza a reír.
-No es como una hermana para mi, en verdad somos cinco.
-¿Trabajan para ti?
-No trabajan conmigo, somos un equipo, espero que pronto tu formes parte de el.
-¿Y donde están ellos?
-En el hospital, tuvimos un atentado.
-¡Que! ¿Y tu estas bien?
-Si, Gerald mando una bomba a un evento es mejor que lo sepas porque muchos murieron y seguro saldrá en las noticias. Ese desgraciado ya me debe dos lo que te hizo a ti y lo que le hizo a mi grupo. Ya debería saber con quien se esta metiendo.
De repente siento un mareo que hace que me tambalee y Alexander me sujeta.
-Debes descansar, acabas de salir de un coma y es mejor que te acuestes en lo que te preparamos un departamento en el edificio, de momento puedes dormir en el mío.
Alexander me alza en brazos y camina hacia el ascensor.
-Alexander puedo caminar ¿Vale?
-Lo se pero es mas divertido verte molesta.
Alexander
Subo en lo que Victoria patalea en mis brazos pero aun así no la bajo. Me alegra verla así aun sabiendo lo que le ocurrió a su familia. Tal vez enfadándola puedo distraerla un momento de todo lo que esta ocurriendo. La llevo a mi habitación y la suelto en el suelo.
-Eres un idiota Alexander.
-Se que no piensas eso. Al contrario se que piensas todo lo contrario.
-Tú no puedes saber lo que pienso respecto a ti.
-Créeme si lo se, todas piensan lo mismo.
-Yo no soy todas Alexander, hazte a la idea de eso.
-Bien quítate la ropa y recuéstate.-Digo y me suelta una bofetada.
-¡De que hablas imbécil!-Grita enfurecida.
-Es para que estés mas cómoda ¿En que clase de cosas son en la que estas pensando pelirroja?- Camino hacia la cómoda y le lanzo una camiseta mía- Toma ponte esto, puedes entrar al baño.
-¿Esta es tu habitación, donde vas a dormir tú?
-En el sofá en la sala, te dejo para que descanses.-Estoy saliendo por la puerta cuando siento a Victoria agarrar mi mano, me doy la vuelta.
-Alexander...-Dice y la veo acercarse mas a mi.