Y poco a poco me fui distrayendo de los momentos que acababa de vivir, y aun no me cabe en la cabeza, como rayos fui a aceptar casarme con Max, estoy en el mismo dilema de cuando me cuestiono, porque estudie Negocios, aunque eso es diferente, pero ahí está la misma pregunta. ¿Por qué?
La música sonaba a todo volumen, y me gustaba, entre copa y copa, brindis y más brindis me acabe la botella de champagne, aunque estoy acostumbrada a tomar más, con Vicky nos vamos casi cada fin de semana de fiesta por ahí en algún bar, por no decir todos los fines de semana.
-Se siente raro estar comprometida.- Le digo a Vicky quien de inmediato me responde.
-Y eso que apenas llevas unas horas de estarlo, imagínate cuando ya estés casada.
Y al momento de decir esas palabras, por mi cabeza pasan muchas imágenes, como convirtiéndome en un ama de casa con varios hijos y demás cosas que de solo imaginármelas me da, no sé qué, y no quiero decir que ser ama de casa sea malo, sino que yo no quiero convertirme en una, o por lo menos no ahora, no al lado de Max.
Así que intento despejar mi mente, después de todas las cosas que Vicky me ha dicho, y es que para imaginar cosas malas, no hay como ella, deberían contratarla como escritora de una de esas historias de terror, sería todo un éxito.
-Necesito tomar aire fresco.- Le digo a Vicky quién ahora está de lo más divertida conversando con el barman del lugar.
Mueve la cabeza en señal de aceptación y me dirijo en dirección a la parte trasera del hotel, donde casi no hay nadie, ni nada.
Todo el suelo está cubierto por pasto, y todo está casi oscuro de no ser por un triste foco que alumbra toda la estancia.
Me recargo en una de las paredes del lugar, recuerdos diversos invaden mi mente como, la vez que conocí a Max, debo mencionar que al principio él me pareció un poco raro en el sentido de su personalidad, es decir, me pareció que era gay, pero claro está que no lo es, bueno, ahora que lo pienso bien jamás durante el tiempo que llevamos de conocernos, hemos tenido algo más que pase de unos simples besos y no es porque yo no haya querido.
Es por eso que me cuestiono que quizás tenga a alguien más en su vida algo así como una novia, una amiguita o en estos momentos sería una amante dado el hecho de que está comprometido conmigo, pero jamás he investigado algo más acerca de este asunto, seguramente son solo imaginaciones mías.
De cierta forma, me siento identificada con Max, tal vez es por el hecho de que vivimos a la sombra de nuestras familias, en su caso vive bajo la sombra de su padre que siempre lo presiona para formar una familia y así poder continuar con el gran legado de la misma, en cambio yo vivo bajo la sombra de mí abuela que siempre está detrás de mí para señalar todos mis errores y compárame con mi querida primita.
Y ahora todo este asunto del compromiso, me tiene algo estresada, no esperaba que Max fuera a llegar tan lejos en su propuesta, somos buenos ¿Amigos? ¿Novios? No sé cómo llamarle a esta extraña relación que tenemos, nos conocemos desde siempre pero no nos amamos, de eso puedo estar más que segura, ya que él un día me confesó lo que realmente sentía por mí y resultó que solo me ve cómo una gran amiga y no como el amor su vida.
Lo entiendo, de hecho lo comprendo muy bien, ya que yo a él simplemente lo veo como un escape de la monotonía de mi vida, y quizás suene un poco egoísta, pero tampoco lo amo, ambos nos complementamos y ayudamos pero no de la forma que los dos quisiéramos, de esa manera romántica, junto al amor de tu vida.
Estaba tan concentrada en mis pensamientos cuando escucho algunos gritos que provienen del extremo de donde me encuentro, debe ser de alguien que se pasó de copas seguramente.
También logro escuchar como unos policías y guardas de seguridad persiguen a alguien, no debo de estar tan equivocada, porque de inmediato veo a una sombra parecida a la de una mujer, no puedo estar muy segura ya que la poca luz del lugar dificulta reconocer el rostro de la persona, pero lo único que puedo asegurar es que se dirige hacia mí.
En un abrir y cerrar de ojos aquella silueta se acerca a mí y… de repente sin que me pudiera dar cuenta , sucedió lo que menos me imaginé….me besó.
Me quede estática ante aquella situación, que no sabía cómo reaccionar, observé a los policías que pasaban de largo, y nosotras dos aquí.
Uno de los oficiales le dijo al otro en un tono pervertido.
-Deberíamos ser como ellas, pareja.
-Ellas sí que saben aprovechar el tiempo y no se la pasan persiguiendo a alguien que se coló a la fiesta. -Contestó el otro oficial.
#43692 en Novela romántica
#7150 en Chick lit
empresario y modelo, empresa socios y bodas, amor besos humor romance
Editado: 14.05.2019