Capítulo 32.

—A ver si entendí… —frunció Jace sus labios pensando en lo que diría.

El grupo de amigos en la manada estaba reunido en la sala de descanso a la mañana siguiente de que Melissa Thompson atacara a Liam y Jace.

—Quien nos atacó anoche fue Melissa Thompson, quien de hecho se llama Alice Han —decía tratando de seguir el hilo de los acontecimientos—, tiene una hermana gemela, que es la verdadera Melissa… ¿y ambas son una especie de criaturas sobrenaturales que manipulan las emociones?

—Brujas invasoras, si —respondió Lissa recargada en el marco de la puerta.

—Claro… —frunció el ceño— Liam tiene un hermano perdido que ya no está perdido, sino que ahora está en Richmond…

—Ethan, si —añadió Liam dudoso por lo que iba a decir después—, además ya sabe sobre lo sobrenatural…

—Vaya… —arqueó las cejas sorprendido— El vidente murió, la loba solitaria ya sacó sus garras al fin… ¿algo más?

—Liam y su nuevo mejor amigo Kalisman —agregó la castaña jocosa.

— ¿Kalisman? Debes bromear, ese idiota no es de fiar —protestó el rubio de mala gana— ¿Por qué lo dejaste acercarse a él? —Le reclamó a Mason sentando a su lado.

—Tranquilo…Liam no es un niño, creo que puede cuidarse solo —expresó desinteresado.

—Te diré porque lo dejó —intervino la castaña—, estaba muy ocupado con su trágico romance de la bella y la bestia —reviró sus ojos con burla.

Liam con Lissa hicieron una mueca de incomodidad y desviaron sus ojos hacia el piso, mientras que Jace arqueó ligeramente las cejas y apretó sus labios, pero Mason le lanzó una mirada de molestia a la loba que mantenía su actitud jocosa.

— ¿Qué romance? —Rompió el silencio Jace con curiosidad.

—Ya sabes, el monstruo y la bella cazadora —encogió uno de sus hombros.

—Espera…¿Miranda? ¿La hija de Barton? ¿El líder de los cazadores VK? —Cada pregunta lo hacía estar más sorprendido.

—No es un trágico romance —alegó el rubio castaño—, ni siquiera es un romance ¿Está bien? —Los miró a todos hablando tajante— No es un romance —continuó negando.

Todos le asintieron para darle por su lado, pero seguían sin creerle.

—Bueno… ¿Alguien sabe por qué John nos pidió venir a esta hora? —Cuestionó Lexi fastidiada por la espera— No puedo llegar tarde a la cena —reviró sus ojos expresando sus pocas ganas de asistir a cenar.

—Aún son las 2:00 —respondió Mason viendo el reloj en su muñeca.

—Ahí viene —avisó Liam y todos voltearon a la puerta— ¿Qué es eso?

El hombre traía en sus manos un cofre de madera con diseños a los costados, grabados sobre metal al igual que su cerradura, parecía valioso y antiguo.

—Algo que una vieja amiga bruja me prestó —comentó con amargura en sus palabras—, los ayudará a controlar mejor sus emociones en caso de que Melissa quiera atacarlos de nuevo.

—No te ofendas John —intervino la castaña observando la caja en la mesita de centro—, pero…¿Cómo una caja nos ayudará contra ella?

—Esa chica es una bruja psicópata —agregó Jace irritado—, sin ofender —miró a Lissa—, ella casi hizo que nos matáramos.

—Porque son débiles ante sus emociones, ante sus miedos —afirmó el hombre—, la caja estará llena de sus peores recuerdos y los ayudará sino a enfrentarlos, pero si a controlarlos…los preparará contra ella.

— ¿Es algo así como la caja de pandora? —Miró desconfiado Liam a la caja.

John ladeaba su cabeza dándoles una respuesta vaga con eso.

El equipo no estaba convencido de aceptar la sugerencia de John, pero no era como si tuvieran una idea mejor para enfrentarla, así que de mala gana siguieron las órdenes del alfa para usar la caja.

—Lissa, necesito que canalices sus emociones adentro de la caja —ordenó mientras sacaba una daga de una bolsa de seda roja—, ahora…sus manos.

— ¿Para qué vas a cortarnos? —Protestó Lexi frunciendo el ceño.

—Necesito que su sangre vaya adentro de la caja —miró sus manos indicando que debían extenderlas.

Uno a uno les fue cortando en la palma de la mano y luego dejaban caer las gotas en el centro de la caja abierta, después se sentaron en el sofá.

—Es plata esmaltada así que no sanará en un rato, y será el tiempo suficiente para que entren y salgan de la caja —, de esta forma solo su lado humano entrará con ustedes y no habrá peligro sobrenatural alguno —caminó hacia la caja para cerrarla, pero se detuvo—, una cosa más, entrarán juntos, pero seguirán solos y la única forma de salir es justo como entraron por lo que tendrán que encontrarse.

— ¡Espera! —Exclamó Jace antes de que John cerrara la caja— ¿Qué pasará si la herida sana y no hemos salido?

El moreno respiró hondo con una mueca de preocupación.

—Su lado licántropo entrará y eso sería peligroso…buena suerte.

Los cuatro se voltearon a ver nerviosos y renuentes a seguir con el plan de John, pero cuando regresaron la vista hacia su alfa para abandonar el plan era demasiado tarde ya que el hombre ya había cerrado la caja, dejando a estos en la ilusión que el artefacto diseñó para ellos.

—Se ve exactamente igual que la sala de descanso…pero más iluminado —comentó Mason analizando el lugar con la vista—, creo que debemos empezar ¿no?

Todos se miraron inseguros, Liam trató de abrir la puerta que daba al pasillo del vestíbulo mientras que Jace trataba con la puerta que deba a la cocina.

—Ninguna abre —avisó serio Liam— ¿Cómo saldremos de aquí?

— ¿Qué hay de la ventana? —Sugirió la chica sin preocupaciones.

Los tres chicos la vieron sorprendidos por la sugerencia inusual que dio.

—A veces me pregunto que hay en tu cabeza —bromeó el rubio causando un leve alzamiento de comisura en los labios de la chica.

Lexi trató de hacer a un lado las cortinas para abrir la ventana, pero se llevaron una sorpresa al ver que no había ninguna ventana.

—Lo que faltaba —protestó fastidiado Jace.