Hola anónima
Debo admitir que me siento un poco nervioso haciendo esto, jamás lo he hecho y jamás me imaginé haciéndolo. Pero aquí estamos. Sinceramente, no tengo no idea de dónde dejar esta carta para que no se pierda ni caiga al piso. Ya se me ocurrirá algo.
Primero quiero remarcar que gracias a ti no me aburrí en estas vacaciones, la búsqueda del tesoro me encantó.
Segundo, gracias por tus cartas y por las sonrisas que me sacaste cuando pensé que ya nadie podía cambiar mi nube gris.
Tercero, quiero que tengas este anillo, no tengas miedo, no es de compromiso ni nada de eso, simplemente lo vi, me gustó y pensé en ti.
¿Ahora qué? ¿Ya se supone que debo despedirme? Creo que sí.
Bueno, eso es todo por hoy.
Se despide Dereck.