Capitulo 22 "Pequeño cambio"

Las cosas concluyeron excelente, los invitados habían quedado encantados, Alexander se quedo conmigo hasta que el ultimo invitado se marchó.

― Lauren muchas gracias por todo.

― Con el mayor gusto Alex. ― Dije y me di cuenta de mi error. ― Lo siento señor Mills.

― Lauren necesito hablar contigo.  ― Dijo mirándome a los ojos, en eso sentí cómo si mi corazón se fuera a salir realmente Alexander me hacia sentir cosas inexplicables.

― ¿Qué pasa? ―  Inquirí algo preocupada por lo que estaba pasando.

― Esto no es fácil de decir. ― dijo algo preocupado por su reacción me estaba poniendo nerviosa. ― Has sido una excelente asistente no tengo ninguna queja de eso, porque has demostrado ser una empleada muy capaz de cualquiera cosa de verdad eres fantástica, pero … ― Se pauso, sus ojos se tornaron muy azules. ― Creo que lo mejor es que estés en otra área.

― ¿Qué? ― Inquirir sorprendida.  ― Seguirás conmigo estas dos semanas y  empezaras en el piso de asesoramiento a los empleados el 19 de este mes, te iras con la misma paga y estarás más cómoda allí. ― Me quede realmente aturdida con lo que me acaba de decir, estaba por retirarse, pero lo enfrente por primera vez en meses.

― ¡Alexander espera! ― Me puse frente a él. ― ¿Qué esta pasando?

― Lauren solo te estoy cambiando de puesto nada más.

― ¿Acaso no he hecho un buen trabajo?

― Si te lo acabo de decir.

― ¿Entonces? No me puedes cambiar, así como así ¿Qué es lo que sucede? ― Lo mire algo enojada.

― Lauren son cambios que se necesitan hacer en la empresa.

― Alexander esa la excusa más estúpida que me has dado. ― Estaba muy enojada ahora.

― Simplemente no puedes seguir conmigo.

― ¡¿Alexander por qué?! ― Dije casi gritando.

― No puedo tener cerca de mí. ― Suspiro. ― Me es muy difícil tenerte cerca lo lamento no puedo seguir así. ― Tome aire para intentar calmarme un poco, no sabia que más decirle.

― De acuerdo Alexander trabajare contigo hasta el 19 no te preocupes por eso.

― Gracias por entender. ― Dijo pasando por mi lado, no entendía porque estaba tan molesta si eso era lo que siempre había querido estar lejos de él y ahora que lo podía hacer me costaba tanto asimilarlo.

No fui capaz de decirle a Sam lo que me había dicho Alexander, evadí el tema hasta que se fue, no estaba muy segura de como sentirme al respecto, lo único que podía hacer era durante ese pequeño tiempo quizás podría buscar otro lugar para trabajar, en realidad lo que me había dicho Alexander no era tan descabellado, alejarme de él era lo mejor.

El lunes en la mañana al llega a la oficina Andrew estaba sentado en una de las sillas de la sala de espera.

― ¿Qué haces aquí? ― Le pregunte mientras me acercaba con un poco de cautela, se puso de pie, me abrazo con un brazo y beso mi mejilla.

― ¡Buenos días! ― Escuchamos a Alexander, me sobre salte un poco y gire para verlo, se veía molesto.

― Buenos días señor Mills. ― Dije mientras caminaba hasta su oficina con los dos cafés.

― Alex tiempo sin verte. ― Dijo Andrew irónicamente.

― ¿Qué quieres Andrew? ― Alexander sonaba muy molesto los tres entramos  a su oficina.

― Bueno como le dije a tus padres hablar de negocios.  ― Se sentó en una de las sillas del escritorio.

― Espero que no sea el mismo estúpido negocio que me intentas proponer todos los años.

― Para ti es estúpido, pero es una gran inversión.

― No lo es, si no tienes algo más que ofrecer te puedes retirar. ― Alexander se sentó frente a su computadora y la encendió.

― Contigo a veces es imposible hablar. ― Andrew se puso de pie  y suspiro. ―  Me retirare entonces, por cierto, Lauren nos vemos esta tarde para almorzar. ― Guiño uno de sus ojos y se marchó.

― No sabia que entre ustedes había algo. ― Mire a Alexander unos segundos sin siquiera responderle.

― Señor Mills esta es su agenda para el día de hoy. ― Dije cambiando el tema no quería hablar de Andrew en ese momento. Para ambos fue muy difícil trabajar toda la mañana solo decíamos lo necesario, durante la hora del almuerzo Alexander se estaba por marchar cuando Andrew apareció por la puerta, estaba segura que se habían topado en el ascensor.

― Vamos hermosa. ― Me dijo al entrar, sonreí un poco forzada y lo seguí. Andrew me llevo a un restaurante cerca al edificio para no perder tanto tiempo en movilidad; el almuerzo estuvo delicioso, Andrew me acompaño hasta la entrada del edificio.

― Lauren quiero preguntarte algo. ― el tono de Andrew era serio.

― Dime ¿Qué ocurre?

― De verdad me gustas mucho y quisiera que tú y yo tengamos algo, sé que tú queridísimo jefe me odia, pero eso no me importa, realmente quiero darme una oportunidad contigo.

― Andrew … ― Me pause no sabia que decirle, por mi cabeza escuche a Sam decirme que lo intentara que Andrew podría ser un buen hombre, no podía negar que lo fuera, pero no podía negarme que mis sentimientos eran por alguien más; no pude seguir hablando porque en el siguiente instante Andrew me estaba besando, continúe con el beso, pero no sentí nada.

― De verdad Lauren quiero intentarlo contigo. ¿no quieres? ― No sabia que decirle.

― Si, si quiero. ― Mentí, no se si estaba preparada para estar con alguien si aun sentía cosas por Alexander.

― Me parece excelente, esta tarde pasare por ti y cenaremos. ― Me dio un corto beso y se marchó, me quedé como una estatua por unos segundos hasta que por fin pude entrar. Llegue a mi oficina a esperar a Alexander, una hora después no llegaba era raro que él se desapareciera de esa manera.

― Lauren, Alexander te manda a decir que reprogrames todas sus reuniones porque no va a poder venir hoy. ― Asentí algo extrañada cuando Nina apareció en mi puerta con ese mensaje, me puse en esa tarea sin más, durante todo el día no volví a saber nada de él, los siguientes días fue igual ya se cumplia una semana y la siguiente las cosas parecia que no cambiarian.