POV´S Angie
No pensé en las consecuencias que traería este amor tan desubicado pero estuve segura que traería muchos problemas, solo quiero decirte que disfruté cada momento a tu lado y aunque este lejos de ti te tendré presente en cada pasatiempo y recuerdo.
~~~~~flashback~~~~~~
Todo comenzó un 13 de enero conocí a un chico encantador, de su cuerpo ni se diga, se llamaba Alex Lawrence aunque fuera una locura sentí un sentimiento vago o solo era confusión como cualquier mujer sentiría al conocer a alguien.
Cada día nos reuníamos en una heladería que quedaba cerca de la plaza 28 de julio, me contaba sobre su familia, sus metas, su niñez y yo solo le observaba para ver sus expresiones ya que eran divertidos mi mente tenia vagas palabras que me hacían alucinar me regañaba a mí misma parece una locura ¿no?...pasaban los días y le fui conociendo, a los meses ya sabía todo de él tenía tanta confianza hacia mí que era mi mejor amigo nos hicimos muy unidos éramos como uña y mugre, al poco tiempo me presento ante sus padres como si de ello dependiese la vida o mejor dicho MI vida …pero me cayeron bien sus padres me trataron como si fuese la persona más especial del mundo y eso me hacía sentir alagada.
Es algo único pasar tiempo con él y me di cuenta que vale la pena, porque de un momento a otro me siento feliz y es inexplicable la sensación que tengo ante él.
~~~~~ Fin del flashback~~~~~~
Levanté la mirada y le vi sentarse frente a mí, y me dedico una sonrisa como saludo y yo le devolví el gesto.
-Es realmente incómodo – dijo con un tono de haragán.
-Hola, Yo estoy bien gracias por preocuparte ¿y tú que tal?– comenté sarcástica.
-sí, sí, si como sea ese “calvo” en cualquier rato tirara patas arribas y yo-auto señalándose- hare con honor una celebración –ignora mi sarcasmo.
-ahora ¿Qué hizo ese “calvo”?- comento desinteresada.
- ¿qué hizo?-finge una sonrisa y me mira- me lleno la oficina con documentos, sabes cuánto me costó re-ubicarlos… él es muy estresante – frunció su ceño, es tan irritante cuando habla de su padre; ¡suerte! Es la palabra mágica que uno necesita a diario y este hombre no la tiene, raramente mi mirada se centraba en su labio que se mezclaba junto con el helado y eso me hacía excitar “¡hey! Deja de violarlo”- radicalmente apareció esa vocecita que es la segunda cosa que me irrita.
¿Por qué? Digo no le estoy tocando -dije mentalmente.
“cariño, no te hagas ¿quieres que te lo recuerde?”- mi conciencia dio signos de advertencia.
No es necesario que me lo hagas-ya me estaba saliendo de mis casillas y unas cuantas más y decir adiós a mi cordura.
“¡SI LO ES!”-grito
Que no- contra-ataque
“QUE SI”
Que no
“QUE SI”
Y así comenzó la guerra en contra de mi conciencia y me di cuenta que estaba perdiendo tiempo.
-mmm te encuentras bien- mueve su mano a la altura de mis ojos con preocupación.
-eh! Si claro solo… me perdí en mis pensamientos!?- ¡demonios! No sabía que decir, por supuesto no le diría “estaba peleando y gritando con mi conciencia estupideces de lo cual me jode” pero seguía mirándome y eso me ponía nerviosa.
-¿qué pensabas?-seguía mirándome y no le respondí –mmm entiendo, ¿qué tal con tus estudios?- y así me hizo acordar los proyectos que tenía me sentí estresada en ese instante.
-creo que bien, ya que los proyectos, bueno estresan, no preguntes ¿sí?-dije incoherencias.
-oh! Claro- puso una de sus sonrisas más falsa que he visto-¿enserio? ¿Estudias?, no te das el tiempo de pintarte las uñas y cosas de chicas, serías perfecta y ardiente- tuvo el descaro de hablar pervertida mente pero ya estoy acostumbrada a sus palabras, opiniones, optimismo y pesimismo.
- primero muerta, antes de hacer esas “cosas”- me fulmina con la mirada.
-no es tan malo después de todo, has el intento-me sentía un poco rara.
-aja, are como si no hubieras sugerido eso- opine con indiferencia.
-bueno, bueno pero te vas a mi trabajo no quiero mandar guardaespaldas solo por tu bronca con la secretaria-cambio el tema pero seguía cabreado.
-si es que me detienen- mire mis uñas junto con una sonrisa.
-cómo eres todo un ángel, Dios te pondrá una coronita de santita- murmura con sarcasmo.