Todos se miraron algo sorprendidos porque ni se dieron cuenta en el momento que se acercó ese chico joven a saludarlos, no le contestaron muy amistosos como solían ser pero tampoco fueron groseros.
¡Muy bien gracias! – Respondió Máximo bajando del auto también –
¡Me alegra saberlo… y! ¿Ella quién es? – Preguntó muy interesado en _____________, la miraba de pies a cabeza y ni siquiera parpadeaba como para no perderse detalle de la mujer que tenía enfrente –
¡Es mi prima _____________! – Dijo Sebastián colocándose frente a él, parecía algo molesto con la manera en que miraban a su prima pequeña –
¿Otra Castillo? – Exclamó casi refunfuñando de que hubieran más primos –
¡Sí! ¿Algún problema? – Agregó Alexis cruzando sus brazos y mirándolo fijamente, a ellos no les caía ni bien ni mal, pero tampoco dejaban pasar una falta de respeto como esa –
¡No ninguno! Entre más Castillos mejor – Contestó con una sonrisa burlona, de repente ese chico no le inspiraba nada de confianza a ______________ ni a sus primos tampoco -
¡Vamos a buscar a la tía! – Dijo Miguel Ángel queriendo entrar a las oficinas pero su la señora Sofía estaba saliendo en ese momento –
¡Tía! ¿Nos vamos ya? – Preguntó Isa mirando de reojo al chico que se comía con los ojos a _____________ -
¡Sí querida! ¡Oh! Enrique ¿Cómo estás? – Decía la señora Sofía dirigiéndose al chico intimidante –
¡Muy bien señora Castillo! ¿Y usted? – Contestó amablemente pero no engañaba a los primos –
¡Bien, muy bien! ¿Vendrás esta noche a la fiesta de bienvenida de ___________ cierto? ¡Es ella! – Dijo muy contenta su tía abrazándola –
¡No me lo perdería por nada! – Dijo despidiéndose y entrando a las oficinas de la empresa –
¿Trabaja contigo? – Preguntó ___________ entrando a la limusina como todos los demás –
¡Sí! estudia y trabaja a pesar de su dinero, ¡Deberían aprender de él! – Dijo refiriéndose a los primos que hicieron muecas de desagrado ante ese comentario –
¡Ni locos tía! Ése tiene algo que no me gusta – Decía Máximo acomodándose las mangas de la camisa –
¡Es cierto! A mí tampoco me gusta ¿Por qué lo invitaste tía? – Dijo frunciendo el ceño Miguel Ángel y mirando por la ventana –
¡Porque sus padres son mis clientes y ya se habían invitado de todos modos! ¿Acaso tu mamá no envió las invitaciones y todo? ¡Dejen de mal interpretar su carácter fuerte!...
¡Parece que la tía no ve más allá de sus ojos! – Exclamó Máximo muy serio, pero tenía algo de razón –
En una hora más o menos iban llegando a una mansión mucho más grande, lujosa y hermosa que la mansión Castillo donde vivía antes, se quedó muy sorprendida y admirada aunque todo ese lujo no le provocaba mayor interés, se bajaron y todos corrieron hacia adentro.
¿Aquí viven todos? – Preguntó ____________ al ver la familiaridad con la que entraban –
¡Como si así fuera! Pasan todo el día aquí los fines de semana y también cuando salen de clases… sus padres dicen que mejor les mandarán todas sus cosas para acá… aunque ellos viven en la mansión vecina, vienen hasta aquí a molestar a Elías – Se reía la señora Sofía contándole el por qué Elías sentía que sufría con sus primos –
¡Ven quiero que veas algo que te compré! – Decía Isa arrastrando prácticamente a ____________ por las enormes escaleras –
¡Wow! Esta es…
¡Tu habitación! ¿Te gusta? – Dijo Isa juntando sus dos manos y llevándoselas a la boca en señal de espera ansiosa por la respuesta de _____________ -
¡Me encanta! Pero ¿cómo?...
¡Ahhhhh! ¡Cuánto me alegra que te guste! Desde que supimos que vendrías corrimos a prepararte una habitación y yo misma la decoré – Dijo Isa mostrándole todo lo que tenía, mucho más de lo que podría necesitar o imaginar por cierto –
¡Pero si ayer fue que me dijeron que vendría y…!