Capítulo 27

♡Cielo♡

Después de un tranquilo vuelo de regresó a casa, me siento extrañamente ansiosa, 《mi amor destinado esta en una de las manadas...tengo que encontrarlo antes que él lo haga》

En eso aparece Abel, quien se vino conmigo como mi guardaespaldas.

—Princesa, llegamos. En dos minutos vamos a aterrizar.—asiento con la cabeza, y él se va.

Después que el Jet aterriza en la pista privada, bajo y me encamino hacia una camioneta blindada, preparada para llevarme a la manada. Miro a mi alrededor y observo a cada hombre y mujer a cargo de mi seguridad, sus rostros sin expresión para algunos, eran de alerta y preocupación para mí.

Ellos estan preparados por si se presentaba algún ataque, ya todos estan enterados de lo peligroso que se ha vuelto el híbrido.

Una vez en la camioneta, nos dirigimos a la manada, mi hogar.

Respiro profundo y voto el aire contenido, ¡esta ansiedad que me invade, no sé qué me pasa!

Llegamos a la entrada de la manada, y los grandes portones se abren para dejarnos entrar, me asomo por la ventana de la camioneta y observo mi hogar. 《Extrañaba estar en casa》

Alcancé a estar dos semanas y media en casa de mis abuelos.

Avanzamos hasta llegar a casa. 
Me bajo sin esperar que me abran la puerta, y corro a abrazar a papá que me espera con mamá en la entrada de la enorme mansión de dos pisos. Lo abrazo, y luego a mamá. 《¿si algo les pasará yo no se que haría?》

Luego me presentan al señor Derek a su esposa Laura, y su hija Nara. Su hijo no esta por el momento, porque fue a buscar a una chica; su hermana lo apoda caperucito rojo, es algo infantil pero lindo, y es entonces que me doy cuenta que la hermana de caperucito, ¡es el amor destinado de Adam mi amigo de la infancia!

《Pero por lo que me había contado Aurora, se suponía que  caperucito es gay, y estaba con Adam, bueno, creo que mi amiga se equivocó》

Después de las presentaciones, 《que por cierto fueron muy agradables》 subo a mi habitación  a refrescarme.

Me meto bajo la ducha, el agua esta tibia, mi cuerpo se relaja un poco, alejando la ansiedad repentina de la que era presa.
Sé que tengo que hablar con mis padres más a fondo sobre el asunto del híbrido, pero no podré hasta después de la cena.

Enjabono mi cuerpo y cuando termino dejo que la cascada de agua de la ducha caiga con más fuerza sobre mi cabeza, empapando mi cuerpo y llevándose los restos de jabón con ella.

Y así sigo por al menos 20 minutos más.


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Cuando voy bajando las escaleras veo a mi amiga Aurora que viene con las chicas. Se detiene cuando me ve y corre a abrazarme, nos saludamos y nos ponemos al día, salimos afuera por donde vienen llegando los invitados. Ya es tarde.

Me invita a buscar algo que olvido su madre en su auto. La acompaño y mientras me pone al día, nos adentramos hacia el área del estacionamiento que esta ocupada solo por los vehículos de los invitados. Me cuenta sobre caperucito, y es entonces que lo siento, 《Ese olor que me vuelve loca...miel y bosque...》

— Cielo ¿qué te sucede?—me pregunta mi amiga.

—¿Qué me decías?

—Que ese es Daniel, alías caperucito rojo...—me indica una dirección, y cuando dirijo mi mirada donde ella me indica, lo primero que veo es un ferrari rojo, de la puerta del conductor baja un chico. Mi corazón comienza a latir cada vez más rápido. El chico se dirige a la puerta del copiloto, la abre y una chica muy hermosa extiende su mano hacia él. 
Él la sujeta con delicadeza y le ayuda a bajar.  Rabia, ira, celos me consumen...

《—Es Mío. —es un reclamo casi silencioso.》

Aurora me mira estupefacta.

—¿Qué te pasa Cielo... acaso él es tu...tu...— y yo no lo puedo creer, 《Caperucito Rojo... ¿Es Mi Amor Destinado?》

Y si antes estába celosa, ahora que esa chica se agarro del brazo de él, de MI AMOR DESTINADO... 《¡No lo soporto más!》grito mentalmente. Lo posesiva me esta ganando.

Me dirijo hacía ellos parándome enfrente.

《— ¡Suéltalo! –le espetó, y la loba lo suelta bajando la cabeza, no pierdo el tiempo y le hablo mentalmente: ¡ÉL ES MÍO, NUNCA, JAMÁS, LO VUELVAS A TOCAR O TE ARRANCÓ LA CABEZA!》 Ella me dice: "Si su alteza, no... no sabía que él era su Destinado... ahora me retiro...lo...lo siento" su cuerpo tiembla, y no es para menos. Yo soy un Alpha, una muy territorial,  y no solo eso, el hecho de que él sea mi pareja, es aún más peligroso para toda aquella loba que intente acercarse.

Ella desaparece de mi vista, y yo la dejo vivir. Ahora yo y él estamos solos, ya que Aurora se ha ido para avisar a mis padres. Lo observo, y ahí están esos hermosos ojos miel, su olor es un afrodisíaco para mis sentidos. Mi cuerpo entero quiere sentirlo.

— ¿Qué te pasa? ¿acaso estás loca o eres una de esas acosadoras que ya me tienen harto? –me espeta sacándome de mis felices pensamientos. Me acerco mirándolo fijamente, él retrocede, yo sigo caminando mirándolo fijamente, él sigue retrocediendo hasta que termina chocando contra su Ferrari Rojo. Entonces suena algo en su bolsillo y saca un iPhone, aleja su mirada de mí y responde a quien sea que le llama.

— Sí, ya voy... está bien...igual te amo. –sus palabras me duelen y enfurecen al mismo tiempo. Lo observo hablar hasta que corta la llamada. Entonces su mirada de nuevo se enfoca en mí un poco demasiado enojado– mira niñita con complejo de no sé qué, no tengo tiempo de jugar contigo, "A quién te quema primero con la mirada" así es que, ¡adiós! –pero antes de que se aleje un paso más, lo tomo con ambas manos por la chaqueta, y lo hago caer sobre el capó de su Ferrari Rojo. Sus ojos se abren por la sorpresa, e impulsivamente acerco mis labios a los suyos y lo besó colocándome sobre él.