capitulo 1

• ¡Noooooo! - dijo Meyko, cuándo escucho el instrumento romperse.

Se quedó petrificado al ver como el instrumento de su hermana  se rompa en dos. Sabían que cada instrumento estaba ligado al alma de quién la tocaba, y que si el instrumento se rompía el alma de aquel al que estaba ligado también se rompía y por lo tanto la persona moría. Y esto lo sabían todos los que eran parte de la orquesta, para que nadie se arriesgara a hacer una locura, pero no fue suficiente para Lesly, lo hizo para que su hermano no lo hiciera, estaban en apuros en la batalla y ella decidió dar su vida por la de Él.

• Meyko - gimoteo su hermana Lesly - siempre he sabido que debía ser yo.

Meyko dejo su lugar donde estaba posicionado, el del concertino, para ir hacia Lesly, que estaba entre las violas, la tomo en los brazos y empezó a despedirse pues observo que ella moriría en cualquier momento.

• Lesly, no debiste hacerlo, no debiste arriesgarte - dijo Meyko - sabías que era demasiado y no podías con esa pieza, no debiste arriesgarte y menos por mi - Meyko cerró los ojos para no llorar.
• Lo sé - dijo Lesly - pero este no es mi lugar, Yo la vi, Meyko - Meyko la miro - la vi a ella mientras tocaba – pausa - la vi Meyko, ella es quién acabara con esto y quien se ganara tu corazón.
• Me estas tomando el pelo Lesly - dijo Meyko, extrañado de ver a Lesly hablar así antes de morir - ¿a quién viste? - en ese momento los interrumpió pedro.
• Me dejaras solo Lesly - pregunto pedro - quién aguantara mis locuras.

Lesly se rió, luego empezó a toser.

• Pedro, prométeme algo - dijo Lesly - ¿lo harás?
• Claro, ¿Qué quieres que prometa? – dice pedro - que no deje solo a tu hermano - Pedro sonrió.

• La verdad es que no estaría mal, pero no - dijo Lesly - lo que deseo es que cuides de la persona que tomara mi lugar, va a necesitar mucho de ti.
• Oh, bueno si es eso solamente - pedro la miro con tristeza y dice - te extrañare Lesly, no sabes cuánto.

Pedro estaba enamorado de Lesly, pero por respeto a Meyko que era su mejor amigo nunca tuvo el valor de decirle, además no quería arruinar su amistad con él. Al final de ese día lamento no poder decirle a Lesly que la amaba ya que la perdía para siempre. Él le regaló un abrazo y un beso de despedida el cual fue dedicado con amor.

• Meyko - dijo Lesly - no te culpes a ti por todo esto, fue mi decisión - volvió a toser - ya estaba previsto y ahora ella tiene la oportunidad de arreglar las cosas.
• Pero ¿Quién es ella, Lesly? - dijo Meyko - y por qué te empeñas en que yo la acepte.
• Ella es la elegida, no era yo pues por el amor entre ustedes es que vendrá la paz – dijo Lesly - además es tiempo de irme.

Meyko la observó y dijo - Adiós Lesly, no prometo que estaré igual, no me comprometeré igual que pedro.

Al decirlo Meyko observo como la viola de Lesly terminaba de desaparecer de su vista, al parecer cuando el instrumento se rompía también desaparecía, luego vio cómo su hermana se volvía polvo en sus brazos y recito, “del polvo somos y al polvo volvemos.”

Tras decir esas palabras se despertó sobresaltado en la cama, ya hacía tres meses que su hermana había muerto en esa batalla que salía todo mal y las noches le traían ese amargo recuerdo. Nunca entendió porque Lesly dio su vida por él, si la de ella valía más, el alma de Lesly era pura y llena de amor, pero la del solo estaba llena de orgullo y egoísmo, de no ser así tal vez Lesly estuviera viva, tal vez si él hubiera sido humilde, el fuera el que estuviera muerto y no ella. Siempre se culpó por ello, pues llevo al equipo al máximo sin importar que y perdió, perdió la batalla final y perdió a su hermana en el proceso.

Para esa batalla solo se seleccionó un cuarteto de cámara, él pensó que no necesitaban nada más para ganar. No pensó en el equipo contrarío, que era el mejor y con razón siempre ganaban, sus integrantes eran bien  seleccionados, lo mejor de lo mejor, los más experimentados. Perdió y no era su derrota lo que más le dolía, era que había perdido a Lesly.

Cuando él pensaba en Lesly su corazón dolía, él había jurado proteger a su hermana desde que eran niños y le había fallado. ¿Cómo él podría proteger a su pueblo si ni siquiera pudo proteger a su hermana?, es lo que decía para sí, sobre todo ahora que era el príncipe heredero. Se juró para sí mismo no amar o querer a nadie, porque el amar hacia débiles a los hombres.

¿Quién quiero ser?