Castillo De Cristal.

Capítulo 20: Dos Corazones Sin Latido.


Estando en el hospital, Adriana seguía en shock, su mirada, volvía a ser la misma que en algún momento en vez de tener sus ojos ese brillante color miel, tenía los ojos grises llenos de oscuridad, vacíos...

Laura(corriendo junto con Fernando): ¡Amiga! ¿Qué paso? ¿Cómo está Harold?
Adriana: Está en terapia intensiva, no me dejan verlo y ningún maldito doctor sale a decirme algo...
Laura: No te preocupes amiga, voy a preguntar a la recepcionista.
Fernando: Adriana, se que, la ultima vez que te ví fuí muy grosero contigo pero, te quiero mucho y sabes que cualquier cosa aquí estoy para ti junto con Laura.
Adriana(secando sus ojos) : Gracias Fernando, sí, no acabamos nada bien pero, ya maduramos y pues ya no te preocupes.
Fernando: Se que es una pregunta algo imprudente pero, ¿Que le pasó a Harold? 
Adriana: Dijeron los paramédicos que le dió un infarto, que su pulso era débil. Nose que pasó, en la mañana estaba bien me despedí de él y me dijo lo mucho que me amaba ...

Pasaron minutos que parecieron horas y por fin un doctor salió a avisar a los familiares lo que pasó.

Doctor(gritando): ¡Familiares del joven Harold!
Adriana(levantándose de su asiento): Yo soy su prometida ¿Qué le pasó a mi novio? 
Doctor: Bueno, nose como decirlo, hace mucho le dije a Harold que tenía que hacerse un chequeo ya que varias veces se desmayó y lo trajeron varios amigos suyos a este hospital.
Adriana:¿Cómo? ¿Hace cuánto? 
Doctor: Hace un año, antes de que se fuera a Estados Unidos.
Adriana: Pero, va a estar bien ¿Verdad? (Gritando y llorando ) ¡Dígame que va a estar bien por favor! Le doy todo el dinero que tengo pero salvelo.
Doctor: Por favor señorita, tranquilícese o voy a tener que ponerle un sedante.
Adriana(agitada) : ¡No me diga que me  calme es un inepto que no pudo avisarle a sus padres o a mí de los estudios que tenía que hacerse! ¡Es un estúpido!

Cuando Adriana empezó a empujar al doctor de una forma agresiva, enfermeras se la llevaron a un cuarto y la sedaron para que pudiera tranquilizarse y al mismo tiempo, Harold despertaba débil susurrando el nombre de Adriana.

Harold(susurrando): Adriana... Mi amor... ¿Dónde estas? ...
Enfermera: Si es la señorita que estuvo aquí armando la tercera guerra mundial, está dormida, usted descanse y mañana la traemos aquí con usted.
Harold, simplemente no pudo decir una palabra y volvió a estar inconsciente.

Al dia siguiente, Adriana más tranquila, fue a visitar a Harold después de que sus padres lo hicieran.

Adriana: Mi amor, (lo abraza) no me vuelvas a dar esos sustos y cuando estes mejor, te harán los estudios que el doctor te pidió desde hace más de un año. 
Harold(con voz débil): No te enojes, lo hice porque no lo creí necesario, pero, prometo hacermelos, ya falta un mes para la boda y debo de estar mejor que nunca(sostiene su mano).
Adriana: Por eso no te preocupes ahora, todo va a estar bien sí mi amor, esta noche me quedaré hoy contigo.
Harold: Te amo Cristalito, nunca lo olvides. Ven, vamos a dormir.

Esa noche, nunca fue olvidada por Adriana, el corazón que latía por ella, dejó de hacerlo... Nunca más quisieron hacerle aquellos estudios a Harold, pero, por lo que determinó el doctor, su corazón pudo haber estado débil desde que nació, pero nadie se había dado cuenta de cuando él se agitaba tan rápido al correr, los desmayos o los dolores en el pecho que tuvo...

      



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En el texto hay: depresion, amor, reflexion de la vida

Editado: 01.08.2023

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