CAPÍTULO 5
El chico estaba sentado en el suelo no paraba de temblar le observaba fijamente, con una media sonrisa burlona.
-No voy a hacerte daño. De hecho te he elegido a ti. Esa noche te vi estando con una chica, y hubo una pelea por algún motivo estúpido que tenéis los humanos. Defendiste a esa muchacha y entonces vi que había valor en ti.- explicó el vampiro
- ¿Me viste una vez defendiendo a una chica? Pero en esa pelea no salí bien parado.- preguntó
- No me interesó si ganaste la pelea o no. Lo que me llamó la atención es que en tus golpes se veía una furia reprimida esperando salir. Así que te investigué y mis sospechas se hicieron realidad.
- ¿Me elegiste? ¿A qué te refieres?. ¿Y a que viene lo de los asesinatos?- dijo contrariado Sergio
- La noche en que murieron esas dos jóvenes, te mordí. Hay gente que fallece enseguida después de eso. Los que sobreviven ya no son los mismos, empiezan a tener unos sentidos más desarrollados una fuerza mayor a la de un hombre corriente- continuó relatando
- ¡No es posible!- exclamó el periodista
-¿Lo que has visto se corresponde con lo que tu consideras real?. Respondiendo a tu pregunta de antes las muertes de esas personas solo es diversión. Llevo mucho tiempo en el mundo y todo lo que antiguamente era divertido ya no lo es.
- ¿Qué estás diciendo que has matado a esa gente únicamente por divertirte?
- Así es. Quería ver tu reacción. Pensaba que dejándote el recorte del periódico sufrirías una especie de colapso mental y pasarías la noche refugiado en la bebida. Pero está claro que no es así. ¡Eres mejor que lo que imaginé!.
- ¡Eres un cabrón!- gritó y se levantó para intentar golpearle.
- ¡Esa es la rabia que buscaba!. Deja que ella se apodere de ti!- dijo sonriendo
Al escuchar esas palabras el chico que había agarrado de la chaqueta al vampiro se separó.
-¡Cuánto control tienes!. Eres mucho más interesante de lo que creía. ¿Pero cuánto podrás controlarte?, poco a poco vas a ir cambiando y te convertirás en un ser de la noche.
- ¿Estás queriendo decir que estoy en ….?
- Transición así es. Calculo que en unos meses comenzaras a sentir ganas de alimentarte de sangre. Puede que antes si dejas que la rabia que tienes dentro de ti se apodere. Puede ser difícil pasar por esa transformación solo. Únete a mí y no lo estarás. ¡Yo te guiaré!.- comentó en tono calmado.
- ¿Por qué lo harías?. ¿Qué sacas a cambio?- no dudó ni un momento en preguntar.
- ¡Aún no es tiempo de eso!.
- ¡Muy bien pues rechazo tu ofrecimiento, como te llames!.
El chico de pelo negro explotó en una sonora carcajada.
-¿De verdad crees que puedes contenerlo?. ¡Me hace mucha gracia!. Los humanos no paráis de sorprenderme. ¡Muy bien!. De acuerdo te dejaré a tu aire. Cuando te hayas dado cuenta de que no puedes hacerlo, tú vendrás a mí. -
- ¡Olvídate no voy a unirme a ti!.- gritó Sergio.
- ¡Por cierto me llamo Bruno!. Nos vemos – Se despidió y salió corriendo de allí.
Sergio no podía moverse estaba consternado con todo lo que había pasado, cuando escuchó unas sirenas. La policía se acercaba, aparecieron varios policías con perros y el agente Alejandro Calvo.
-¡Te estábamos buscando!. ¿Estás bien?- preguntó el amigo de su padre
- ¡Sí estoy bien!. Mi hermana…
-¡Ella está bien!. ¿Pero qué ha pasado?. Me ha dicho que saliste corriendo en busca del asesino.
- ¡Consiguió escapar!- respondió rápidamente.
Los dos salieron del callejón sin salida sin saber que Bruno les observaba y no estaba solo le acompañaba una chica de melena larga, oscura, delgada, con ojos verdes tirando azules, delgada y atractiva
-¿De verdad vas a dejarlo a su aire?- preguntó la mujer.
- ¿Por quién me tomas?. Los asesinatos continuarán y le presionaré de una manera que no lo puede imaginar. ¡Tengo un plan y formas parte de él!.
CONTINUARÁ