Desiciones Que Matan

Capítulo 25

Leila

Llegamos al subterráneo solo veo dos camionetas y a Will, no pierde tiempo y me estrecha entre sus brazos hace el mismo procedimiento con Yariela. José busca con la mirada pero Will lo detiene.

-Santiago no se quería ir y dejarlos aquí, pero Antonio le propino un golpe que lo dejo inconsciente – comienza a relatar una vez que nos subimos al auto – Scott arranca de una vez.

Observo a Scott, no lo había notado pensé que se había ido con el resto, no pierde tiempo y sale del subterráneo adentrándonos a la carretera, Alex está en el asiento de copiloto, observando a cada momento si nos persiguen o no.

-Santiago es obstinado, me alegro que Antonio lo haya golpeado – comienza a hablar José – Will conoces algún lugar en el cual podamos estar por el momento.

Will asiente y le da la dirección a Scott, mi amiga está en trance y José no se aparta de ella, de un momento a otro ciento como si mi cabeza se desprendiera de mi cuerpo, Alex saca la mitad de su cuerpo y comienza a disparar, José realiza la misma acción, no hay dudas solo decisión. Los dos chicos vuelven a adentrarse al auto, José sujeta a Yariela, Will me sujeta.

Y de un momento a otro Scott, realiza un movimiento, escucho el chirrido de los neumáticos y el olor a quemado del mismo, provocando humo a nuestro alrededor lo suficiente para que nos pierdan de vista, Scott aprovecha ese momento para conducir de reversa acercándonos a las personas que nos han querido matar.

El auto se detiene, quedando frente a frente, Alex saca una metralleta y comienza a disparar, Scott saca otra arma y comienza hacer lo mismo, José y Will nos protegen con sus cuerpos, escucho como alguien intenta abrir la puerta donde esta Will.

Will se levanta, solo observo y un disparo, fue suficiente para que la otra persona quedara muerta, ya no escucho nada, no hay más disparos miro al frente Alex y Scott vuelven a sus posiciones iniciales, y nos adentramos a los bosques, me levanto solo observo a mi amigo, no hubo dudas al momento de disparar.

José se levanta al igual que Yariela, José no duda y la atrae a su cuerpo abrazándola, suelto un suspiro y observo detenidamente a mi amigo, me devuelve la mirada.

-Te contare una parte – me susurra para que nadie más escuche – y responderé cada pregunta que me hagas, no todas el resto lo tiene que contestar mi hermano.

Le doy una respuesta afirmativa, me atrae a su cuerpo para abrazarme, Scott observa por el espejo retrovisor a su hermana, creo que Scott ya tomo una decisión. Observo a mi alrededor y solo veo arboles de un momento a otro nos detenemos en una casa de campo.

Es muy hermosa, nos bajamos del auto, Will ingresa un código y nos adentramos, a pesar que afuera le da un aire moderno por dentro es rustica, Alex no se despega de la ventana observando, Will y Yariela fueron a la cocina para que podamos beber o comer algo. José está sentado frente mío, su mente está en otro lugar.

Alex se despega de la ventana una vez que Will y Yariela ingresan nuevamente a la sala, Scott sale de una de las habitaciones con una laptop en sus manos, Will lo nota pero no le dice nada. Yariela me da una mirada y estoy segura lo que dará a conocer su decisión, se aclara la garganta para que le pongan atención, está nerviosa ya que ocho pares de ojos le prestan la atención suficiente.

Me levanto de mi lugar y me situó al lado de mi amiga, tomo su mano para darle a entender que estaré a su lado.

-Tome una decisión respecto al matrimonio arreglado.

No continúa ya que José la interrumpe.

-No hace falta, no estás de acuerdo con el matrimonio y yo… - Yariela lo interrumpe.

Will y Scott, se dan una mirada.

-Déjenme terminar – suelta un suspiro, está claro, no hay vuelta atrás – si me voy a convertir en tu esposa será mejor que comiences a darme lecciones para poder defenderme porque no voy a estar dispensa de –  me separo de mi amiga ya que José la comienza a besar.

 Retomo nuevamente mi lugar, observo a Scott no está feliz con la noticia pero sabe que no puede interferir en las decisiones de su hermana, Alex para que entro en algún transe ya que no despega sus ojos del suelo y Will sale de la sala.

Realizo la misma acción y lo sigo, sube las escaleras y se adentra a la tercera puerta, ingreso detrás de él y solo veo un cuarto con una cama King con una mesita de noche al lada, un armario enfrente de la cama, una puerta al lado del armario de seguro es el baño, un hermoso balcón y desde mi posición se nota que tiene una hermosa vista.

Hay un escritorio, me acerco a ella y en un cuaderno tiene una hermosa caligrafía en letra de carta, Will solo está observándome debe de saber que estoy maravillada con esta habitación, también hay un sillón al lado del balcón de igual forma hay una repisa llena de libros. Will toma asiento en el sillón y yo solo tomo la silla del escritorio para sentarme y estar de frente de mi amigo.

-Siempre te ha gustado el cuarto de mi hermano – tiene la mirada perdida pero aun así no deja de hablar – tanto así que cuando habían relámpagos, cuando no podías dormir o habías visto alguna película de terror cualquier excusa, siempre te adentrabas en su cuarto y dormías a su lado, a el nunca le importo cuales fueran tus excusas, siempre hacías tus travesuras y para que no te castigaran mi hermano se echaba la culpa, si llorabas el hacía de payaso para que volvieras a reír – parece que su mente no está aquí, está recordando algún suceso – recuerdo una vez, mientras los dos estábamos jugando en la alberca, mi hermano salió de la casa para unirse a nosotros pero en cuestión de segundo apareció una chica al lado del y lo comenzó a besar – tengo un mal sabor en la boca – tú no te quedaste ahí de brazos cruzados – me vuelve a mirar y tiene una sonrisa burlona – saliste de la alberca, tomaste a la chica del cabello y la tiraste a la alberca, agarraste de la camisa a Rogelio, con tu mano y eso que según tú, le quitabas de la boca cualquier resto de ese beso y tremendo beso le habías plantado enfrente de nosotros – creo que ya me puse colorada ¿de verdad había hecho eso? Will suelta una carcajada al ver mi reacción – y le advertiste a la pelirroja que si se acercaba a Rogelio estaría con una buena cirugía de nariz y la chica intento golpearte pero Rogelio la de tubo y la corrió de la casa.



#35460 en Novela romántica
#22786 en Otros
#1872 en No ficción

En el texto hay: decisiones, reencuentro, amor desamor

Editado: 04.05.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.