Coral de Fuego

Capítulo XXIV

ALEC

Las noticias eran nuevas e impactantes. Al parecer estaba destinado a estar con la niña que desde la primera vez que la vi, me hizo perder la razón. La hermana de mi mejor amigo. Creo que tiene sentido, la atracción que sentía por ella no era normal; y siendo sinceros, no podría quererlo de otra forma. ¿A quién engaño? Es una pesadilla. No voy a negar que no la quiera conmigo, porque sería una gran mentira; pero si dijera que es como lo soñé también estaría mintiendo. 

Esa niña tiene algo que la diferencía de las demás. Algo que la hace única a mis ojos, y estoy seguro de que no sólo es la cantidad de energía que emana de ella. Porque por más fuerte que sea, pocas energías me drogan como la de ella. Si alguien va a ser mi perdición, va a ser esa jovencita de diecisiete años. 

Hoy cancelé la clase de la mañana con mi pelotón. No quería tener que encarar a Nat y mucho menos a Max después de lo de anoche. No es que tema lo que Max me podría hacer, sino, que no estoy cómodo aún sabiendo que le voy a quitar una parte que es tan fundamental en él: su hermana. Porque por más que digan que no la va a perder y que sólo cambiaran un par de cosas, todos, o por lo menos yo sé que no es así. 

A la hora que se suponía que tendría que estar dando clase, misma que cancelé, decidí pagarle una visita a mi hermana. Ella se había negado a decirme de todo esto; y por lo que había dicho Will la noche anterior, tanto él como mi hermana, estaban al tanto del futuro que nos tenía planeado el destino a Nat y a mí. Así que, si había decidido no advertirme, por lo menos ahora me podía dar respuestas. 

Al parecer, para cumplir la profecía, teníamos que hacer una ceremonia. Un ritual donde Max renunciaría a todas las conexiones con Nat. Los efectos de esta acción incrementarían el talento de ambos, pero al mismo tiempo, perderían cosas el uno del otro, que inclusive podrían incluir la perdida de memoria acerca de la existencia del otro.

La protección familiar seguiría intacta, ¿pero de qué sirve si no recuerdas que tienes un gemelo? No sé si este factor lo conoce alguno de ellos, pero tampoco quiero ser yo quien se los haga saber, o por lo menos no aún. 

En la ceremonia una vez que sus lazos hayan sido cortados, ambos quedarán debilitados por un par de horas, en esos momentos es cuando la conexión entre Nat y yo, será pactada. Tendré que absorber toda su energía, casi hasta el borde de su muerte. Ella no puede poner resistencia pues si la hay, no sólo su vida correrá peligro, sino que la mía y la de todos a nuestro alrededor se verán afectados también. 

Es un ritual complicado, y hasta donde sé, sólo ha sido realizado una vez anteriormente. También entre un Lux Aurea y una Habentis Maleficia. Después de la ceremonia, ambos se convirtieron en leyendas que hoy en día están en los libros de texto; sin embargo, con el pasar de los años, se les perdió el rastro y no se volvió a saber de ellos. 

Hay quienes dicen que el poder los consumió a ambos; quienes comentan que decidieron esconderse pues sentían que hacían más daño que bien. Pero yo creo que fue porque alguno de ellos se volvió codicioso y el otro dedicó el resto de su vida a evitar que se saliera de control. 

Ese es mi mayor miedo. Completar la conexión con Nat, que no nos soportemos y lo único que sepamos hacer sea pelear hasta el día de nuestra muerte.

Bueno, situación similar a la de la semana pasada... regresen mañana por nuevo capítulo!!

with love, Ocean Light 🩶

 




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