Capítulo 35:
Acuerdos
Dimas
Los lobos se han desplegado por toda la calle, no en busca de proteger a la humanidad, sino para encontrar a Gabriel y hacerlo sangrar. Han dejado a Anastasia de lado porque se encuentra bajo la protección de los vampiros, y recuperar un cuerpo no vale tanto como para iniciar una guerra entre dos clanes.
Esta zona se encuentra desprotegida, mientras la manada esta de cacería, los demonios femeninos también llamados las damas del infierno sobrevuelan la ciudad tentando las mentes frágiles de los humanos. Por ahora nadie ha salido de sus hogares, pero no sé cuánto tiempo puedan permanecer dentro de sus casas. He estado pensando en cómo deshacernos de ellas, no estoy muy seguro de que tan corpóreas sean en el cielo parecen sombras fantasmales, pero ninguna ha tocado el suelo. No sé si sea porque todo este territorio ha sido protegido por un sello de la casa de Gabriel, o que aún no tienen una víctima a la que atacar.
Solo nos queda esperar a ver qué efecto tiene las protecciones en ellas.
Es el primer día de oscuridad, y ya se han registrado varios ataques en las zonas cercanas. Toda clase de criatura ha emergido del infierno, apenas y podemos controlarlo. Lo único bueno que hemos sacado hasta ahora son las predicciones que manejan los altos generales del infierno sobre los celestiales, que es más de lo que saben los arcanos.
El hijo de Geraldine al unirse a los rebeldes se encargó de eliminar toda información referente a la existencia de los celestiales para que nadie pudiera impedir la muerte y profanación de los sellos.
Durante siglos han buscado a los elegidos por los arcángeles para hacerlos doblegarse y sucumbir ante la oscuridad, algo que puedo certificar con mi propia experiencia en el infierno, yo no era el único celestial de Rafael que se encontraba allí. Algunos se han perdido por completo entre la maldad y son demonios, o como los conocemos en la tierra, rebeldes. Mientras que otros, se arrepintieron muy tarde y son torturados como lo estuve yo.
Aunque tres de nosotros cambios de decisión al momento de renacer, al morir cada uno se mantuvo firme en su destino ocasionando el desequilibrio en el mundo que vivimos ahora. Las siete puertas quedaron como ranuras entre dos mundos permitiendo el paso de las tinieblas, sembrando el miedo y el horror en la humanidad. Ahora que cuatro de ellas fueron cerrados, todo es peor.
—Hay una razón por la que ustedes han sido cazados desde mucho antes de que fueran celestiales —dice Gabriel mirando por la ventana hacia la calle.
Todavía llevamos la misma ropa manchada de sangre de anoche, aunque las cosas no han cambiado mucho, el amanecer no ha traído más que oscuridad a la tierra.
Nos hemos estado ocultando desde hace un par de horas mientras decidimos donde ocultar al demonio. Anastasia está resguardada con los vampiros, donde han llevado el cuerpo de Karla y sepultado en el patio de la gran mansión de la familia de Romina. A este ritmo ese lugar se convertirá en un cementerio, y es raro que los vampiros lo hayan permitido. Ellos comparten la misma ideología de los lobos, cremar los cuerpos de sus muertos para que no haya nada que usar por los rebeldes. El mayor miedo de un vampiro es ser un sin alma, perder la poca humanidad que poseen, un cuerpo convertido en cenizas no puede levantarse y asesinar sin piedad.
—¿Y esa seria? —pregunta Sandra cruzada de brazos. Tenemos como cuarenta minutos ocultándonos en una casa que tenía las puertas abiertas, no está abandonada, pero tampoco están sus habitantes.
Daniel regresó a la academia, decisiones transcendentales se tomarán para Emiliano y Santiago. Para cuando regrese ninguno de los dos estará allí, puedo imaginar cómo debe sentirse Romina, ella salió ilesa de esa visita a la puerta del infierno porque nunca le permití alejarse de mí ni un solo segundo. Desde el momento en que pusimos un pie en las ruinas de ese edificio me llene de miedo ante la idea de perderla. Dess debe estar destrozada.
Gabriel se ha recuperado de sus heridas, yo en cambio, el hueso ya no se ve, pero mi muñeca le falta mucho para volver a ser la misma de antes. Mi habilidad de sanación ha trabajado con lentitud, y no haber dormido nada en las últimas horas no me está favoreciendo en nada. Por lo menos puedo moverla sin incomodidad.
—Si un celestial regresa de la muerte puede elegir como ya se han dado cuenta —se aleja de la ventana—. Ellos han conseguido a tres celestiales, y han intentado hacer que los demás se unan a ellos. Han intentado tener a Dessire por todos los medios. Si alguno de ustedes regresa al infierno existe la posibilidad de que otro celestial los reemplace, lo que ellos buscan es despertar a celestiales a su conveniencia una vez que cada uno de ustedes allá muerto.
—Eso significa que ¿podría regresar otro celestial ahora que Dess atravesó a uno en el pecho? —pregunta Sandra.
Mi mente en cambio solo concebía la idea de que los rebeldes intentaran asesinarnos para poder tener las puertas abiertas si conseguían reemplazarnos. Pero esa idea también es válida.
—Es lo que se rumorea —afirma Gabriel. Se acerca a nosotros y baja el tono de voz como si nos pudieran escuchar—. Existe la posibilidad de que tú hermana, sea un ángel de la muerte, y por lo visto se está encargando de desviar las almas de los posibles celestiales del camino al infierno. Razón por la que hay que cuidar de sus cuerpos, para que puedan regresar como lo hicieron ustedes.
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Editado: 27.07.2021