cuentos

01 - Anai

Érase una vez una doncella llamada Anai que vivía en un lugar muy lejano donde todo era paz y armonía.

Hasta que un día todo cambio pues hubo un enfrentamiento entre las dos familias más poderosas de lugar por el control de pueblo, pero el hijo mayor de los Rodríguez, Kristopher no estaba de acuerdo con esa absurda discusión y decidió huir.

Cuando pasaba por el bosque fue atacado por unos ladrones y la hermosa Anai vio todo lo que pasaba y decidió ayudar al joven que había que dado mal herido e inconsciente tras el ataque y lo llevo a su casa, una humilde covacha que estaba alejada del pueblo.

Al trascurrí unas horas el apuesto joven recobro el sentido y lo primero que vio fue el hermoso rostro de Anai. Pero no recordaba nada y pregunto.

- ¿Quién eres? ¿Dónde estoy?..

- Y ella le respondió soy Anai estas en mi casa te recogí en el bosque estabas inconsciente, ¡No te acuerdas!

-No me acuerdo de nada, ni quien soy.

-Bueno la primera vez que te veo por aquí pero si quieres voy al pueblo y pregunto si alguien te conoces.

Pero él estaba tan asustado que le dijo que no que mejor él iba a tratar de recordar pero que no le dijera a nadie que sabía de el por qué tenía miedo. Ella acepto porque tenía miedo que le pasara algo malo después de eso.

Anai le propuso que escogieran un nombre para comunicarse mejor y él no sabía que nombre escoger y ella le puso: Daniel y él estuvo de acuerdo.

Mientras tanto en el pueblo la familia rodríguez estaba preocupa por que el, la hermana de Kristopher, Lola cajo en una depresión porque su hermano no aparecía y la discusión cada día empeoraba.

Mientras que en la pequeña cabaña Kristopher y Anai comenzaban a sentir una atracción el uno por el otro pero ninguno de los dos son capaces de expresar lo que sienten.

Pasan y pasan los meses y Kristopher no puede contenerse más y besa a Anai y cuando todo iba bien uno de los sirvientes de los Rodríguez lo vio y aviso a la madre del joven y fueron a buscarlo Y le dice.

-Kristopher.

-Perdón me habla a mí.

- Si, a ti hijo por fin te encontré. Ahora si vamos a estar la familia junta otra vez.

-Señora está segura de lo que dice ¿Es usted mi madre?

- Sí, hijo mío vamos a casa.

Él se va con su madre pero en la mente lleva a esa hermosa joven que lo ayudo y de la cual esta perdidamente enamorado.

Pasan unas semanas y Anai no sabe nada de Daniel y de pronto ve en la lejanía venir un apuesto caballero en un hermoso corcel y para su sorpresa es Daniel el amor de su vida y sorprendida dice:

-Daniel volviste.

-No, mi nombre no es Daniel, es Kristopher.

- Perdón no lo sabía.

-No pasa nada yo solo vine a darte las gracias por todo lo que hiciste por mí.

-No tienes que agradecer hice lo que cualquier persona hubiera hecho.

-Solo me ayudaste para ser una obra de calidad.

-Claro por qué mas lo haría (aunque ella sabía que hacia mal estaba dolida porque él se fue y no le dijo nada).

-Bueno solo vine para agradecerte y como ya lo hice ya me voy.

Ella solo asintió.

Él no lo podía creer lo que veía aquella muchacha feliz y con una sonrisa con la que había pasado momentos inolvidables para él y de la que se había enamorado estaba tan distante. Aunque el no solo había ido a agradecer sino también a decirle lo que sentía por ella a pesar de lo que pensaba su familia acerca de su relación.

Así que antes de irse él se voltio y la miro a los ojos y le entrego una cantidad de dinero y le dijo:

-Esto es por tu ayuda y tu hospedaje.

Anai estaba tan ofendida que le tiro el dinero y le cerró la puerta en la cara. Ella no lo podía creer no sabía q hacer el hombre del q estaba enamorado era todo un patán.

Cuando Kristopher se dio cuenta de lo que había hecho se arrepintió ¿por qué lo había hecho? ¿Qué le había pasado? ¿Qué iba hacer ahora? No podía perder a Anai así de fácil él, la quería pero lo había arruinado todo por su estupidez.

Al llegar a su casa encontró otro problema pues en la sala estaba su familia reunida y con la compañía de una hermosa joven llamada Amanda con la cual sus padres querían que se casara pero él no la amaba.

Mientras que en la pequeña cabaña Anai estaba sufriendo pues no sabía qué hacer si hacerle caso a su corazón o a su orgullo.

Tiempo después anuncian la noticia del matrimonio entre el hijo mayor de los rodríguez y Amanda una joven de sociedad, cuando Anai se enteró decidió irse y así olvidar a Kristopher.

Cuando Kristopher supo que Anai se había ido decidió cancelar todo lo del matrimonio y enfrentar a su familia por la mujer que ama.

Anai solo quería olvidar todo y empezar de nuevo así que se fue lo más lejos posible, mientras Kristopher enfrentaba a su familia aunque no fue fácil pero al final comprendieron que el amor de su hijo por esa humilde muchacha era fuerte tanto que era capaz de abandonar todo y renunciar a la herencia.

Kristopher pasó semanas buscando alguna pista sobre el paradero de Anai hasta que un día cuando las esperanzas estaban perdidas vio a una mujer que se parecía a Anai a través de una de las ventana de la floristería y decidió entrar pues no tenía nada que perder.



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En el texto hay: fantasía y amor

Editado: 17.12.2019

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