Era la primera vez que me interesaba conocer a alguien, en especial a un hombre. Se sentía bastante diferente, incluso llegué a tener sensaciones desconocidas al estar a su lado. Demostró ser una persona bastante linda, no solo por su aspecto, me refiero al tipo de persona que es en su interior.
Se preocupa por las personas que lo rodean, aunque no lo demuestra por temor, él es una de las personas más generosas que pude conocer. Puede brindar su ayuda en cualquier circunstancia posible, sin importar las razones, las soluciones y los resultados que conllevan.
Es uno de los mejores en sus clases, en especial en matemáticas, usualmente teniendo un desempeño bastante bueno, aunque es bastante despistado en cualquier aspecto posible. Desde olvidar trabajos o materiales para actividades, hasta olvidar fechas importantes. Sinceramente, considero que es una persona con defectos mínimos; sin embargo, tiende a tener problemas al hablar con personas o incluso, al dirigirse a un profesor o mencionar algo en voz alta.
Durante casi 6 meses logré conocerlo, incluso teniendo recuerdos junto a él.
En estos últimos días hubo un cambio entre nosotros.
La causa más notable de ese cambio inició desde hace varios días, exactamente en el viaje del consejo estudiantil. Aquel beso significó demasiadas cosas fuera de mi actual entendimiento y muy alejado de mi comprensión. Las emociones nunca estuvieron en mi repertorio de conocimiento, tomando en cuenta el simple hecho de evitar el amor adolescente y concentrándome en mis estudios.
Lo único relevante para mí consistía en completar mis estudios y lograr entrar a una universidad; no obstante, eso cambió desde aquel momento en el que lo conocí.
Durante todo el día actué de una manera bastante rara al estar junto a él
Me sentía bastante confundida. No lograba poner en orden mis pensamientos, tan solo teniendo en mente a él. Debía de poner en orden todo antes de poder actuar normal con él.
Luego de un tiempo nos asignaron darle la bienvenida a la escuela rival de hoy, la cual sería un rival directo para ascender a las estatales.
Al recibirlos noté una persona conocida entre la multitud. Sorpresivamente era Yoshio. Desde aquel día en la fiesta no supe nada de él, a excepción de la noticia de su intercambio a una escuela diferente.
Actúe con total normalidad, sin siquiera importarme su presencia. Durante unos minutos dirigí a nuestros invitados a sus respectivos lugares, de repente una voz conocida mencionó mi nombre. Era él. Lucía bastante diferente, un cambio bastante notorio después de un año, incluso su manera al dirigirse a mí, cambiando incluso el todo de su voz.
De cierta manera me alegraba verlo después de un buen tiempo, después de todo fue alguien con el que compartí casi dos años de preparatoria,
Durante varios minutos estuvimos conversando de los caminos que tomaron nuestras vidas. En su caso, había cambiado de escuela, esto debido a la oferta de una beca deportiva, la cual actualmente está aprovechando, logrando ser un factor importante en el equipo de su escuela, lo que significaba que no se debería de preocupar por si en algún momento consideraban retirarla.
En mi caso, le expliqué todo lo más relevante académicamente, incluyendo la parte en la que conocí a Itta. Explique todo con lujo de detalles, incluso, luciendo bastante emocionada al contarlo.
Obviamente, él lo notó, no era normal que la persona más seria del mundo estuviera realmente emocionada por contar cosas de una persona. Claramente, no solo académicamente había cambiado, también emocionalmente. Me intrigaba la forma en que tomaría eso, después de todo había sido demasiado diferente con él en su momento.
─ Me alegra verte feliz ─
─ Nunca me imagine ver una sonrisa tuya al hablar de alguien ─ Incluso estoy sorprendido por eso ─
─ Debe de ser alguien muy importante para ti, ¿no? ─
Me sorprendió bastante su reacción, pensando que incluso lo tomaría de una manera totalmente diferente a la que tomó. Parecía feliz al oír eso, algo bastante raro en él.
─ Supongo que sí ─
El hecho de cambiar positivamente por Itta me hacía sentir una felicidad bastante inmensa; sin embargo, seguía estando una duda bastante importante.
¿Sentir esto por él es bueno? Es decir, ¿en realidad cabe la posibilidad de ser correspondida de una buena manera por él? No logro comprender sus sentimientos, mucho menos saber si lo que en verdad siento por él es amor. El miedo de no ser correspondida me invadía por dentro, incluso también la diferencia de edad.
Mientras él termina la preparatoria, yo iría comenzando a cursar la universidad, el tiempo también sería un factor bastante importante, incluyendo la disponibilidad de los dos. Otro factor sería mi nula experiencia saliendo con alguien, existiendo la posibilidad de al no estar en las expectativas de Itta podríamos terminar.
Este tipo de dudas nunca hicieron aparición en toda mi vida, tristemente inician a finales de la preparatoria, una de las etapas más difíciles en la vida.
─ ¿Pasa algo con él? ─
─ ¿Algo que te preocupe con respecto a él? ─
En realidad sí existía algo, el cual era el hecho de ser la primera vez en mi vida tener miedo a decirle a alguien lo que siento por Itta.
─ Supongo que sí ─
─ Tengo miedo de no ser correspondida ─ No saber si la manera en la que lo amas sea la que espera de ti ─
─ Tan solo quisiera ser feliz junto a él, sin importarme cuál sea el resultado ─
─ Por primera vez comprendo la palabra amor ─
Evitó responder al momento, pensando durante unos minutos su respuesta.
Después de pasar 2 minutos dio su opinión de esta circunstancia.
─ Cualquier decisión que tomes será la correcta ─ Siempre y cuando sepas que tu corazón está de acuerdo con ella ─
De cierta manera comprendí una parte de sus palabras, tomando en cuenta todo, incluyendo el beso.
Editado: 25.03.2024