Al abrir los ojos lo primero que percibo es al chico nuevo frente a mí con una expresión de curiosidad en su rostro. Me levanto asustándolo un poco, luego sonríe ampliamente.
—¡Oigan, despertó!—se aleja de mi y yo quedo confundida—te desmayaste anoche—dice como si nada y eso no disminuye mi confusión.
—¿Cómo estoy aquí? ¿Cómo tú estás aquí? —me levanto tambaleándome y siento su firme agarre en mi cintura evitando mi caída.
—Los seguí—me ayuda a sentarme—lo siento, sé que me querías alejado de ustedes, pero...los admiro y me emociona conocerlos y saber que hacen algo tan increíble—habla con emoción.
Los chicos entran sonriendo, al verme se detienen dejando de sonreír. Miran al chico y luego a mí.
—No te enojes, pero él... te salvó—Fátima baja la mirada como si la fuera a regañar—él pasó el resto de la noche a tu lado—frunzo el ceño mirándolo y él sonríe apenado.
—Estaba preocupado—dice él.
—Gracias chico nuevo...
—Me llamo Blake—vuelve a sonreír.
—Gracias Blake, pero debes saber que no me agradas y prefiero que te mantengas alejado de nosotros.
—Es buen chico—dice Andrea, ruedo los ojos—vamos... deja que se junte con nosotros, Blake nos ha ayudado más de lo que crees—de nuevo estoy confundida.
—Anoche al desmayarte, el empezó a pelear con los fantasmas y acabó con gran parte de ellos, sin él no te hubiéramos podido ayudar—agrega Felipe, sentándose a mi lado y cayendo al piso.
Todos fruncen el ceño luego de escuchar lo que dijo Felipe, hasta el propio Felipe, ninguno se detuvo a pensar la situación.
Que lentos son todos.
—¿Cómo que luchó con ellos? —lo miro fijamente y se pone nervioso—¿Quién eres?
—Yo...yo...
—¿Quién rayos eres Blake? —los chicos lo acorralan y él se siente intimidado.
—Bien, les mentí...—suelta un suspiro antes de continuar, mira a los chicos y luego al piso buscando las palabras para aclarar el problema en que se ha metido al mentirnos—yo estuve con el señor Cecilio antes de venir a vivir acá—nos sorprendemos al escuchar su nombre.
—Tienes que decirnos todo—aparece el tío Darío junto al tío Ryan observándolo con seriedad.
Lo hacen salir de la habitación hacia la sala y nosotros los seguimos. Blake no parece asustado, pero algo en su mirada me perturba y lo peor, lo que más me asusta es que no puedo leerle la mente. Es extraño porque se la puedo leer a todos menos a él.
No se lo dije a mi madre porque sentí un poco de temor a lo que ella vaya a decirme sobre eso.
Blake está sentado en una silla y todos nosotros estamos frente a él. Se acomoda en la silla listo para decir lo que tenga que decir, pero no habla, no se si por temor o porque es más grave de lo que parece. Mi tío Ryan lo ínsita a hablar.
—Creo que sería mejor ir a ver a mi padre y así podríamos explicarle todo acerca de Cecilio—mis tíos se miraron frunciendo el ceño.
Les leí la mente y se están debatiendo en si confiar en el chico o no.
—Bien, vamos con tu padre—asintieron levantándose y saliendo con él. Los seguí y mi tío Ryan me detuvo—quédate aquí.
—Ella debería ir, esto tiene que ver con ella—me mira fijamente, seguido de una sonrisa ladina.
—Bien, pero el resto se queda—todos bufaron molestos—Felipe quedas a cargo...y por favor evita lastimarte que después quien aguanta a tus padres—asintió.
Los cuatro salimos subiéndonos al auto parqueado justo afuera de la agencia. Blake y yo nos sentamos atrás en completo silencio. Lo miro de reojo cada cinco segundos, él no me termina de convencer y tenerlo a mi lado me hace sentir intranquila, en alerta a cada uno de sus movimientos.
Veo que levanta la mano y rápidamente me alerto.
—Tranquila, no te haré nada—sonríe y un escalofrió recorre mi cuerpo.
—No le hables—dice mi tío Darío a través del retrovisor—no me agradas.
—Usted a mí tampoco, señor—el tío Darío lo fulmina con la mirada a través del retrovisor.
—"Vaya nos salió rebelde el muchacho"—dice mi tío Ryan—"Lucia, esta alerta, no me fío de el"
—Es lógico que no me tengan confianza—nos sorprendemos—si, tengo habilidades como ustedes—este chico tiene más secretos de lo que creemos, es un descendiente de bruja porque ¿Qué lógica encontramos a que él tenga habilidades? ninguna—y menos confianza me tendrán después de que sepan la verdad.
Creo que es mala idea ir solo nosotros a su casa, donde nos puede atacar en cualquier momento y bajo cualquier método. Se que no somos los únicos descendientes de brujas.
Hay miles que están ocultos o no saben controlar sus poderes. El tío Cecilio creó la agencia para ayudarlos y a la vez acabar con los Zabat y que decidiera ayudar a este chico y su padre significa que confía en ellos, pero también puede que él nos esté mintiendo y nosotros seamos unos idiotas yendo camino al peligro.