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Los días pasaron de una forma que causó de todo en esos terrenos. Jules decidió volver a tomar la biblioteca como refugio y solo salir cuando sea necesario. Klaus aunque deseaba ir con Jules, la situación lo obligaba a intentar tomar una vida que lo aburria tanto que deseaba que terminara.
Eric recuperaba su actitud de siempre y empezaba a llevarse más con su padre. Gustave estaba feliz porque en la casa las cosas regresaban a lo que era antes, pero a su vez triste por como se sentía igual que antes.
Mientras que Dastan servía como mensajero entre Jules y Klaus cuando la cosa lo requería. Llevando gestos o mensajes y más porque sin que Gustave se diera cuenta el había salido de la enfermedad. Y todo gracias a todo lo que a Gustave le estaba afectando respecto a sus hijos.

-El baile es algo delicado, debe ser extremadamente elegante- empezó el maestro de baile que Gustave contrato.
-¿Qué parte de elegante y delicado no entienden?- preguntó al poco rato al ver cómo todos estaban tensos.
-No, no y no. Se mueven mejor las plantas, las plantas se mueven según el aire de una forma tan natural que parece que bailan- sonrió el profesor perdido imaginando todo.
-Va de nuevo- dijo cuando volvió a la realidad serio y la clase fluyó como iba, con todos nerviosos y tensos.

-Espero que esto mejore para la siguiente clase y que también haya un progreso mínimo pasable- concluyó con la clase y dejo que ellos se marcharán mientras el tomaba su libro para leerlo.
-Para ser alguien muy tranquilo se ve que nos odia- soltó Eric desesperado y adolorido.
-Ya tenía rato que no teníamos clases de baile, no lo olvides- le recordó Jules sintiéndose cansado y todo gracias a qué al bailar por los nervios se tensaba.
-Esta es la única clase que no te has librado.
-Ve el lado bueno tienes compania.
-Odio esto. Las clases agotan- soltó Eric ya que aún le faltaban clases para concluir el día.
-No eres el unico- contesto Jules cuando se separaron. El se fue a los establos junto con Klaus y Eric a su siguiente clase.

-¿Porque bailan así? Hasta en Inglaterra bailan igual- se quejo Klaus.
-Se llama vals y solo lo baila la clase alta. La baja baila algo diferente- sonrió Jules.
-Aun así, para que se tensan tanto.
-El profesor tenía razón. El vals es algo delicado y hermoso. Aunque bueno para saber dominarlo se requiere mucho- dijo Jules cuando llegaron y viendo a Dastan acariciando a Balios.
-Es agotador- concluyó Klaus.
-¿Que es agotador?- preguntó Dastan perdido en el caballo.
-El va... Va... Valks- El vals- sonrió Dastan mientras Klaus demostraba que no era francés.
-Si saben cómo hacerlo, será fácil. Aunque por lo que oigo de seguro están tensos y con miedo por arruinar algo.
-Si ¿Cómo lo supiste?- preguntaron a la par.
-Cuando eramos niños Eric y Jules tomaron clases de baile. Por más que se intento no se progreso... Bueno si se progreso pero les faltaba que fuera natural. Y por lo que parece siguen batallando en ese punto.
-¿Seguimos igual de cuando éramos niños?
-Me imagino que si. Solo aprendieron los pasos, pero no a bailar. No me imagino como les iría con vestido- se burló Dastan.
-Eric se vería más femenina- sonrió Klaus y Jules se imagino a su hermano con vestido, lo cual fue mucho para el.
-De nosotros es el mas delgado y el único que tiene las manos suaves- les recordó y ellos inmediatamente vieron las manos de Jules. Estaban algo rasposas, callosas y con algunas cicatrices por lanzar cuchillos.
-De ustedes 2, tu eres el que sobrevivira más fácil y eso se ve de leguas.
-Para eso también depende mucho del título. Eric por ser el mayor y el favorito de padre hederaria el título de vizconde. Yo ni sé si podré aspirar a un título noble.
-Podrias intentar ser mosquetero o algún puesto real importante. Normalmente ahí se puede aspirar a algo bueno- le dijo Dastan pensando en su padre.
-¿Que título tenía tu familia?- preguntó Jules viendo más a su hermanastro.
-Nunca lo mencionaron y en si ni sé si tengo uno para aspirar...- Pero Gisselle era de la nobleza.
-Mi madre era de las más jóvenes, no sabría decirte si pudo aspirar o no a un título y más si se me puede pasar o tu padre se lo adjudicó.
-Cierto, padre pudo haber tomado esa decisión- bajo la mirada Jules pensando en lo que era capaz su padre.
-Yo no tengo nada. Gracias a él lo perdí todo, perdí hasta mi nombre.
-No eres el único Dastan. A mí hasta me intentaron cambiar de religion- bajo la mirada Klaus. Por su sangre la gente lo veía con malos ojos y por ese motivo decidió que llegando a Francia no mostraría su origen.
-Dastan no te pongas así. Mi padre y Eric no saben hasta donde pueden llegar su acciones.
-Vete Dastan, te ayudaremos a escapar- le propuso Klaus la oferta que siempre le daban y nunca aceptaba.
-¿Dónde iría? Lejos de está casa solo me quedan los conocidos de mi padre y ahora hay una guerra. Además le prometí a mis padres que cuidaría los terrenos- bajo la mirada.
-Cierto la guerra...- Si la guerra ya está no se a que parte los mandaron y dudo encontrar alguien que crea quien soy. Tu padre hizo eso posible, no parezco ese chico que conocieron cuando llegaron- interrumpió a Klaus.
-Tu rostro te delata y que conociste a varios mosqueteros- siguió Klaus y Dastan escondió su rostro.
-Mi padre se encargo de hacer que su rostro sea una deshonra- contesto Jules viendo la actitud de su hermanastro.
-Deberia volver a trabajar- se marcho Dastan, dejando a sus amigos preocupados.
-Ire a la biblioteca.
-Yo ayudaré a Amelie.
Y pasaron unos pocos días donde Dastan empezó a evitarlos a ellos también. Aunque ellos intentaron al inicio hablarle el se apartaba, por lo que lo dejaron y trataron de darle su espacio.