Tenía mi cabeza hecha un lío y yo se que no debería meterme en los asuntos de esas personas, la cosa aquí es que, como no hacerlo si ahora más que nunca van a empezar a negociar con mis padres, Akim ese es su nombre después de decirme su nombre se marchó, no sin antes decirme "No te metas en cosas que no son de tu incumbencia" pero estas cosas lo son, dejando aparte lo de su hermana o novia o lo que fuera aquella chica, pero por que mentir sobre que es su hermana y decir que es una Volkov cuando no lo es, cual es la necesidad, ¿acaso aquel Akim no tiene permitido tener un novia? y aunque se vea como una mentira piadosa o se le busque un buen sentido, no encaja para nada y, ¿los demás?, porque Akim me dijo que no lo llamara por su apellido acaso, ¿él tampoco era un Volkov?
(...)
― Ivette ― escuche como una voz varonil pronuncia mi nombre, y siendo así no es la de mi padre, ¡esperen! entonces ¿quién es?
Abrí mis ojos de golpe, y me encuentro con la cara de Akim escaneando, para luego de ver el susto que me pego, mostrarme un pequeña muy pequeña sonrisa.
― ¿Que haces en mi habitación? ― le pregunté, tratando de cubrirme mas con mi colcha.
― Vine a despertarte, ¿acaso no soy todo un caballero? ― creo que aun estoy soñando ― mira te traje el desayuno ― señaló la mesita y en efecto ahí estaba un bandeja con mi desayuno.
― ¿Estas bien? ― fue lo único que pudo salir de mi boca, lo que hizo aquí enseguida de aquello fue ponerse una mano en el pecho, tratando de verse herido por mi pregunta.
― Me hieres y sí, estoy de maravilla ― se acercó a la mesa y tomó la bandeja con sus manos y enseguida la puso sobre mis piernas.
― Lo prepare yo solito ― dijo a la vez que hacía una cara de orgullo ― alístate, saldremos más tarde ― bueno, eso no me lo esperaba.
― ¿Que dices? yo no saldré contigo.
― Si saldrás, por que tu necesitas tenernos a mi y a mis herman@s aquí y yo necesito hacer unas cosas en las que tu me ayudaras ― al terminar de decir aquello sonrió de una manera victoriosa, tal vez por que ahora mi boca está abierta, por la sorpresa de que el sepa lo que mi madre tiene planeado.
― ¿Como sabes eso?
― Haz escuchado ese famoso dicho "las paredes tienen oídos" pues bien, hay esta la respuesta, ahora bañate que hueles a puerco ― y salio de mi habitacion, si no fuera por que lo de antes me tenía un poco afectada, me hubiera avergonzado por aquel último comentario.
(...)
Después de estar lista, baje y lo primero que note fue que la casa parecía estar vacía, me diriji a la cocina para ver habia alguien ahi y si que habia alguien, estaba Akim.
― ¿Donde estan todos? ― el se volteo y me sonrió.
― Los despedi
― ¿Que? ― grite ― estas loco, esta no es tu casa imbécil ― a él parecía que le divertía toda la situación ― le dire a mis padres.
― Si me escuchas, no quedaras como una tonta frente a tus padres cuando los llames ― me voltee de nuevo hacia donde él estaba, y me plate con los brazos como jarra.
― Los despedí por que solo estaremos los dos ― abrí los ojos mostrando impresión a los que él habia dicho provocando que el riera ― y va a ser un largo tiempo, a mis hermanos los mande a un campamento y nuestros padres están haciendo grandes negocios, por lo cual tu serás mi sirvienta.
― Primero, eres un imbécil.
― Gracias.
― Segundo, no sere tu sirvienta.
― Lo serás.
― Tercero, eres hombre muerto.
― Bueno, dame permiso para correr.