Epilogo

Un par de meses después.

Justin y Dustin estaban frente a ella, ambos con las manos puestas en el muy abultado vientre de la chica.

- Vamos bebé, ¿eres niña? - dijo el mayor de los gemelos - patea una vez para sí y dos veces para no - El bebé se movió - te lo dije Dustin es niña - el menor negó.

- Bebé ¿eres niño? patea una sí, dos no - el bebé volvió a moverse - te lo dije Justin es niño, ¿verdad mami?

Serena sonrió.

- Eso lo sabremos cuando nazca.

- Yo quiero que sea niña.

- Yo quiero niño, así cuidaremos mejor a mamá, además Zoey tendrá niña - Justin se quedó pensativo.

- Creo que tienes razón, ya tenemos a la bebé de Zoey, así que mami quiero un hermanito.

- Mamá ¿cuándo nace?

- Pronto.

- ¿Cuándo es pronto?

- No lo sé, él o ella nos dirán.

Ambos suspiraron.

- Eres muy injusto - susurro Justin al vientre - Vamos Dustin juguemos antes que llegue tía Sara con Damon.

El timbre de la puerta retumbo por todo el lugar, Serena a duras penas logró levantarse, sus pies se estaban hinchando últimamente debido al peso de su barriga de 37 semanas. Camino hasta la puerta para abrirla, frente a ella estaba la que fue representante de Austin. Zoey le dio una sonrisa cálida a lo que Serena la invito a pasar. Su cabello rojo estaba recogido en una coleta, vestía un vestido floreado de embarazada, a comparación de la de Serena, la barriga de Zoey era más pequeña y había sido confirmado que sería una niña a diferencia de ella que un mes daba niña y al siguiente niño.

- ¿Qué haces aquí?

- Vine a pedirte un favor.

- Dime

- Verás, por mi edad el embarazo es de alto riesgo y hay una pequeña posibilidad que muera en el parto - Serena asintió.

- Todos los embarazos son riesgos.

- Lo sé - ella hizo una mueca - arregle algunas cosas, entre ellas que si algo me llega a pasar la custodia de mi hija quedará en manos de Emma.

- Mala idea.

- También se eso, por eso te pido que no dejes que los gemelos se alejen de su hermana.

Serena se mantuvo en silencio unos segundos, no le agradaba la idea de los gemelos pasando mucho tiempo en casa de los Miller, no después de todo lo que había pasado pero tampoco podía negarse, pues Zoey no tenía culpa en lo que sucedió con el progenitor de sus hijos.

- De acuerdo. Pero tengo una condición.

- Eso me alivia – la pelirroja quien contenía el aliento logro liberarlo - Dime tu condición.

- Mamá... oh  Zoey... ¡Justin! Zoey está aquí con la bebé.

Vio la figura de Justin pasar corriendo.

- ¿Ya nació? ooo Hola Zoey.

- Hola cariño - Zoey sonrió.

El timbre fue tocado de nuevo pero esta vez quien abrió fue Nathan, detrás de él se fue Justin.

- ¡Yuuki! - grito el niño lleno de júbilo - mami llegó Yuuki.

- Mamá ¿quién es Yuuki?

Una mujer se apareció frente a ella, su cabello negro estaba corto hasta el cuello, tenía un característico pircing en la ceja izquierda, un tatuaje en el cuello, justo debajo de su oreja, era un escorpión. Su vestimenta era basada en cuero negro pegado como una segunda piel a su delgada figura, sus ojos negros se encontraron con los grises de ella.

- Te juro que cuando Ryan me lo dijo, no lo creí- hablo en japonés la recién llegada mirando a Dustin - debe ser un milagro - Serena asintió.

Nathan se aclaró la voz llamando la atención.