Capítulo XIV. Próxima conflagración

Al tomar el vuelo de vuelta las cosas en la ciudad ahora se veían diferentes de cuando llegaron, la ciudad alegre que llevaba una buena vida y pacífica, se había convertido en el campo de guerra con ciertos de muertos inocentes por culpa de la avaricia de unos pocos, sin duda alguna si Vincent no era detenido las consecuencias serían catastróficas, pero afortunadamente habían obtenido el libro para poder hacerle frente y además Anton había fortalecido el poder de su espada, ahora la misión era confrontar directamente a Mendoza antes del regreso del mismísimo Vincent Vanálarin, al llegar al aeropuerto de Kerioho del sur, una de las pocas ciudades de Kelto a la que aun la catástrofe no había llegado, buscaron la camioneta que habían dejado para una vez haber vuelto pudieran tomar rumbo hacia la capital, no obstante al llegar a ella se encontrarían con una inoportuna sorpresa, Zahra, la gran amiga de Mendoza, estaba ahí esperándoles - ¿Zahra? ¿Qué haces aquí? – Preguntó con sorpresa Cisne al verla – Tranquila, no vengo a pelear, solo ya no puedo con el cargo de conciencia – dijo cayendo en llanto Zahra - Dinos que sucede, ¿Qué tienes que decirnos? – dijo Anton – Verán, lo de Mendoza, yo sabría que sucedería, y nunca dije nada, después de la competencia, Mendoza se dirigió a la biblioteca donde tras caer de las escaleras, encontró ese libro y me dijo que tenía grandes planes para usarlo, como era su gran amiga, me recomendó alejarme lo más que pueda de la capital, dijo que crearía su propio imperio junto a Vicent, lo cual se me hizo muy extraño, pero no dije nada, me fui lejos como me lo pidió, sin embargo la culpa me carcomía ya que pude detener la muerte de miles, ¡No! ¡Millones! Pude haber salvado millones, al verlos en la televisión en Zathuria antes de que la transmisión se cortara, creí que sería buena idea buscarlos – termino de contar Zahra – Ya no importa chica, todo esto lo descubrimos a la mala, ahora solo nos queda intentar detener a Mendoza antes de que pueda resucitar a Vincent – dijo molesto Marco – pero ven con nosotros si de verdad estas arrepentida, únete con nosotros a la lucha – dijo Cisne - ¿Qué? ¿Yo? Lo siento no puedo aportar en nada – Le respondió Zahra – Te equivocas, practicaste tiro olímpico, claro que puedes ayudarnos, por favor ayúdanos a derrocar la tiranía de Mendoza que tanto daño está haciendo a nuestra nación – le dijo buscando motivarla Cisne a lo que Zahra asintió con la cabeza, los cuatro ahora se pusieron en marcha rumbo a la base militar para planear el ataque final y vencer a Mendoza, tras un largo viaje en carretera de al menos dieciséis horas donde pasaron por San José solo para encontrar que el refugio había caído, todas las barricadas se hallaban destrozadas e incluso aun podían verse libros y libreros ensangrentados por la zona, cada vez se evidenciaba el futuro del mundo si no lograban contener la amenaza, poco después comenzaron a acercarse a los alrededores de la base militar – Anton, veo humo desde donde está la base militar – dijo Marco extrañado – Es verdad, yo también lo veo – coincidió Cisne, por lo que Anton apresuró el paso para llegar a ayudar a los suyos en caso de combate, mientras se acercaban los ruidos cada vez eran más fuertes, balas, explosiones y los aleteos de los libros se oían con más frecuencia y al llegar efectivamente la base se encontraba bajo ataque – Marco, baja con Zahra y flanquea para ver la situación en el sur, Cisne avancemos en la camioneta hacia enfrente – dio la orden Anton, Marco y Zahra bajaron de la camioneta y se dirigieron hacia el sur, al seguir avanzando Anton notó el feroz tiroteo de las torretas contra los libros alzando vuelo y los hombres luchando cuerpo a cuerpo contra los del ejército del libro, - Cisne, busca una manera de ayudarnos sin ponerte en riesgo por favor, quédate aquí – le pido con un cálido beso Anton antes de bajar del coche con su potente ametralladora y amarrada a la cintura su espada, fue así que disparó a diestra y siniestra contra los hombres de Mendoza, mientras se acercaba poco a poco a la entrada buscando ver cómo era la situación dentro de la base militar, mientras tanto Cisne bajo del auto para comenzar a rescatar los heridos y sanarlos con las técnicas que había aprendido durante el viaje a Zathuria, del otro lado Marco y Zahra toparon con dos potentes tanques disparando contra las paredes reforzadas de la base militar, si no se apresuraban a detenerlos podrían entrar y ganar territorio, para ello Marco cubierto por Zahra se acercaba poco a poco entre los cientos de hombres del lado de Mendoza, pero al ser tantos le fue imposible avanzar sin recibir impactos de bala, quedando lastimado del costado izquierdo, Zahra en su auxilio con su destacada técnica abatía a los que se le acercaban mientras el retomaba el aire para seguir avanzando, pronto Marco se vio rodeado de soldados del libro, libreros e incluso libros sobrevolando donde se encontraba, herido le era imposible hacerle frente a tantos enemigos, mientras los tanques continuaban destruyendo la barricada, de no darse prisa entrarían por el sur destruyendo los cuarteles y entrando a la zona segura, Zahra en un acto de valentía y redención se lanzó velozmente disparando a todo lo que se moviera hasta llegar frente a uno de los tanques al que le planto una granada de gran alcance destruyendo el primero de los tres tanques, entre la conmoción Marco aprovecho para escapar del sitio en el que se encontraba, aunque las cosas habían mejorado un poco, los tanques habían notado la presencia de Zahra, por lo que dejaron de disparar a la barricada y comenzaron a apuntar a la pobre chica que a toda costa buscaba mantenerse a salvo, Marco que a duras penas podía moverse debido al daño en sus costillas, se mantuvo en el campo de batalla tratando de hallar la forma de salvar a Zahra, para ello Marco tomó una de las torretas de guarda que habían sido derribadas, se las arregló para manipularla y disparó a discreción contra los tanques y los enemigos cercanos limpiando el área de enemigos, lo que aprovecho para correr y tras esquivar el disparo del tanque logro subir a la cubierta de uno, al ver eso desesperado el otro tanque apuntó a Marco y disparó, Marco en una acrobática opción saltó hasta la punta del otro tanque dejando así destruido el tanque enemigo por la propia bala de su compañero, restaba solo uno, no obstante Marco se encontraba ya bastante lastimado quedando ahora inmovilizado en la parte de arriba del tanque, el general al interior de este abrió la cubierta y salió buscando asesinar el mismo a Marco, al quedar frente a frente le hablo – Maldito Inútil, destrozaste dos valiosos tanques idiota, ¡Toma! – le dijo el general mientras pateaba brutalmente a Marco a punto de perder el conocimiento, Zahra en ese instante apareció por detrás disparándole en el pecho al general asesinándolo en el acto, levanto a Marco, lo metió dentro del tanque y ella tomo el control de este como símbolo de esperanza para los de la base militar. Del otro lado de la batalla Anton había llegado hasta el interior de la base militar para encontrarse con un escenario totalmente violento, en pleno patio se hallaba Jonathan lleno de sangre, raspones y cortes semi profundos portando lo que parecían ser unos guantes de metal, se encontraba luchando contra Khan, un Khan que Anton no conocía, con el poder de generar tornados y crear armas punzocortantes, Khan se encontraba levitando a unos metros del aire mientras lanzaba potentes corrientes de aire a Jonathan quien no tenía problemas en esquivarlas, posteriormente Khan se teletransporto velozmente detrás de Jonathan el cual ya lo estaba esperando asestándole un puñetazo en la cara - ¡Ah! ¡Maldito! ¿Cómo es que resistes tanto? – Grito Khan – No dejare caer esta nación, daré todo para mantenerla con vida – le respondió Jonathan limpiándose la sangre del rostro - ¡Ja! Como gustes – Dijo Khan lanzándole una daga que Jonathan detuvo con su puño de metal, Khan se lanzó contra Jonathan buscando clavarle al menos una daga pero Jonathan asestó un duro golpe con sus puños al suelo generando una onda expansiva que lanzo a Khan, aprovecho el momento para tratar de darle el golpe final haciendo uso del cuchillo integrado en sus guantes, no obstante Khan con un tornado lanzo volando a Jonathan antes de que pudiera caer con el impacto, posteriormente lo levanto haciendo uso de otro tornado y silbo llamando un libro que mordió en el abdomen a Jonathan cayendo herido al suelo – Admiro tus esfuerzos pequeño imbécil, pero ahora finalmente es tu turno de morir – decía con un sentimiento de superioridad Khan, mientras creaba una daga del tamaño de una persona para darle fin a la vida de Jonathan - ¡Muere Escoria! – dijo Khan lanzando la daga – No ganaras esta guerra… - murmuro Jonathan débilmente, pero justo cuando la daga estaba por impactar Anton se puso en medio y utilizando su espada de un tajo desvió la trayectoria de la daga - ¡No! No dejare que mates a nadie, no sé de dónde sacaste esos poderes, pero de nada te servirán contra mi – dijo en un tono heroico Anton – Vaya, Vaya, por fin eres tú, Maldito Anton, al fin podre consumar mi venganza – dijo sonriendo Khan – Lo único que conseguirás será tu muerte – dijo Anton lanzando un rayo a Khan que impacto en su pecho quemándole la piel - ¡Ah! ¡Quema! ¿Cómo pudiste dañarme? – Dijo sorprendido Khan quien se teletransporto detrás de Anton haciendo el mismo truco que a Jonathan por lo que Anton lanzo un tajo cruzado hacia atrás, impactando contra Khan hiriéndolo nuevamente – No puede ser posible, puedes dañarme con facilidad con esa espada, pero de nada servirá, tendrás el mismo destino que Christ – dijo aún más molesto Khan - ¿Christ? – dijo Anton descuidándose recibiendo así el impacto de uno de los tornados de Khan - ¿Qué le hiciste a Christ? – pregunto Anton poniéndose de pie - ¿Cómo? ¿Aún no lo sabes? Esta muerto, al igual que Rihan y ahora tu – dijo Khan volando a gran velocidad contra Anton el cual tirándose al suelo pudo esquivar su ataque - ¡Eres un maldito! Voy a acabar contigo, esta vez no tendré ninguna piedad contra ti – amenazó Anton mientras arrojaba varios rayos de luz en contra de Khan el cual las esquivo con mucho esfuerzo para después lanzar cientas de dagas contra Anton, quien pudo detenerlas con el poder de su espada, no obstante una de ellas logro clavarse en su pierna derecha lo que Khan aprovecho para lanzar un tornado que desestabilizo a Anton dejándolo en el suelo, Khan se acercó para clavarle una daga en el pecho pero Anton pudo empujarlo y ponerse de pie, en ese momento Khan invocó varios libreros que rodearon a Anton, Anton haciendo uso de la habilidad de su espada clavándola en el suelo pudo inhabilitar a todos los libreros y lanzo un rayo de luz a Khan hiriéndolo y este cayó al suelo, cuando trataba de levantarse reapareció Jonathan quien aún herido le dio un puñetazo en la cara, uno tras otro hasta que Khan se teletransportó – Malditos, me las van a pagar, sobre todo tu Anton, te mataré, es una promesa – Dijo Khan mientras desaparecía entre tornados dando la orden de retirarse a su ejército , Anton aún lleno de ira, se acercó a Jonathan para ver cómo se encontraba – Oye, ¡Tu! ¿Qué fue lo que paso? ¿Cómo es que pudo asesinar a Christ y Rihan? – pregunto Anton – Compró a los hombres de Rihan en el supermercado y los embistió, yo llegué horas después debido a que habían tardado en regresar y encontré a Christ en sus últimos momentos peleando contra Khan – dijo Jonathan – Ah, ¡Maldición! No puede ser, debiste ir con ellos – dijo lamentándose Anton - ¿Estás diciendo que es mi culpa? ¡Tu fuiste quien se fue y nos abandonó por un estúpido libro! – le contesto con ira acompañado de un golpe en la cabeza Jonathan – Ese estúpido libro que tu dice, es esencial para salvar al mundo imbécil, tu debiste luchar junto a ellos no quedarte en esta base como cobarde – dijo Anton regresándole el golpe, la discusión escalo al punto de convertirse en enfrentamiento, Anton era claramente superior tras unos minutos, - Tu debiste – le azoto un puñetazo en la cara a Jonathan – Ir con ellos – le azoto ahora un rodillazo en el abdomen – y salvarlos o morir con ellos, no quedar con vida – termino de decir Anton antes de dejarlo tendido en el suelo – Anton ¡Basta! – dijo Cisne mientras auxiliaba a Jonathan, al ver esa escena Anton aumentó su ira contra Jonathan por dejar morir a Christ y Rihan - ¿Lo ayudas a él? – dijo Anton – Somos del mismo equipo no somos enemigos – dijo Cisne curándole las heridas a Jonathan - ¡Dejo morir a Christ! – dijo Anton yéndose del patio hacia el exterior de la base militar – Anton ¡Espera! – trato de detenerlo Cisne pero este se había marchado hacia donde se encontraba Marco – Marco, vámonos debemos encontrar el escondite de Khan – le dijo Anton a Marco - ¿Qué? ¿No acaba de irse? – Así es, pero el… el asesino a Christ – dijo con los ojos llorosos Anton - ¿Enserio? Pero, no considero lo más prudente ir, así como si nada Anton – le dijo Marco - ¿Tú también? No puede ser, bien, iré yo solo – dijo Anton dirigiéndose hacia la camioneta en la que habían llegado, no obstante, en la puerta Cisne estaba esperándolo para darle un cálido beso y un abrazo – Así no vengaras su muerte Anton querido, por favor, sabes bien lo que debemos hacer – le dijo Cisne con una voz comprensiva a Anton, este entonces se detuvo por unos segundos, en sus ojos la ira era notoria, Anton se tiró al suelo y comenzó a golpear - ¡Lo voy a asesinar! Debe pagar por lo que hizo – Grito Anton, Cisne lo abrazo fuertemente y poco a poco Anton se tranquilizó, posteriormente Anton regresó junto con Cisne al interior de la base militar específicamente a la enfermería para encontrarse con Jonathan - ¿Qué quieres? – pregunto Jonathan a Anton – Necesito que me digas todo lo que paso durante estas dos semanas – le respondió Anton – Claro, al final sabes bien que todo esto ha sido solo tu culpa, al día siguiente de que se fueron, Christ fue junto a Rihan por los suministros para la base al supermercado que vigilaban hombres de Rihan, estos hombres fueron sobornados para traicionar a Rihan y entonces cuando llegaron fueron emboscados, cuando yo llegue ya era demasiado tarde, Khan había dejado muy malherido a Christ, apenas pude detener a Khan y llevarlo rápidamente a la base, pero el murió poco después, desde entonces he liderado todas las acciones de la base, contando este hemos sobrevivido a cuatro ataques del ejército del libro, sin embargo en un intento de contraataque apenas pudimos hacer arder una de las torres – le explico Jonathan a Anton – Bien, pues ahora, iremos por ellos y evitaremos el regreso de Vincent – dijo firme Anton, la batalla final estaba a las puertas del futuro.