Capítulo 28

Después de lanzar mi ataque me puedo percatar de que Gant se mantiene congelado y lo mejor que podemos hacer es irme, pero en ese momento un rayo nos ilumina.

Al abrir los ojos me percato que estamos en la biblioteca,también poseo mi perla de poder.

— ¿Qué rayos paso?— digo.

— Ese es el poder de la perla— dice Maltimore.

— ¿Qué?— dice Atlas. 

— El poder de la perla no es algo que encuentres físicamente sino en el segundo mundo— explica Maltimore.

— No puedo creer que esto era una ilusión— digo.

— No fue una ilusión, es una realidad que pronto ocurrirá— dice Maltimore.

— Por el momento esto nos puede ayudar. Gracias Maltimore— dice Atlas.

En ese momento salimos de la biblioteca y empezamos a buscar el resto. Todo esto parece que estuviera normal, si es cierto lo que nos dijo Maltimore, esa visión o premonición que tuvimos es algo que ocurrirá en algún momento del presente.  

Al llegar a las afueras el resto de nuestros amigos están acampando, no sé cuánto tardamos pero es momento de descansar. 

— ¿Qué pasó con ustedes?— dice Buster.

— Encontramos una de las perlas— digo.

— Vaya y eso que buscamos por todo el pueblo, dos veces— dice Bolgan.

— Esto es inaceptable y apenas nosotros podemos combatir contra el Pentágono — dice Bolgan.

— Ahora no estamos para competencias y por el momento Neo y yo estamos con una ventaja, pero debemos aprovecharla al máximo— digo.

— Es cierto, aún nos falta encontrar sus perlas de poder y apenas tenemos dos— dice Atlas.

— ¿Qué pasará con los libros aún falta encontrarlos?— dice Neo.

— Tengo el presentimiento que el Pentágono ya lo tiene en sus manos— dice Atlas.

— No hablas en serio verdad— reclama Bolgan. 

— Ya lo sabías— dice Angelo.

— No es que lo supiera, pero lo único que puedo decir es que mientras nosotros estamos aquí y en poder de una de las perlas, aún tenemos una ventaja  — dice Atlas.

Ella se mantiene muy optimista con respecto a la situación, pero mientras mantengamos la ventaja no puede salir nada mal. El resto del equipo y yo dormimos para poder seguir nuestra aventura.

Ari parece estar algo nerviosa y distanciada con nosotros, creo que su expectativa de sobrevivir o buscar una aventura no implica el tener que estar detrás nuestra siempre. 

Al día siguiente el resto de nosotros nos subimos en Hyridius para seguir volando a nuestro siguiente destino, la región de Oca, un conjunto de pueblos divididos que posee una de las mejores cosechas de maíz y también produce los mejores granos básicos de la región. 

Admiramos los enormes mantos verdes y las grandes cosechas rodeadas por tierra, sin duda es un lugar hermoso. Mientras volamos puedo hablar tranquilamente con Ari.

— ¿Estás bien?— digo. 

— Sí, solo que no sé qué pensar acerca de esta situación — recalca.

— Al final de todo esto solo puedo decir que al final podrás tener la mejor aventura de siempre— digo.

— Me preocupo por ustedes, sobre todo por ti, esto es peligroso — dice Ari.

— Escuchame, nosotros nos hemos sabido cuidar durante años y siempre somos un equipo por lo tanto lo único que puedo decirte acerca de esto es que debemos enfrentarlo juntos y pase lo que pase siempre estaremos los unos a los otros— digo para conformar a Ari.

— Llegamos— dice Buster.

Cuando acercamos nuestra mirada nos percatamos de la situación de la región Oca y es que el Pentágono lo tiene bajo su control. 

— No entiendo— digo.

— Miren el pilar central— dice Atlas.

Podemos ver que es el pilar central que emana una energía completamente fuerte y de uso mágico. 

— Atlas puedes explicarnos qué pasa— dice Buster mientras aterrizamos.

— Recuerdan lo que dije acerca de los libros — dice.

— Sí— decimos todos.

Es momento de enfrentarnos a ellos.

Después de lanzar mi ataque me puedo percatar de que Gant se mantiene congelado y lo mejor que podemos hacer es irme, pero en ese momento un rayo nos ilumina.

Al abrir los ojos me percato que estamos en la biblioteca,también poseo mi perla de poder.

— ¿Qué rayos paso?— digo.

— Ese es el poder de la perla— dice Maltimore.

— ¿Qué?— dice Atlas. 

— El poder de la perla no es algo que encuentres físicamente sino en el segundo mundo— explica Maltimore.

— No puedo creer que esto era una ilusión— digo.