–¡La encontramos!– dijo una voz masculina, Danna veía varias luces moviéndose de un lado para el otro, flashes de gente borrosa, manchones naranjas, negras y blancas todo era confusión, sentía como su cuerpo se elevaba para después ser colocado en algo firme –¡Llévensela al hospital de inmediato!– ordeno alguien a su lado.
Los bomberos habían encontrado una escena destructiva, varios pisos habían sido demolidos, ventanales destrozados regados por el piso, autos en llamas en la calle, todo un campo de batalla acordonado por los policías.
–¡Sáquenlos ahora! El lugar podría colapsar– escucho Danna mientras era llevada en una camilla.
–¡Aquí tengo dos personas ayúdenme!– escucho el gritar de alguien lejano
–Estabilícenlos y despejen el lugar, busquen si existen más gente en los demás pisos superiores debemos salir de este lugar…– las órdenes iban y venían mientras Danna apenas captaba momentos de lo que pasaba a su alrededor.
Afuera la gente rodeaba la entrada del edificio de la Farmacéutica Elise, los cuchicheos y los flashes de las cámaras no paraban, al igual que las preguntas sobre lo ocurrido. En los cielos un helicóptero iluminaba la entrada captando la escena para el noticiero.
–Sus signos son débiles, pero… que carajos le paso en el cuerpo– se oyó la voz de una mujer –esta inconsciente, tiene varias líneas por todo el cuerpo como quemaduras y una pierna perforada, necesito 20 mg…–
Danna entendió que debían ser las runas
–¡Súbanla se está desangrando!– ordenando la paramédica –¿Qué paso con los otros cuerpos?–
Danna se asustó apenas podía mantenerse en la realidad la fuerza en su cuerpo se evaporaba lentamente impidiéndola siquiera levantarse o pensar claramente.
‘Liam’ musito o eso creyó haber hecho porque solo lo había pensado –Liam– repitió, no escucho, ni sintió nada, las emociones y sensaciones de Liam habían desaparecido.