Comparto con ustedes mi relato de un concurso espistolar, en el que había que escribir una carta poniendonos en el papel de aquellos personajes mágicos a los que le enviábamos nuestras cartas de niños.
Querida y maravillosa persona:
Soy el ser mágico en el que creías y depositabas tu ilusiones cuando solo eras una inocente criatura.
La nostalgia que invade tu corazón en estas fechas navideñas, recordando vuestra infancia escribiendo aquellas cartas que con tanta ilusión nos hacían llegar vuestros seres más queridos, hoy solo es un vago recuerdo. Ahora que eres adulto aquella mágica ilusión ha desaparecido. Por ello, te escribo hoy esta carta, porque tú también eres un ser mágico, aunque a penas lo recuerdes.
Con esta carta te envío:
Fuerza, para que en esta vida tan difícil abordes los problemas con el coraje que solo tú sabes que tienes. Esa que te obliga a levantar la cabeza, mirar al frente y superar los obstáculos que te vienen.
Optimismo, para llenar la vida de energía positiva y nunca tengas miedo de hacerle frente.
Gratitud, para que siempre seas agradecido con lo mucho y lo poco.
Euforia, para que siempre percibas que la vida es maravillosa y no decaigas jamás.
Y por último amor; amor por tu familia, por la gente que te rodea, por los animales que te acompañan y por los que no; pues el amor es complejo y siempre mostrará lo mejor de ti mismo.
Ahora está en tu mano, haz un cóctel con esos cinco sentimientos para que en estos tiempos tan difíciles por los que estamos pasando y por los que quedan por pasar, tengas tu armadura preparada. Con ella conseguirás atravesar estos arduos caminos y te prometo que al final, la sensación del bienestar las tendrás asegurada.
Unas últimas palabras antes de despedirme. Recupera la ilusión. La misma inocente ilusión que te hacía invencible cuando eras solo un niño. La ilusión por tu trabajo, que es el que te da de comer. Pero sobre todo, la ilusión por tu sueños, pues tú eres la única persona con el poder de hacerlos realidad. Así volverás a ver tu propia magia resurgir.
Llegó el momento de la despedida. Espero que esta carta llegue a tus manos y con ella consigamos cambiar el rumbo en este nuevo año y los que quedan por venir.
Un fuerte, optimista, eufórico y agradecido abrazo con mucho amor.