Capítulo 64: Las Compras en Raz Al"Nar.

─Hemos llegado a la Perla del Este: Raz Al"Nar ─comunicó el capitán Gideoni.

─Bien, vamos directo al palacio feudal ─ordenó Vhalir.

Maya toma su equipaje de mano y en eso Vhalir la detiene y le dice:

─Maya te asignaré a dos custodios, Moel a quien ya conoces, y a Reza ─dijo Vhalir─, te acompañarán todo el tiempo y no se separarán de ti, el Mayor Shamir Raam quien le conozco y es de la confianza de Abner, asignó a Jannah y a Judith unas custodios mujeres para que relevar a esos chicos.

Reza era un soldado raso, del mismo escuadrón de Moel, casi un niño, pero la expresión de su rostro, era tan inmutable como Moel. Asignado al escuadrón de custodia del Príncipe, ahora estaba otro oficial, de la misma edad de Vhalir, el Mayor Shamir Raam quien ya lo había presentado previamente antes de volar en Nol"Har. Por su parte, Jannah era una chica blanca de cabello corto claro, pequeña pero eficaz, Judith era otra chica delgada como Jannah, de aspecto más morena que la otra y una distintiva cola negra en su cabellera.

El séquito toma la caravana que los llevará directo al Palacio Feudal y son recibidos por el Conde Josías con una breve ceremonia improvisada. Al terminar el formalismo, Shauri se lleva rápidamente a Maya hacia otra sala, separándola de Vhalir, sin quitar la mirada de su nueva e inmutable  escolta.

Vhalir y el Conde Josías comienzan a caminar dentro del palacio en dirección a la oficina del Conde para conversar unos asuntos políticos y de gobierno. Mientras caminan al frente, tenía detrás a todo el séquito de asistentes y seguridad, los militares trataban a Vhalir como el Rey.

─¡Alteza!, es tan sorpresiva tu visita, me siento de verdad halagado y sorprendido. ─exclamó el gordo Conde.

─Vine solo por un par de días, quizás tres, ─señala el número con los dedos de su mano─, eso depende de las compras que realice mi prometida.

─Vaya Alteza, ¿vino a Raz Al"Nar con la joven tejnik para que conozca la ciudad?

─Fue sugerencia de su hija, Excelencia, va a comprar el vestido de novia, ya sabe, la calidad de las telas en la ciudad como el costo y ella se ofreció de preparar los detalles de la boda.

─¿Mi hija? ─exclama sorprendido el Conde─ ¡No lo sabía!, me pidió permiso para ir a la capital desde Kund"Nar para hacer unas compras allá, no que los iba a visitar.

─Apenas llegamos del Sanog Central para fijar fecha de la boda y del curso matrimonial expreso, y gratamente ella nos esperaba en el Palacio.

─Pues tiene una excelente guía, mi hija es buena con esas cosas de mujer, aprendió bien de su madre.

─Conde Josías, cambiando el tema, la razón por la que vine aquí es para conversar aquí con usted y me hable más sobre el problema de la piratería y contrabando. Usted mencionó en Kund"Nar que la actividad ilegal está ocasionando muchos problemas y mi padre me había comentado que usted estaba al borde de reclamos y solicitaba acciones directas, por eso también he venido para enterarme de primera mano.

Los nobles siguen por un gran pasillo, Vhalir camina alto firme y de frente como si conociera a donde iba y el obeso Conde, tratando a su lado de seguirlo con dificultad, éste le contesta con su jadeante voz.

─Que bueno que lo diga, le he comunicado a su padre, que necesito apoyo de la Marina del Norte, para reforzar las nuestras en el convulsionado sur lleno de piratas.

─¿Y que le dijo mi padre?

─Primero me dijo que controlara con la guardia local, que conversaría con los mandos y los condes del norte el apoyo, pero usted bien sabe, su tío murió, y Enor..., es Enor que aún se esta empapando en estas cosas militares ya que creo que no tiene formación militar.

─Alina está al mando de las tropas hasta donde sé.

─Alina, no, es Enor prácticamente ayer tomó el mando de las tropas, impuso a un amigo suyo y tiene a hermana de lado.

Vhalir frunce el ceño ya que no estaba al tanto de la situación, cierra sus ojos pensando lo que va a decir y recuerda que Maya le dijo que llamó a Alina para que la acompañara a las compras, y entonces le dice a Josías:

─Alina viene para acá, hablaremos con ella apenas podamos. ¿Y la marina de Ismail?, hay una base cerca de Ha"Melek, y una base portuaria en el continente, puede enviar refuerzos.

─En Kund"Nar durante el funeral de su tío, toqué el tema con Ismail y con Ahmed por separado, me argumentan, uno, que debe custodiar el norte de la marina y los piratas koralianos, Ismail que debe cuidar Ha"Melekh, y la entrada al río Yezad, que enviarán cuando puedan un contingente de barcos para reforzar la seguridad. Mientras tanto, los zenobianos, nuestros principales proveedores y únicos socios comerciales, siguen quejándose que han sido asaltados por piratas frondanos en nuestras aguas, con algunos delincuentes parias nuestros, y por otros piratas de la misma Zenobia; la última es que están llegando informes de piratas tzaring frondanos.

─Con el gobierno corrupto que se instaló allá, es probable que su cuerpo de seguridad se haya corrompido.

─Alteza desde hace tiempo, nosotros hacemos lo que podemos, tengo una fuerte división de soldados de infantería y varias divisiones mecanizadas, mechas armados, pero no son marinos, necesito más navíos, para trasladarlos y entrenarlos para la lucha marina. Si bien mi provincia es pequeña tengo una amplia frontera marina con tres naciones.

─¿Que se te pasó con la marina reasignada de Mel"Nar?

─Le seré honesto, no era una marina completa, ya que llegó una orden del General Acab para ubicar gran parte a la provincia de Ursh"Nar bajo control de Ismail.

─Ismail de nuevo, vaya que tengo que reorganizar muchas cosas.

─Fueron órdenes de Su Majestad, así me dijo el General Acab cuando le reclamé.

─Entonces estás trabajando con poca fuerza policial y marítima.

─La policía y la guardia marina hace lo que puede, esta semana hemos dado un duro golpe al contrabando, desarticulamos una peligrosa banda de contrabandistas, el juez ha sentenciado a casi todos a la muerte por la horca, incautamos tres barcos; uno contrabandeaba licores entre ellos imitación de vino de sarbara; otro asaltaba con lamentables hechos criminales, asesinaron a una familia dueña de una embarcación, que traía telas importadas de Zenobia; y un tercero transportaba ilegalmente aceites industriales a Fronda desde aquí.