capitulo 29

Capitulo 29

“Reflexiones de mentes jóvenes”

Varias horas después…. En la terraza del hospital. Víctor y Nicol están sentados en un banco, hablando de manera acaramelada. Cuando, Clara, abre la puerta de la azotea, y ve a los dos jóvenes platicando. Disimuladamente trata de retirarse, pero en ese momento, Nicol, le exclama:

-¡Clara, espera!

Al escuchar que la llaman, abre la puerta totalmente. Pasa por el umbral, y responde:

-¿Qué ocurre?

La común se pone de pie. Se le acerca preocupada, y le pregunta:

-¿Estas bien…?

Escondiendo su dolor, le expresa:

-Sí, no te preocupes….

Al saber que miente, Nicol, la abraza, y le dice:

-Sé que no estas bien… No estas sola. Todos te apoyamos.

Al sentir el afecto y el cariño que emana del abrazo. Sin poder contener sus lágrimas, Clara, le corresponde el abrazo, y comienza a llorar de tristeza por la ida de su única familiar.

Leo, pasa por la puerta, y ve a la chica fría e indiferente llorar por pésame….

Después de un rato. Todos se sientan y platican. Mirando al suelo, la adepta, comenta:

-Todo se acabara mañana, ¿no?.... Todo al menos habrá valido la pena.

Víctor, siendo realista con la situación, dice de manera muy seria:

-Un cambio no debería hacerse a menos que traiga una diferencia. Y aunque lo logremos, los gobiernos seguirán corrompidos. Y también las personas seguirán ignorantes antes las cosas que pasen.

Con sarcasmo, Leo, le comenta:

-Vaya, tú sí apoyas…. Pero…. en parte tienes razón… No sólo por que las personas sepan que quienes los gobiernan son corruptos. Sí no por qué, no sé que les pasa a muchas personas que son cada vez más idiotas.

Nicol, mientras piensa, también comenta:

-Niñas embarazadas… Daño al prójimo sin razón… Están caminando y sacan un teléfono sumamente costoso a mitad de la calle.

Clara se ríe con burla, y añade:

-Ja Ja Ja. No sólo eso. No tienen dinero para comer, pero sí para comprar un teléfono que vale millones… ¿Y se quejan de que no tienen dinero?

-¿Qué te puedo decir…?-Comenta Víctor, con sarcasmo.

-Apariencias, amigos. La gente le importa mucho lo que piensan los demás.-Añade Leo.

-Eso no es todo: no tienen dinero para pagar la renta o para pagar cosas importantes, pero sí tienen dinero para comprar bebida e irse de fiesta.-Dice, Nicol, de cosas muy tristes que pasan hoy en día.

Leo, reflexionando por unos segundos, habla:

-¿Qué puedes esperar? Si una botella es más barata que un libro. Aunque no es culpa de la gente en si… Un niño no va por una botella así como así. Siempre habrá una manzana podrida que meterá a los otros en el mal camino…y ese niño cuando crezca, le enseñara a otros, y a otros, y así sucesivamente; se vuelve como una “cultura”

Con algo de tristeza, Fantasmita, expresa:

-Aceptémoslo…. El mundo cada día empeora más y más… Y todo es por que ya casi nadie piensa en el prójimo. Sólo les interesa su bienestar, y el resto, que se vaya al diablo. Si las personas pensaran más en los demás y se ayudaran sólo un poco los unos a los otros…creo que todo seria mejor.

Con realidad, el adepto de rayo, comenta:

-Cada día… todo empeorara. La idiotez de la humanidad, por querer ser el “más temido del barrio” o las personas que quieren aparentar cosas que no son. Gente que se dejan llevar por modas o por sus aparatos.

Clara, le responde:

-Eso se le llama comercio. Ja Ja. Veras: Se saca un teléfono que vale una fortuna, la gente lo compra, varios meses después sale el mismo teléfono pero con una cámara: Las personas enloquecen y los compran. Al cabo de otros meses, sacan el mismo teléfono pero con otro implemento, las personas se vuelven aún más locas y los compran… Así son los teléfonos, las consolas, los televisores y más….A eso se le llama: “Engañar a los tontos”

Con sarcasmo, Víctor, comenta:

-¿No tengo para comer? ¡Pero sí tengo mi teléfono de última generación!