Crónicas De Alanna

Capitulo 1

Capítulo 1: Las desventajas de este mundo.

Alanna.

Cuando naces en un mundo lleno de magia, es normal que tengas que tener magia, pero ese no es mi caso, todos posen un poco de poder mágico, unos más que otros, pero yo no, creo que por eso mis padres me dejaron aquí, el nacer sin magia en una desventaja clara aquí. Las personas con poca magia son discriminadas y tratadas mal, y todo eso empeora para quien no tiene nada de magia. Ya que con la magia puedes hacer prácticamente cualquier cosa.

Tengo toda mi vida aquí y nunca he recibido un buen comentario de los habitantes del pueblo de Ferhiuruz, perteneciente al reino de Berkanenns, es un reino pequeño, pero con guerreros feroces y fuertes habilidades mágicas, por eso no nos preocupamos pon invasiones de otros reinos.

Cuando tenía 5 años fui encontrada en el bosque, sola y sin nada, al parecer mis padres me dejaron, quizá porque no me querían o por no tener poder mágico, solo sé que desde ese entonces no he conocido la felicidad o el amor.

Vivo en una pequeña cabaña y puedo sobrevivir con lo poco que obtengo de hacer trabajos para las demás personas, trabajos que nadie más quiere hacer, como limpiar las letrinas o lavar la ropa en invierno.

_Alanna, ¿cuando vas a terminar de coser ese abrigo?._ Me dice Moira entrando a mi cabaña repentinamente y sin avisar.

_Ya no tardare mucho, ya falta poco._ le dije murmurando para que no se enoje, cuando contesto con normalidad, se suelen enojar y me golpean, así que evito alzar la voz.

_Eres una inútil, te lo traje en la mañana y no has terminado, ¿qué estupideces has estado haciendo?_ me dice mientras me jala del pelo fuertemente.

_Lo… lo siento, es que en la mañana tuve que ir a limpiar los establos y fui a recoger hierbas para doña Orla._

_Solo sabes dar escusas, en un rato voy a volver y si no está listo te voy a quemar hasta que mueras._ me dice, la verdad me da mucho miedo, ella puedo generar fuego, no es muy fuerte pero es lo suficientemente potente para infringir daño, lo sé porque otras veces lo ha hecho.

Cuando sale, no puedo evitar romper en llanto, yo ya no quiero esta vida, a veces quisiera desaparecer o morir, así sería la única forma que tendría para descansar, todos los días es lo mismo, siempre termino muy cansada, hay días que no tengo que comer y nadie se preocupa por eso, y creo que si algún día muero a nadie me vaa a importar.

………………………………………

Después de entregarle el abrigo terminado de remendar a Moira tuve más cosas que hacer, y ahora ya es de noche, todos duermen y yo apenas voy a cenar, pero estoy tan cansada que solo me quiero dormir, y eso hago ya que mañana me tendré que levantar muy pronto. Así que solo extiendo las cobijas que me sirven de cama en el frío suelo y cuando me acuesto casi de inmediato caigo dormida.

Después de un rato despierto porque siento que alguien me está observando, me da miedo abrir los ojos, pero con todo y miedo los hago, esperaba ver a alguien conocido del pueblo, pero no, veo a una hermosa mujer, de pie no tan lejos de mí, pero me asusto y me enderezo rápidamente, cuando noto que todo está en completa oscuridad, a donde sea que vea es oscuridad, no es mi cabaña y eso me da más miedo.

_Tranquila, no te asustes, esto solo es tu mente, está muy oscuro, y por eso puedo darme cuenta de que no eres feliz… pero si me lo permites yo puedo ayudarte a ser feliz._ mientras más habla, menos le entendía, pero el miedo que sentía poco a poco se esfumo, esta mujer tiene algo que hace que me calme.

_Esto… ¿esto es un sueño?._

_Digamos que…si, pero lo que te digo es verdad, te puedo ayudar._ me dice y se acerca un poco hacía mí.

Mientras más la veo, pienso que este no puede ser mi sueño, nunca había tenido un sueño tan claro y no tengo la suficiente imaginación para crear su hermoso rostro.

_¿Como… como me ayudarías?._ cuando termino de preguntar me sonríe, y es la primera vez que ciento una calidez en mi pecho.

_En realidad nos ayudaríamos mutuamente, yo te saco de esta miseria y tristeza en la que vives y yo podre vengarme, hace mucho tiempo alguien me mintió y no lo perdonare._ cuando dijo lo último sentí un poco de miedo ya que lo dijo fríamente pero después me dio una sonrisa. _Solo necesitas prestarme tu cuerpo._

_¿Mi cuerpo?._

_Si, necesito que me dejes entrar, no te lo voy a quitar solo lo vamos a compartir, cuando haya cumplido con mi objetivo me iré, pero tu estarás viviendo lejos de aquí y feliz, de eso me encargare._

Todo lo que dice es raro, pero no puedo evitar pensar en cómo será una vida lejos y feliz.

_¿Yo no sé qué hacer?._

_Nada, no hay necesidad de hacer nada, solo acepta y toma mi mano._ me dice y extiende su mano, dudo en si tomarla o no, pero al final me decidí por tomarla, al fin no tengo nada que perder, cuando estoy por tomar su mano, despierto de golpe, cuando siento que cae agua fría encima de mí, cuando abro los ojos puedo ver a Yildo, con un balde en sus manos.

_¿Qué demonios pasa contigo?, no podía despertarte, solo lo logre echándote agua, el sol ya salió y tu aun no estás en los campos._ cuando dijo que el sol ya había salido, me sorprendí mucho, nunca por más cansada que estuviera me había despertado tan tarde, a esta hora ya estaba haciendo algo, pero esta vez no fue así, me pregunto si fue por ese raro sueño.



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En el texto hay: amor, magia, venganza traicion

Editado: 07.01.2022

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