Suspiro

Soltó un suspiro lastimero que llevaba conteniendo en su cuerpo tanto tiempo, que cuando lo liberó fue como si su alma hubiese soltado las cadenas que lo mantenían encadenado a un dolor que luchaba por salir.
Porque este había cumplido su misión y solo esperaba ser liberado.
Pero cuando el momento llegó, se dio cuenta de que todavía lo mantenían prisionero. Y no pudo más que luchar y luchar hasta el cansancio para salir y no pudo.
Sintió por momentos desfallecer y por momentos fortalecerse y esto era lo último que quería. Ya que eso no le permitía ser libre al fin, al contrario, lo ataban cada vez más.
Hasta que llegó el momento de ser libre, ya que, para su suerte, donde era contenido empezó a resquebrajarse de a poco y, a pesar de que tuvo esperar el momento adecuado. Nunca perdió las esperanzas.
Debido a que el sólo quería volver al aire de dónde vino.
Pero lamentablemente el alma tarda más en curar que el cuerpo y, aunque le costó entenderlo,
Cuando al fin lo hizo, lo soltó como llegó... en un suspiro.