Nicolás
— ¿Que planeas? —La sonrisa de Savannah me hace sonreír mientras la llevo a mi pequeña guarida, espero aun este allí
Trato de no reírme de su ansiedad, pero lo cierto es que es contagioso.
—Te mostrare una parte de mi —Le digo mientras la jalo para besarla.
Nos reímos durante todo el camino y no puedo creer que una mujer como ella se haya fijado en un tipo como yo. Supongo que este es mi regalo por todo lo que he pasado. Fui un ciego al no darme cuenta antes, pero supongo que al verla defenderme en mi peor momento me llego a despertar y ver que yo valía la pena. Una mujer vale la pena cuando es la correcta. La ayudo a subir corriendo. Estamos en la casa de los juegos de pequeños y aunque está abandonada es bellísima.
Esta jadeando, su físico no es el mejor y dudo que le guste el deporte. Sonrió cuando veo sus ojos brillar al ver todo lo que hay allí. Tal vez no hayan venido en mucho tiempo, pero está bien conservado.
— ¿Este es tu escondite? —Asiento totalmente avergonzado.
Simón y yo lo compramos ahorrando por más de dos años, pero valió la pena. Este lugar me dio muchos momentos felices, con él nos alejamos, pero no quita la importancia de este lugar.
— ¿Qué haces? —le digo mientras la veo quitarse la ropa
— ¿Tu qué crees? —Me guiña el ojo mientras se desnuda.
Tengo miedo de parpadear y que esto solo sea una jodida visión de mi imaginación. Me acerco, agarro su rostro y la besa castamente
— ¿Estas seguras? —Ella asiente mientras toma mi mano para llevar a su cintura.
Mi amigo parece muy feliz, definitivamente me encanta la nueva Savannah que he conocido, asiento rápidamente y me comienzo a desnudar.
Me quito mi ropa y cuando estoy ya listo me acerco a besarla con más fuerza
—Joder —Digo cuando siento lo húmeda que esta —Que rica que estas
Me deshago cuando la veo moverse contra mis dedos
—Nicolás Quiero... —Todo mi cuerpo está temblando y cuando me doy cuenta la estoy tomando de los muslos para colocarla contra la pared. Sus senos son redondos y grandes, no puedo evitar perderme en ellos por un buen tiempo.
Cuando la voy a besar nuevamente ella me detiene
— ¿Puede intentarlo? — Pregunta ella a lo que yo alzo una ceja
Cuando la veo señalar mi miembro este parece colocarse más duro si es posible.
—Los ojos en mi —Su timbre de vos se volvió demasiado sexy —Solo yo, disfruta cariño
Sus ojos están llenos de deseo se encuentran con los míos, ella comienza a lamerlo como si fuera una paleta, sus ganas de complacerme son más grandes de lo que podía imaginar, siento que estoy a punto de venirme y sin poderlo evitar termino en su boca. Nunca me había pasado esto. Llevo bastante tiempo sin sexo, pero sin duda alguna esta mujer está hecha a mi medida.
—Detente —Le digo cuando veo que vuelve a tomarlo en su boca, pero un mordisco en el prepucio y me hace olvidarme completamente de mi petición.
Vuelve a lamerme, dios me ayude esta mujer tiene el control. Comienzo a embestir en su boca a medida que mi necesidad crece.
Antes de que ella me vuelva a hacer venirme el tomo en brazos para juntos sentarnos en un sofá cercano mis labios están muy cerca de los suyos
—Si —Dice ella cuando meto dos dedos en su collo, que está muy apretado —Joder así mas
Cierro los ojos mientras el poder de sus palabras me golpea Joder.
Vuelvo a besarla, pero esta vez tomando de su nuca con más fuerza de la necesaria, su lengua sale a tocar la mía y ella gime. Su coño está chorreando con mi otra mano y eso me pone a mil.
—Mételo por favor —Me pide y yo sonrió grandemente porque no le hare caso
Sus ojos se encuentran con los míos y ella quita su mano de mi hombro para deslizarlos dentro de ella ayudándome. Mico con el aliento contenido mientras ella los lleva hasta mi boca y los pasa a través de mis labios. Lamo hasta no dejar ni una gota en ellos. La veo gritar mientras se viene y me encanta verla perder el control. Cuando baja de su montaña toma sus senos en las manos y me los acerco. Su cuerpo se tensa tan pronto como mi boca toma unos de sus pezones y sus dedos van a mi pelo. Su agarre es tan fuerte que me hace sentir algo de dolor, pero me encanta.
—Debes detenerte yo quiero —Dice mientras sigo chupando su seno por fuerza, muerdo su cereza que me sabe a gloria —Joder ¿Puedes hacerlo otra vez?
Sus caderas siguen trabajando contra mis dedos.
—Me encanta que pierdas el control, si sigues moviéndote así perderé el control. — Chupo su peso más fuerte y siento su cuerpo sacudirse nuevamente. Antes de poderlo evitar entra mi pene en su coño y me vengo dentro de él.
—Joder —Murmuro mientras suelto su pezón y apoyo mi frente contra sus senos —Todavía quiero mas ¿Puedes? —A pesar de que mi pene ya se vino sigue igual de duro aun no tengo suficiente de mi mujer.
La miro a los ojos y puedo ver que el sentimiento es mutuo.
—Joder me encantas —Dice mientras lame mis labios y me besa con fuerza, tomo sus caderas con fuerza para encontrarse con las mías.
—Savannah —Gimo, mis manos están tirando de su nuca hacia mi
Ella me cabalga como si fuera que esto dependienta su vida
—Por favor más duro —Me suplico y yo no puedo evitar sonreír
Muerdo sus pezones intercalándolos. Dolor y placer parecen volverla completamente loca. Puedo sentir el clímax recorriéndome empujándome al límite.
Esto me está sobrepasando, es más que sexo y ella también lo sabe. Las emociones envían estremecimientos a través de mi cuerpo. Y es la mejor sensación que he tenido
—Sí, oh si —Grita ella mientras se empuja más dentro de mí.
Cuando nos venimos, no puedo hablar quede completen sin aliento., el calor está pasando y veo que Savannah cierra sus ojos. Joder me enamore de mi jefa, ella corresponde mis sentimientos y estamos ¿Saliendo?
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Editado: 22.12.2021