capitulo 20

Capitulo 20

“El asesinato de un villano”

En la noche de una invasión de seres creados por la venganza de los oprimidos. En el alba de la noche, un héroe se alza…

Zeo, acompañado de Sawiken. Avanzan por las calles de la capital eliminando a todas las criaturas posibles. Cuidándose las espaldas el uno al otro; avanzan hasta llegar a su destino….

Una gran reja con barrotes, era la división entre: suburbios, y “la zona elegante de la ciudad”. En la cual, personas con gran nivel monetario residían.

Al tener la dicha reja frete a ellos. Sawiken explica:

-En este lugar viven los ocho diputados. Vayamos, acabemos con todos y terminamos todo esto.

Con una mirada de escepticismo, le responde:

-Aun no estoy seguro de esto…pero…creo que es lo mejor.

-¡Exacto!...no tomara mucho. Sólo debemos tener cuidado de la elite.

Aún indeciso, Zeo, accede. Pensando que seria lo mejor:

-Muy bien…Tú ganas…vayamos sin que nos descubran.

Al decir eso, el adepto de la electricidad, escala la gran reja con facilidad, y cae del otro lado.

Asombrada, ella le pregunta:

-Wow… ¿Cómo hiciste eso tan rápido?

Con una sonrisa de confianza, le responde:

-Tengo muchos trucos bajo la manga. Ahora vamos.

De vuelta en el centro de la capital. Una batalla se llevaba a cabo.

Con gran velocidad y con su fiel cuchillo en mano, Carlos, se lanza contra el joven sombrío. El chico con una sonrisa en sorna, mete sus manos en los bolsillos de su pantalón, y de su espalda, una mano de sangre detiene la apuñalada de su adversario. Reaccionando ágilmente, Carlos, se agacha y barre el suelo con una patada con la que levanta polvo. Volviéndose una neblina de sangre, el poderoso dotado evade el ataque y se mueve libremente hasta volver a quedar en su forma solida. Entre risas burlistas, voltea hacia Bleik, y le pregunta:

-Ja ja ja ja. ¿Eso es todo?

La voz de Kid se escucha detrás de él, respondiendo:

-¡No!

Voltea la mirada con asombro, al recordar la presencia del vaquero. Un fuerte golpe lo impacta justo en la nariz, destrozándosela, y cayendo hacia atrás.

Al caer sobre el pavimento, el centro de su rostro quedo destrozado debido al brutal puñetazo que recibió. Sangrando por lo que le queda de nariz, se pone de pie como si nada. Al levantarse, todo el daño que sufrió, se regenera.

Quedando de nuevo sin ningún rasguño, observa a sus contrincantes con una mirada y una sonrisa de confianza e indiferencia, y les comenta:

-No tienen una idea de lo que puedo hacer….tendrán que hacer algo mejor.

Al decir eso. Sus manos se envuelven en un líquido rojizo y negro. Con una sonrisa sarcástica, se lanza contra sus adversarios para destrozarlos con sus propias “manos”

Reaccionando rápido, Bleik, se lanza a un lado rodando ágilmente y derrapando sobre el concreto, evadiendo el ataque del joven. Billy, por otro lado, se para firmemente para enfrentarse cuerpo a cuerpo. Al ver venir el primer golpe del dotado, Kid lo toma por el brazo, lo jala hacia él, y le atina un rodillazo en el estomago. A pesar de ser un golpe lo suficientemente fuerte para dejar fuera de combate a alguien, el extraño chico no sufre tanto daño como debería. Sonriendo vilmente, el adepto usa su otro brazo, y toca en el hombro a Bill. Al cabo de dos segundos, el sin ley, levanta una ceja por sorpresa a que su habilidad no haya funcionado. Aprovechando la distracción de su enemigo, Castillos, lo toma por un hombro, y rodeando su brazo sobre su cabeza, bruscamente lo gira, rompiéndole el cuello. Con un crudo crujido de sus huesos, el extraño chico cae al suelo.

Al verlo tendido en el suelo, con el pescuezo dislocado, piensan que todo ha terminado, pero, el cuerpo sin vida del dotado comienza a reír. Y entre risas sarcásticas, les dice:

-Interesante….muy interesante. Veo que las habilidades no te afectan.

Con el mismo sarcasmo, Bill le responde:

-¡¿En serio?! ¡Si no me dices no me doy cuenta!

-Al momento en que te toqué, debiste haberte convertido en un mutado….pero no pasó nada. Muy bien. Deberé ser más drástico.

Mientras tanto, Zeo….

El adepto de trueno y la de fuego, avanzan cuidadosamente sobre la gran comunidad. En las calles, se podían apreciar grandes casas con distintas arquitecturas: algunas con toques medievales, de antaño e italianas, al igual, que grandes parques y zonas recreativas. A pesar de ser un lugar exclusivo para vivir, los únicos que andaban por las calles eran los agentes de elite que custodiaban el lugar.

Escondidos entre arbustos, Sawiken le dice:

-Según la información que obtuve, la casa de uno de los miembros del partido está más adelante: Subiendo una colina, hay una mansión enorme; Allí vive uno.

-¿Quién de los ocho vive ahí?

-El que creó el programa de los agentes. Pensé que si acabábamos con ese primero, la armada se disolvería.

-Bien pensado…Oye…una pregunta.

-¿Qué cosa?

-¿De donde sacaste esta información?

Con una sonrisa, ella le responde con gracia:

-De internet.

-Ya veo…“L.O.L”. Andando.