El día esperado por muchos había llegado, uno de los eventos más importantes del año, los juegos deportivos.
Usualmente, le restaría importancia a este día como el año pasado, pero esta vez era diferente, Nori participara en él. Me alegraba eso, no solo porque sea capitana o se desenvuelva bien en ese deporte. El simple hecho de verla dando su 100% me parecía admirable.
Por ese motivo decidí aceptar su invitación de practicar horas antes de los juegos. No solo yo, sino también Haruo y Masaru. Nos citó a las 6:30 de la mañana en la escuela, una hora bastante temprana, aunque era de entender su entusiasmo, pero a su vez le preocupaba bastante.
El día anterior, después de regresar del viaje, descanse un rato en mi casa, pero luego de intentar dormir un momento recibí una videollamada grupal de Nori.
Éramos ella, Masaru, Haruo, Tara (la chica del consejo que había ayudado a Nori en la búsqueda de los papeles perdidos de hace tiempo) y yo, resulta que era una emergencia demasiado preocupante para ella.
Minutos antes, Nori había recibido una llamada de la encargada del evento, resulta que habría un cambio de planes. Los partidos de eliminatorias para las estatales tendrían que ser el día de los juegos deportivos. Esto se debió a un inesperado percance con las fechas establecidas, por lo que dejarían de ser partidos amistosos, ahora serían demasiado importantes para la escuela a nivel deportivo.
Aquel peso recaía en Nori, al ser la capitana del equipo debía preparar a las demás jugadoras y establecer nuevas jugadas y estrategias en solo un día. Estaría en juego bastantes cosas, incluyendo la presencia del instituto en las estatales y la posibilidad de perder siendo locales.
Durante el resto del día estuvimos ayudando a crear jugadas y jugadas para mañana, algo bastante complicado porque solo Nori y Tara eran conocían perfectamente el juego, mientras que yo y los demás teníamos nulos conocimientos del voleibol.
Después de esperar un buen rato, Nori llego junto con Tara, así que durante un buen rato perfeccionamos todo con las demás jugadoras del equipo que habían llegado desde temprano para entrenar. Básicamente, todo mundo, los equipos de futbol, basquetbol y beisbol estaban ahí, Al parecer todo mundo estaba nervioso por los juegos. Tendremos 3 partidos importantes en un mismo día, lo cual significaba que contamos con tres oportunidades para ir a las estatales.
Aunque no éramos expertos, sabíamos bien como eran aquellas jugadas y alineaciones para el partido, así que solo serviríamos de apoyo para ellas, con el fin de lograr la comprensión de todas.
Nori se notaba desconcentrada durante las prácticas, parecía como si no fuera ella misma. Pese a no poder hablar con ella sobre eso, sé perfectamente que tiene miedo de fallar. Creo en ella y lo más probable es que minutos antes del partido volverá a ser la misma de siempre.
Luego de dos horas tuve que irme, así que deje a Masaru y Haruo a cargo de la táctica del equipo, era tarde, lo que significaba que debía de llegar al consejo.
Tuve cambiarme de ropa en un salón vacío y de ahí dirigirme al salón del consejo.
Al llegar noté que Paora ya estaba lista, junto con Sora, Akemi y los demás miembros que estarían ayudando a la escuela. Creo que llegue algo bastante tarde.
Supongo que después de todas las cosas que vivimos en el viaje es razonable saludar a Paora, eso y porque el par de Sokemi (Sora y Akemi, para facilitar su mención sin decir los dos nombres) no dejaba de mirarme, indicándome con sus expresiones que debía de saludar a Paora. No disimulaban nada, inclusive varios miembros del consejo las miraban raro por sus rostros, pero sabía que debía de hacerlo.
─ Buenos días ─ Un saludo bastante normal y común para entablar una conversación.
─ Buenos días ─ Aunque a veces depende de la otra persona si decide seguir con la conversación.
Durante un buen rato hubo un silencio bastante incómodo en mi opinión, aunque no solo era yo, sino que también ella se notaba un poco nerviosa al respecto. Pese a los acontecimientos de hace unos días, al aparecer seguimos siendo desconocidos.
Tal vez sepamos nuestros gustos y aficiones, pero todavía hay algo que nos impide tener esa libertad de convivir los dos sin sentirnos nerviosos al vernos.
Nuestra primera tarea como consejo estudiantil era recibir a los equipos invitados cuando llegaran, serían 2 escuelas diferentes, así que debíamos de darles una bienvenida a la institución y evitar cualquier acción de ellos ante los otros estudiantes, o viceversa. Aunque esa tarea tendría que ser para el consejo disciplinario, debíamos de colaborar también nosotros.
Después de darnos nuestros respectivos trabajos nos dispusimos a ir a esperar a las escuelas en el estacionamiento.
Para el día de hoy nos dividiríamos en equipos de 4 integrantes para dividir todos los trabajos y cumplirlos con éxito, para mi suerte estaría con Paora y el par de Sokemi. Mientras caminábamos los cuatro, note a Paora un poco roja, aunque después de eso me miro.
Note que al mirarme a los ojos aparto la mirada bastante rápido y camino un poco más rápido. A su vez, el par me intercepto, preguntándome la razón por la que estaba así Paora.
─ Ella está actuando bastante raro, inclusive mucho más que otras veces ─ ¿Crees que esté bien? ─ No tardaron en llegar las preguntas sobre eso.
─ La verdad no se ─
─ Se que debería de hablar con ella ─ Pero… ─
─ No sé cómo hablar con ella, aunque han pasado tantas cosas en estos días, sigo sin poder tener el valor de poder hablar con ella de una manera diferente a la normal ─
Sigo siendo aquella persona temerosa y tonta del pasado, al fin y al cabo no mejore nada en este tiempo de preparatoria.
─ Tienes miedo ─
─ Miedo de equivocarte o decir algo incorrecto ─
─ Miedo de equivocarse y tal vez tirar todo a la basura por un error ─ Pero en verdad hay algo que los hace sentir algo ─
Editado: 25.03.2024