Parte 5

Pasé el trapo sobre el mesón de los controles de los sonidos y niveles de voz, trape el piso de madera y me fui directo a la sala donde ensayaban los chicos, sonrisitas me observo mientras me posicionaba frente a ellos esperando que terminaran para poder trapear. Ellos terminaron y vino inmediatamente hacia mí.

- ¿Te gusta? es la nueva canción -ni siquiera había notado una pista diferente, pero de todas formas asentí -nos están enseñando una coreografía nueva, me gusta bailar, pero a la vez es tedioso estar con la misma canción. -asentí de nuevo

-Hye Jin ve a otro salón aun no lo desocuparemos -mi encargado hablo y yo asentí volviendo a tomar mi cubeta y trapeador. -Y deja de distraer a Jong-in -sonrisitas soltó una leve risa, pero a mi no me hizo ninguna gracia.

-lo siento, vete ya no quiero meterte en problemas -yo asentí y me dirigí a la puerta y antes de salir mis mejillas ardieron, pero lo hice, grite su nombre.

- ¡Jong in! -el volteo en seguida a mirarme -Buena suerte

- ¡Omo! Es verdad eso de levantarse con el pie derecho ¿Lo vieron todos? ella me deseo buena suerte - cerré la puerta dejándolo con su teatrito. Los días últimamente ya no eran tan pesados y el tipo manager encargado de mi menciono que trabajaría en la noche debido a que estaban teniendo mucho trabajo por la tarde, estaban trabajando seriamente en elegir a los chicos para la próxima agrupación y estaban llegando mas Traines a la empresa, eso mantenía a todo mundo loco y como estorbo a los 8 de intendencia.

La noche anterior fue muy rara, compré los snacks como me los había pedido la chica y me fui directo a mi cuarto, estaba estudiando mi libro de español cuando ella toco y me pidió permiso para pasar se sentó en mi cama y extendió las manos, fui hasta mi "estantería" y se los di en la mano 3 como ella había pedido agradeció una y mil veces y mientras comía me observaba como leía.

- ¿Entiendes esas letras? -asentí - ¿Es inglés?

-español

-Que exótico ¿En que grado vas? -detuve mi lectura ¿Grado? No se ni siquiera en que año mis estudios pararon, ni siquiera había hecho la cuenta de en qué grado estaría de seguir estudiando. Me encogí de hombros tratando de seguir mi lectura - ¿Esa indiferencia es porque te obligué a esto Unni? -negué lentamente - No mientas - ¿Entonces cómo es que no sabes...?

-no estoy en una escuela -paro de comer su segundo snack

- ¿Y todos esos libros?

-No quiero atrasarme

- ¿Atrasarte en qué? -ni siquiera yo lo sabía. Me encogí de hombros, seguí con mi lectura y ella ahora comía más lento - ¿Y qué es lo que haces el resto del día Unni?

-solo... trabajo y leer hasta quedarme dormida.

- ¿Solo eso? -pregunto con asombro y me sentí avergonzada, ella se mataba practicando y mejorando - ¿Algún pasatiempo? -negué - ¿Algún chico? -volví a negar - ¿Y que piensas hacer mañana - quite mi vista del libro al saber que no podría poner atención a las dos cosas... bueno a ella y el libro

-lo mismo

- ¿Y no te aburre? -mencione que estos meses fueron como un solo día o como 3, 4 días, ni siquiera había puesto atención a mi vida rutinaria, solo me preocupaba el no cometer errores en el trabajo. - bueno cambiemos de tema - eso me saco del punto infinito que comenzaba a ver - quizás un chico te llame la atención - me sonrió con egocentrismo en su mirada, si uno pero que ni en mil y un sueños se aria realidad, solo mirar a esta chica y al de ojos grandes me sentía como una cucaracha, literal. Así que Negué - cuantos años tienes Unni -no me gustaba hablar de mi edad y era una pregunta que nadie hacia más que quienes solicitaban mi trabajo

-trece años - di un respingo cuando comenzó a toser muy ruidosamente, toqué un poco su espalda simulando golpes ya que me parecía incomodo golpearla fuerte.

- ¿Y has dejado que todo este tiempo te llame Unni? Pensé que tenias 16 o 17 - Que ofensa ¿Tan grande me veo? Casi no duermo y no estoy comiendo como se debe, pero no imagine que eso me aumentara cinco años.

-Soy yo tu Unni - fingió llorar - ¿cómo es posible que siempre me vea como la menor? - me extendió la mano con un puchero en los labios, no sabía que trataba de hacer pero insistió ata que la tome - Quince años, Kang Seul-gi -me sonrió melancólica y realmente no se a que se debía su cambio de humor - Ya es muy tarde, descansa Dongsaeng, avísame si necesitas hablar con alguien - me tendió su ultimo pastelillo y negué rápidamente.

-Ya tome el mío muchas gracias

-llámame Unni -tomo mi mano colocándolo - no le doy mi alimpento a cualquiera así que considérate afortunada Dongsaeng.

Y con eso salió de mi pequeño cuarto mientras me decía adiós con la mano.

Últimamente la melancolía abundaba mi mente, no me sentía bien conmigo misma, no estaba conforme con lo que era como hace tan solo unos días... o ¿serán meses? El tiempo estaba pasando muy rápido con los últimos acontecimientos y me sentía cada vez mas fuera de lugar...como aquella vez, sacudí mi cabeza tratando de despejar los recuerdos de mi borrosa infancia... eso ¿aún era un infante con trece años en mí cuerpo? Mire mi libro de ciencias naturales, con el animo asta los suelos y lo primero que apareció en mi temario fue pubertad y adolescencia, había hojeado ese libro un par de veces, pero inmediatamente lo cerraba al ver los órganos genitales del hombre y mujer. Leí las primeras cuatro hojas y creo que había bajado mi ánimo aún más, los cambios hormonales hacían que cambiara tu estado de un momento a otro y no solo mentalmente si no que los cambios físicos también se comenzaban a desarrollar, en mi clase siempre me había visto un poco mas grande que las demás y ahora creo que sigue siendo igual y ya estaba incomoda con eso...

Y aquella noche solo fue el principio si antes no tenia ganas de levantarme los siguientes días hacían irme con humor encendido de capricho por mi trabajo, de repente me incomodaban las miradas mas de lo usual y me negaba a dejar que las "hormonas" dominaran mi estado de ánimo, pero tampoco es que yo mandara en esas cosas por más que quisiera...