“Un grupo de personajes misteriosos surgidos como resultado de una unión antinatural entre seres malignos de naturaleza discutida y mujeres humanas, los cuales habrían existido en la época de los patriarcas Enoc y Noé, y se habrían extinguido posteriormente durante el diluvio universal.”
-Según el relato bíblico de Génesis 6:1-4
—¡La alarma se encendió!—el grito que pego Cristians hizo que todos sus soldados se pusieran en alerta y dejan de prestarle atención a las pobres victimas que lloraban en un rincón de aquel sitio.
El señor Hill junto con su hija intentaban ayudar un poco a Cole que seguía mal, la paliza que le dieron no fue bonita y creo que ya todos comenzaban a creer que ya habían perdido la cabeza.
Frente de ellos se movía hombres forzudos, grandes, hermosos que dejaron más de unas sin aliento. Pero lo que no sabían es que eran Nefilim, personas gigantes violentos que tenían fuerza sobrehumana. Eran hijos de unos ángeles malvados que se metieron con humanas. Ósea que eran una raza un poco extraña para los humanos, Carly la primera vez que los vio llegar creían que ya los Ángeles del cielo venían por su rescate y su mirada se posó en uno especial.
El chico era el líder, cabello castaño, piel blanca y ojos azules como el cielo pero cambiaba cada vez que hacia magia a un rojo que daba miedo.
Derek
Se llamaba el chico que más bien ya era un hombre bien formado, pero por su linaje parecía más un chico de veinticinco o veintiséis años. Tenía más años que los que le seguían y eso lo hacía ponerlo en una posición muy importante.
—Mack, Lax, Luca y José.—llamo Derek la atención de los cuatros Nefilim que se mantenían en medio de la piedra formando el torbellino de los cuatros elementos naturales y esperaban que usando esos elementos lograran abrir la piedra y obtener sus recompensa.
Los dichos mencionados, dejaron de ver el centro y poco a poco sus ojos obtenían su color natural.
—Nada, es como si nos rechazara.—hablo Mack el utilizaba más el elemento de fuego sus ojos obtenían su color claro de nuevo.
—¡Siga intentando, están comenzando a atacarnos y necesito que descubran ya la combinación de esa piedra!—dicto Derek y los cuatros chicos volvieron a lo suyo.
Mientras que los soldados de Lux acomodaban a sus víctimas de nuevo en las cárceles y Cristians se colocaba al mando, mientras que Lux y su mascota tomaban el camino contrario por si venían a tacar por la espalda, los Nefilim se encargaban del centro con sus poderes.
—¡Andando! A lo mejor es Luna.—dijo Cristians confiado que sería la loca de su ex, que a lo mejor por fin se la dio de valiente y le daría la batalla.
<<Sería tan fácil.>>
Pensó este mientras conjuraba un hechizo y sus manos obtenían el color dorado.
Todos estaban en alerta y esperando que algunos de los dos bando dieran su primer golpe, pero se tomó un silencio tan desesperado que lo único que se escuchaban eran las respiraciones de cada quien.
—¿Y si es una trampa…—las palabras de Derek fueron cortada cuando una bola de tierra, agua y fuego salió del piso y los impacto a todos.
La cabeza de Derek golpeo el piso con gran violencia que lo aturdió por unos segundo a igual que sus amigos, en cambio a los soldados fueron a volar por todas parte a igual que Cristians que su espalda pego con el tronco de un árbol.
Lux fue levantada del piso y cayó en el viejo arrollo seco, y antes que le diera tiempo reaccionar vio cómo su mascota se movía por si sola al lugar donde salió la gran bola de tierra, agua y fuego unida como una.
—¡Noooo! Es una trampa.—grito esta pero todo paso en cámara lenta mientras veía como su mascota se acercaba a la bomba humana llena de magia.
<<Si, hasta los Nefilim le llego el olor.>>
La magia que habían provocado las hermanas y Lara eran tan poderosa, que nadie supo ver la bomba cuando le estallo en las caras matando a todos los que estaban cerca.
Por lo que los soldados que estaban en cerca del muro se murieron y lo demás fueron a volar por el impacto.
Derek se sostuvo el lado de su cabeza cuando este boto sangre pero no le importó, se curaría en segundo. Todos estaban tan concentrado en acercase al hoyo negro más de quince metros que estaba ahí que no se dieron cuenta cuando John ayudaba escapar a su familia y las demás personas.
—¡Ya esa maldita me tiene cansada!—grito Lux molesta caminando cojeando al centro al igual que todos, donde todos se miraron la cara por unos minutos al ver le mensaje que habían mandado.
— Creo que es su golpe.
—Yo más bien creo que es un grito de alerta.—dijo Derek mirando con asco al cuerpo que estaba quemado y con unas letras en el estómago.
—Ya sabía yo que sus poderes se iban activar alguno momento.—Lux se llevó las manos a su cabeza molesta.
Era cuestión de años si lo dejaban pasar, que ella obtendría lo que alguna vez fue quitado.
—Es solo mitad Ángel es imposible que ya haya obtenido todos sus poderes.—señalo Cristians un poco confundido y quito su mirada del cuerpo.