No sé el porqué o cómo me pusieron está maldición, quizas fue un rencor contra mis padres o simplemente un hechizo que salió mal, pero no me di cuenta de lo que significaba ese detalle porque era una niña pequeña y solo me preocupaba jugar con mis amigos y amigas, además de escuchar las cosas que nos decían los adultos en ese momento, era normal, una niña que esperaba crecer junto a sus seres queridos para mirar a un mañana mucho mejor.
La primera vez que me hice conciente de mi maldición, fue cuando tenía 10 años, muchos niños y niñas de mi generación comenzaron a crecer de a poco, se hacían un poco más altos, adquirían fuerzas y habilidad, mientras que yo no crecía, mi magia, aunque poderosa a pesar de mi edad, era descontrolada y en cuanto a fuerzas y agilidad, las mías nunca aumentaban a pesar de que ayudaba a mis padres con la granja, creí sinceramente que mi crecimiento era más lento que el de los demás, que en algún momento crecería y estaría a la par como mis amigos y amigas, pero eso nunca paso, mis amigas se hicieron más altas y sus voces cambiaron a ser !as altas, tenían curvas y habían desarrollado sus bustos, comenzaron a mostrar interes en los chicos de la aldea, dejándome atrás debido a que todavía tenía la apariencia de una niña de 10 años, eso fue hace ya 4 años, con eso comprendí de que era diferente al resto.
Cuando se me confirmó de que estaba maldita fue debido a que todas nosotras debíamos de hacer la prueba de la Sacerdotisa, cada una de nosotras debíamos de demostrar nuestra magia, está prueba es sumamente importante en la Aldea, debido a que la Sacerdotisa es la encargada de realizar los rituales y curaciones de nuestro hogar o los extranjeros, cuando fue mi turno, la Sacerdotisa Mayor, me vio asombrada debido a que creía que tenía 10 años, pero cuando demostré que tenía demasiada magia en mi interior, ella me dijo
-El Destino te jugó una mala pasada, estas bajo una poderosa e inusual maldición pequeña, con demasiada magia que tu cuerpo no puede soportar pero aún así, estas viva.....Eres la más poderosa de las candidatas a Sacerdotisa, y si puedo ayudarte a aliviar un poco tu condición, lo haré-
Me elegieron como la Sacerdotisa de Brave, pero entre las otras Sacerdotisas se me dió un título un tanto ofensivo:
La Sacerdotisa Maldita de Brave
Una referencia a mi maldición y el nuevo título el cual había adquirido.
El entrenamiento como Sacerdotisa, fue bastante difícil y complicado, aprender a usar magia curativa, artes, el uso de armas para poder cuidar y defender a los demás, debido a que Brave es una aldea donde la música es importante, tuve que aprender a tocar distintos tipos de instrumentos musicales, sin olvidar de lo que aún no he podido lograr con totalidad, que es crear mi propia versión de la Melodía del Corazón.
-Luce ¿Estas bien?- me preguntó Stella, ya que había estado callada todo este tiempo.
-Si estoy bien, Ela, discúlpame si no he contestado, solo estaba pensando en mí maldición- le digo a mi amiga mientras le sostengo la mano en nuestro caminar.
Stella es mi Mejor Amiga, nuestras familias tienen una larga lista de Mejores Amigos por cada generación de forma mutua, nosotras somos amigas desde bebés, Stella es la única que sabe de mi enorme dolor por la maldición, ella siempre ha estado allí para mi, lo mismo va por mi parte, cuando Stella se case, seré yo la que de la amenazada a su Marido si intenta lastimarlo, como buena Mejor Amiga y Hermana....El matrimonio de Stella se realizará, cuando su prometido llegué con una posible cura a mi maldición, esa fue la única condición que puso mi amiga a su amor, ella quería casarse cuando yo este curada, porque su sueño es estar en un día solo de alegría y no sabiendo de que su Mejor Amiga este sufriendo porque no podra casarse....Stella es muy considerada, pero ya le he comentado de que ella debiera casarse, que es su día especial y no debería de pensar en mi, pero la muy terca insiste que no se casará a menos de que yo esté a su lado, estando con el resto de chicas, esperando a agarrar el ramo.
La conversación entre mi amiga y yo, fue bastante trivial, hablamos de la aldea, de mis deberes como Sacerdotisa, de las cartas de su Prometido, de cómo me las he ingeniado para seguir con la granja después del fallecimiento de mis Padres, también hablamos de la próxima enseñanza de los niños y niñas de la Melodía del Corazón.
-Ya es hora- me comenta Stella.
-Si, la Melodía del Corazón es muy importante para la aldea, representa nuestro poder y unidad....La Sacerdotisa Mayor, me comentó, de que la Melodía del Corazón, demuestra todo su poder,en los momentos más difíciles, dando esperanza- le explicó a mi amiga.
-¿Crees que veremos ese poder algún día?- me pregunta.
-No lo sé, pero espero que no, por lo que me comentó ella, ese poder solo aparece en los tiempos oscuros-
Nos quedamos en silencio, hasta que llegamos a mí hogar, con eso, Stella se fue a su casa, por mi parte entre a mi casa he hice algo para comer.