Día de acción y dolor

Aproveche que ya estábamos juntos y rediseñamos las rutas de los próximos encargos. Terminamos alrededor de las cinco de la mañana y de ahí partir a la casa rápidamente me di una ducha y eche a lavar la ropa que tenía ya que la camisa se manchó de sangre.

— ¿despierto tan temprano?— dijo Marlene al verme desayunar

—Lo mismo digo— la llamé para que se siente a mi lado —acostumbro a despertar temprano para hacer una pequeña pero necesaria rutina de ejercicio—

—mmm...muy interesante— hablo mientras saboreaba los huevos revueltos de mi plato

—despertaste con buen apetito hoy— reí a carcajadas al ver como intentaba tomar un trozo de huevo que me había robado y cayó en medio de sus senos

—¿qué?, es mío– dijo cuando finalmente logró comérselo

—no sabia que mi desayuno fuera tuyo, pero si lo deseas— arrastre el plato hasta ella

—perdón yo...— su cara se ruborizó

—no tienes qué disculparte, preparé más huevos— camine hasta la cocina

—¿sabes cocinar?—

—sé defenderme en situaciones difíciles — mire por el ventanal que daba vista hasta él área del comedor

—quien diría, eres toda una joyita —

—nos están siguiendo señor— hablo el chofer irrumpiendo la charla que tenia con Marlene

—¿desde cuando?— mis sentidos se alertaron y no pude pensar más que en Marlene y el bebé en aquel momento

—los de atrás me informan que nos siguen desde que salimos de la casa señor— mire hacia atrás desde el asiento, pero no pude ver nada

—ya la placa fue investigada y el auto recién fue robado, por lo que le dimos parte a las autoridades—

—gira a la izquierda— sugerí y la orden fue acatada —a la izquierda nuevamente —

—tengo miedo Taylor— Marlene lloraba y sus manos estaban temblorosas encima de su vientre

La abracé y le di un beso en la coronilla —todo va estar bien —

—y ahora qué señor—

—gira a la derecha y adéntrate hasta el subterráneo, a la salida de allí siempre hay una patrulla— Sentí como Cristian piso el acelerador hasta llegar al subterráneo, pero antes de salir el vehículo que nos seguía tomó la delantera y al salir dió un giro en "U" hasta quedar frente a nosotros y procedieron a disparar, me agaché junto a Marlene, luego hubo un intercambio de disparos con mis guardaespaldas, la policía y quienes nos estaban disparando.

En el tiroteo Cristian resultó herido y los atacantes fueron abatidos

—siento una fuerte quemazón en mi brazo— hablo Marlene luego de parecer estar muda, le revisé y al parecer una bala la había rozado, esperamos un poco hasta que llegara la ambulancia y fuimos hasta ella para que sea atendida

—Señor Maher— llamó un oficial

—señor Contreras — leí la pequeña placa que traía incrustada en su ropa

—necesito hacerle algunas preguntas — mire a Marlene y esta me indicó que estaría bien

—desde luego— caminamos hasta la patrulla de la cual sacó algo parecido a un cuaderno, lapicero y una grabadora

—ahora que recuerdo, ¿no es usted hijo del empresario que le asaltaron una embarcación la semana pasada y aniquilaron sus tripulantes ?— asentí — me resulta muy extraño todo esto—

—la verdad es que para todos han sido unos días duros oficial, nunca en nuestros treinta años en el mercado nos había pasado algo igual—

—esto no son cosas al azar señor Maher, estos hechos van de la mano, ¿algún enemigo que mencionar?— esta vez dejo el lapicero y me miro fijamente

—no oficial — me apoye sobre la patrulla

—ha tenido una semana con mucha acción, ¿no le parece demasiado?—

—¿quiere dejar de insinuar e ir directo al punto?— no pude seguir con la calma necesitaba saber si Maykel tiene sus manos metidas en esto

En ese momento llegó Marlene —no quiero estar aquí Taylor, oficial, ¿nos podemos ir?—

—sí señora, por el momento les recomiendo que no salgan de la ciudad, por lo menos hasta que el caso no sea aclarado—

Tenía el ligero presentimiento de que aquel oficial sería una molestia en el cul*. Al lugar llegó la prensa, por que el cuerpo de seguridad hizo un círculo para sacarnos del lugar. Cuando llegamos a la casa, nuestros respectivos padres estaban allí y en cuanto nos vieron se  abalanzaron hacia nosotros

—¡Marlene!—

–¡Taylor!— la voz de ellos era de alivio, luego de abrazarnos intercambiaron e inmediatamente iniciaron las preguntas

»¿cómo están?, ¿qué fue lo qué pasó?, ¿quien hizo algo así?, ¿porque a ustedes?...

—¡Basta!— Marlene y yo hablamos al mismo tiempo

—cálmense ¿si?, nosotros también necesitamos procesar todo esto —camine hasta la sala de star junto a Marlene y los demás nos seguían

Nos sentamos, tomé un largo suspiro —todo pasó muy rápido , fuimos informados de ser perseguidos y al momento estábamos siendo atacados— Marlene se veía aterrada

—esa herida tesoro— preguntó Cristóbal mirando su brazo

—nada de que preocuparse papá, la bala solo me cepilló — hablaba tratando de restarle importancia, pero su rostro la delataba, se puso de pies para ir por un poco de agua y ví una ligera mancha de sangre en el lugar donde ella estaba sentada, así que mi vista viajo directamente hasta donde ella estaba y se le veía una gran mancha en la parte baja de sus glúteos