Capítulo 65

—Tenemos una teoría de lo que podría haber pasado Sol — escucho la voz de Izán ahora al teléfono. 

—Te escuchamos — le digo al cruzarme de brazo y de piernas. 

—De los dos camiones, los hombres que conducían son nuevos. Dos llevaban un mes conduciendo nuestros camiones y los otros dos los hemos contratado hace unas semanas. Dos para ser exactos — dice Izan. 

—¿Crees que haya sido un robo? — le pregunto sin entender. 

—No. Al ser nuevos les dejamos de copiloto de prueba por estas dos semanas como siempre hacemos. Y son los que se encargan de revisar las cargas en las paradas — explica Izan. 

—Podría ser que ellos no contaron bien las cargas, entonces — le digo buscando la forma más lógica de justificar lo que ocurrió. 

—O puede que no lo hicieron — dice Logan con seriedad — Piénsalo. Ocurren muchos robos por la carretera especialmente cuando lo dejan en algún lugar oscuro y si estaba de noche cuando paso. Lo más lógico es que solo bastarán unos minutos para que sacaran algo y sin que nadie lo notara — termina de decir dejando el computador detrás de nosotros en donde está la cama. 

—Creo que lo que dice el Señor Logan tiene algo más de lógica si nos vamos por la negligencia que podría haber tenido los muchachos — dice Iker. 

—Concuerdo — dice esta vez Izan. 

—¿Has hablado con ellos? — le pregunto pasando mi mano por mi pelo nerviosa. 

—Aún no. No hemos tenido tiempo Sol. Ahora quien se quedó recibiendo los llamados es Oliver — dice Izan. 

—Izan encárgate de hablar con ellos y que te den una explicación y también habla con seguridad. Iker encárgate de que lo que ha faltado sean puesto todo en cajas y envueltos en papel para enviarlos sellados. Quiero que Oliver y Benjamín vayan a dejar lo que falta. Me encargaré de hablar con los que han tenido el problema — les digo.

—¿Estás segura que quieres hacerlo?, Nos han dicho de todo hoy — dice Izan de seguro haciendo una mueca de desagrado. 

—No importa. Lo importante es que no se corra la voz de alguna estafa de la empresa Williams — 

—Algunos ya estaban pidiendo devolución o una explicación — habla Iker. 

—Bien. Eso déjamelo a mí ahora — les digo. Nos despedimos y cortó la llamada resoplando — Sigo sin entender porqué me pasan estas cosas a mí — susurro para mí pasándome las manos por mi cara y pelo. 

—No solo te pasan a ti Sol — habla Logan pasando su brazo por mis hombros por lo que recuesto mi cabeza en él — Por más que te asegures de tener a todos los que necesitas, siempre habrá algún error. Y no precisamente es culpa de uno. Sí, deberías de estar más al pendiente, pero tanto Iker e Izan saben que estas ocupada con otros asuntos igual de importantes — dice mientras que yo solo suelto suspiros — Por lo que vi son solo diez compradores de las que les faltaron — 

—Diez Logan — murmuró agobiada — Diez es mucho — susurro. 

—Pero diez de treinta Sol — dice Logan apretujandome hacia él — Eso es poco. Además vas a enviar lo que ha faltado y si alguno la rechaza queriendo la devolución de dinero, se lo haces y ya — dice. 

—No es tan fácil — le digo mordiéndome el labio y cerrando los ojos — Siento que lo estoy decepcionando sin haber comenzado — susurró más para mí que para él. 

—Si que lo estás decepcionando — concuerda Logan haciendo que de inmediato me siente recta y lo mire con mi ceño fruncido — Lo estás decepcionando ahora. Al decirlo y estar así de mal sin antes haber comenzado e intentado solucionar el problema — dice estirando su brazo hasta tomar mis manos que estaban en mi regazo — Sí quieres que todo esté en orden, comienza por llamar a esas personas y ellos se encargaran del resto — agrega sonriéndome. Por lo que también lo hago pero con desgano. 

—Bien — 

Justo en ese momento escuchó el toque de la puerta. Por lo que Logan se levanta del sofá y sale del cuarto diciendo que debe ser Emma con Harry. 

—Aquí vamos — susurro para mí al tomar de nuevo el computador para tomar los números de teléfonos de los compradores. 

0—0—Horas después—0—0

—Por supuesto Señor Timothy. Me encargaré de que llegue lo que ha faltado — le digo asintiendo aunque no me vea. 

—Bien. Gracias por llamarme directamente, eso habla muy bien de usted — dice con su voz algo áspera y grave. 

—Gracias a usted por contestar y comprender — le digo ocultando un sonoro suspiro luego de estar hablando por casi treinta minutos o puede que más. Nos despedimos y cortó la llamada suspirando fuertemente al haber acabado con todos los que tenía que hablar. Son alrededor de las siete de la tarde y seguía sentada sobre el sillón que está delante de la cama. 

—He pedido que traigan la cena — habla Logan haciendo que voltee de inmediato a su dirección y verlo apoyado en el marco de la puerta de brazos cruzados — ¿Terminaste? — pregunta ladeando su cabeza hasta dejarla reposar en el marco de la puerta. 

—Sí. Todos entendieron y resultó mejor de lo que esperaba — le respondo colocándome de pie y estirandome un poco bostezando a la vez.