MARLENE
La mañana transcurría con la misma rutina de cada día, sin alteraciones, todo tal cual, primero el desayuno, hacer un poco de ejercicios, bañarme nuevamente y acostarme a escuchar un poco de música, la cual sirve como un poderoso catalizador de emociones, estimulando la frecuencia cardíaca del feto y actuando como 'sintonizador', esto lo aprendí con el embarazo de mi Hope.
Sonreí ante el recuerdo mi embarazo y me fue inevitable no llorar un poco ante su recuerdo, un recuerdo sin rostro, pero sí con un latido durante varios meses. Sumergida en aquellos recuerdos quede profundamente dormida.
Entre medio del sueño, escuche varios gritos, seguido de disparos y fue entonces cuando desperté abruptamente
—¡SEÑORA MARLENE!— escuche que trataban de tirar la puerta
—¿QUÉ SUCEDE?— abrí la puerta y el hombre que la intentaba abrir se cayó de bruces
—TENEMOS QUE IRNOS— me tomó del brazo y corrimos por el pasillo, yo trataba de cubrir mi vientre y lloraba desesperada por temor a volver a perder mi embarazo, mientras corría un vidrio se incrusto en mi pie y caí al piso por el fuerte dolor
—PÓNGASE DE PIES SEÑORA— me ayudó a ponerme de pies —AYÚDEME SEÑORA, SOLO NO PUEDO— camine como pude sin apoyar mi pies lastimado, hasta que vi a Matt en mi campo de visión y rápidamente fue hasta mi
—¿estas bien?, ¿que te hicieron?— preguntó sujetando mi rostro
—me corte mientras trataba de huir— limpie mi nariz —¿que sucede Matt?, ¿porque nos atacan?— pregunte descolocada
—no se quienes son Marlene, pero no te preocupes, te sacaré de aquí, a ti y ami pequeña— se puso en cuclillas y sacó el vidrio que estaba en mi pies, rompió un trozo de su camisa y lo amarró en mi herida
—SEÑOR ES TAYLOR, ÉL Y TODA SU GENTE ESTÁN AQUÍ, EL SEÑOR ENZO ACABA DE LLAMAR —escuchar aquello hizo que mi corazón se acelerara de la emoción
—si se te ocurre hacer algo o decir algo, aunque sea el mínimo detalle juro que te mato y luego hago lo mismo conmigo— asentí —ahora camina...ya estas advertida— esta vez camine delante de él, mientras él me apuntaba con su pistola y de pronto lo vi, lucía un poco delgado, su barba estaba desaliñada, su ropa...era todo un desastre, nada comparado al hombre arrogante e imponente que conocí, era un despojo humano
—¡MARLENE!— dijo en un grito desesperado, lo cual me desgarro el alma
—¡TAYLOR!— vi lágrimas en sus ojos al ver mi ya evidente embarazo y con todo el dolor de mi corazón y sintiendo la pistola de Matt en mi espalda le tuve que mentir —LO SIENTO, PERO NO ME IRÉ CONTIGO— y fue así como le rompí el corazón al hombre que amo, al que hasta ahora se que no ha dejado de buscarme, de hacer todo lo posible para estar a su lado y ahora tal vez piense que me enamore de Matt y que mi embarazo es suyo, tal vez ahora lo he perdido para siempre.