Setenta y nueve ✔️

Dereck

¿Qué está pasando aquí?

Es lo primero que pienso al entrar a casa y ver a mi novia y a mamá hablando, quien llegó hoy de uno de sus tantos viajes.

- Buenas - saludo para hacerles saber que estoy aquí, pero parece no importarles - dije buenas.

Cuando termino de hablar parece que si me prestan atención porque dejan de hablar y se centran en mi.

- Hola hijo ¿En qué momento llegaste? - Pregunta mamá.

- hace un pequeño tiempo.

- Que bien, ven siéntate estaba hablando con tu encantadora novia. Me cae súper bien.

- No gracias, prefiero subir a mi cuarto. Acabo de llegar del gimnasio y de verdad estoy cansado. Quiero tomar una ducha.

- Te acompaño - dice Alicia haciendo el amago de levantarse.

- Oh, no te molestes. Quedate hablando con mamá, se ve que se llevaron súper bien.

- Está bien - me da una sonrisa y sigue hablando con mi progenitora.

Subo las escaleras directo a mi habitación y me quedo a mitad de esta cuando escucho algo que me deja atento en su conversación.

- No sé, siento que por andar con la estupidez esas de las cartas cursis que le envía esa chica que ni idea de quién es, no me presta la suficiente atención que merezco - dice Alicia.

- oh querida mi hijo es así, el se encapricha. Ya verás que en un par de días ese caprichito de la chica de las cartas se esfumara, ya verás.

- Eso espero.

Subo a mi habitación molesto, no me molesta que hablen de mi, eso es lo mínimo. Lo que me molesta es que hablen de un tema del que ni siquiera tienen la más mínima idea.

A Alicia le conté solo un cuarto de la historia sobre lo que está pasando con la chica de las cartas. No quería que se enterará por nadie más, eso es de lo que se basa una relación confianza y comunicación.

Pero al parecer soy yo el único que tiene presente eso, pues si le molestaba el tema de las cartas yo lo paraba. Nunca me lo dijo, pensé que no le molestaba en lo más mínimo, pues es una chica que me cuenta sus cosas, una chica que no conozco pero se ha vuelto una amiga para mí. Como bien lo dijo en una de sus cartas si este asunto le molestaba a Alicia ella podía parar y yo me pondría del lado de Alicia.

Pero qué se ponga a hablarlo con mamá me molesta, no veía a mi madre desde hace ya un buen tiempo y ahora se aparece y cree que sabe todo de mi vida.

Me tomo una ducha aún pensado y me pongo mi ropa para bajar y ver que aún Alicia y mamá siguen hablando.

- Alicia, aún sigues aquí.

- Sí, te estaba esperando. ¿Vamos a tu cuarto? - me pregunta y luego se voltea hacia mamá - Si no le molesta, claro.

- Oh, no, claro que no, pueden ir tranquilos, yo voy a salir de compras. Nos vemos al rato - se levanta del sillón y se acerca a darle un beso a Alicia en la mejilla.

Yo le hago una seña a Alicia para que suba y ella encantada lo hace.

- Y bien ¿Qué querías hacer en mi habitación? - pregunto una vez que estamos.

- Divertirnos - su voz sale baja, ronca y seductora.

Se acerca lentamente hacia mi, su trasero se menea y su mirada me escanea de arriba a bajo con deseo.

- ¿Cómo? - pregunto con voz ronca por el deseo.

- Creo que tengo una idea - se acerca a mi  y comienza a besarme y pegarse a mi.

Yo solo la agarro por la cintura y la pego un poco más a mi.

Mi celular suena por mi escritorio y me separo un poco de Alicia y veo hacia donde está sonando.

Pero al parecer Alicia tiene otros planes porque me voltea la cara y hace que la bese de nuevo.

- No contestes - me dice Alicia aún besándome y sobándose encima mío.

- Puede ser importante - me separo de ella - ya seguiremos.

Me separo por completo y ella me ve molesta.

Veo en el identificador el nombre de Carlos.

- Dereck al habla - digo cuando contesto el celular.

- Amigo te estamos esperando ¿Donde se supone qué estás?

- En mi casa ¿Para que me esperan?

- ¿Para que más tonto? ¡Pues para resolver la segunda carta de anónima retrasado!

- Oh mierda me había olvidado - me doy una palmada en la cara.

- Ya lo suponía. Me haces el favor y mueves ese trasero hacia acá ya mismo, a menos que esté interrumpiendo algo.

Volteo a ver a Alicia y le encuentro en mi cama, me tienta. Pero a la vez quiero saber que tenía anónima en esa carta.

- No, ya voy para allá.

- Bien, te esperamos - cuelga.

- ¿A donde vas? - pregunta levantándose de la cama molesta.

- Voy a salir con los chicos - respondo poniéndome mi camisa.

- ¿Y me vas a dejar así? ¿Es en serio? - se ve molesta y con mucha razón.

- Esto es importante Alicia - tomo mi celular para salir.

- No, se supone que yo soy más importante que cualquier otra cosa Dereck soy tu novia, estás siendo muy irracional, estamos aquí y de repente te vas.

- Sí pero por ser mi novia no significa que debas tener toda mi atención.

- Claro que sí.

- No, no es así y ¿Sabes que Alicia? Creo que esta relación no nos está llevando a nada bueno. Creo que... - no me deja terminar.

- No Dereck, no te atrevas a terminar conmigo.

- Pues mira como me estoy atreviendo, ya lo dije, esto - nos señalo a los dos - no nos está llevando a nada, nuestra relación desde que la iniciamos se volvió muy tóxica.

- Eso no es cierto Dereck, nosotros nos amamos. ¿Cierto? - nos señala a ambos - te lo dije, Dereck. Estás siendo irracional. 

- No, me gustas o bueno, lo hacías - paso mi mano por mi nuca incómodo - y si es cierto, siempre estamos peleando, revisas mi celular siempre que puedes, eso no es sano.

- ¡Es que yo sé que me estás engañando!- me grita haciendo que me sobresalte.

- No lo hago Al y siempre te he dejado eso en claro. No tendría porque fijarme en otra chica cuando estoy en una relación contigo.