Capitulo XIX: Oportunidad

SUSAN.

-Ven conmigo – dice agarrándome de la mano, me guía hasta las escaleras donde subimos con deprisa al estar en el pasillo me lleva hasta su cuarto donde al abrirlo me introduce al él, besándome, no dejo que esto se detenga pongo mis manos en su cuello para profundizarlo, estoy segura que él desea esto tanto como yo.

Empieza a besar mi cuello con delicadeza, pensaría que es su forma de tener relaciones, empiezo a querer quitar su camisa, él se deja levantando sus brazos, observo sus músculos bien fornidos en sus antebrazos, los acaricio cuando de repente lo vuelvo a besar, me quita la blusa que tengo quitando botón por botón, llego un momento que le ayude cuando me la quita, observa mis pechos, no veo fuego en sus ojos pero tal vez sea algo natural en los lobos.

Vuelve a besarme pero ahora me lleva hasta su cama donde caigo y el viene a ponerse arriba de mí, nos besamos con suavidad, deseo que este momento acaba, no entiendo en que momento caí en sus brazos.

Nos desnudamos no por completo ya que nuestra ropa interior aún sigue donde deben estar, rozando nuestros cuerpos, la sangre siento que me llega hasta la cabeza al sentir su mano en mi braga donde siento como mueve su dedo en círculos alrededor de mi clítoris. Gimo por lo alto cuando entra dos de sus dedos adentro de mí, sacándolos y entrándolos de nuevo, no sabía que se podía hacer esto, lo agarró del cuello con desesperación y beso sus labios.

Cuando siento que exploto por sus movimientos que cada vez son mas rápidos, esto es demasiado cuando gimo diciéndole que pare.

No dice nada y eso me deja mucho que pensar pero a la vez me satisface porque estoy demasiado roja, solo me sonríe y eso me deja con calma cuando termina de quitar sus dedos de mi interior.

Y siento que es lo correcto esto, de todas maneras Brany ya no está con él, no siento culpabilidad, llega un momento donde se quita su bóxer y se deja que lo vea su gran miembro, ¡Santo cielo!

¿Es demasiado grande?

Si

Para ser la primera vez, creo que me toco muy bien.

-¿Es tu primera vez? – pregunta cuando estaba perdida pensando, asiento rápido sabiendo que con eso tal vez no lo haga fuerte – entonces tranquila, comenzaremos con lentitud.

Siento felicidad al saber que se preocupa por mí, no estamos usando preservativos y me asombra.

¿Quiere que sea su reina?

¿Por qué no ocupo pastillas, ni él ocupa condón?

No digo nada solo cierro los ojos cuando siento que entra en mí, siento el ardor en mis paredes vaginales.

-Tranquila – dice con voz suave moviéndose con lentitud, me estremezco al sentir que el dolor va desapareciendo y el calor se apodera de mi cuerpo, haciendo que mis caderas ayuden con movimientos lentos, hasta que siento la velocidad, me observa y hago lo mismo, empecé a besarlo por las sensaciones deliciosas que se penetran adentro de mí.

-Logan – exclamo en un pequeño gemido cuando siento que me corro.

-Shhh – dice en un susurro besándome de nuevo, cuando exploto llenándome de sensaciones calurosas, parece que el también llego.

Cae encima de mí sin lastimarme, saca su miembro de mi interior, no sé cómo paso esto pero para ser mi primera vez estuvo magnifico.

-¿Te encuentras bien? – pregunta acariciando mi cabello.

-Si – digo aunque siento un pequeño dolor pero se soporta – nunca había tenido relaciones.

-Sí, lo sé – dice asintiendo con la cabeza, frunzo el ceño por su respuesta.

-¿Cómo sabes? – pregunto enarcando una ceja, este me ve con admiración.

-Estuviste en un orfanato, dudo que allá cogieras con un tipo – dice riéndose, lo golpeo en su abdomen, este para de reírse y ahora me mira serio – no hagas eso.

-¿Por qué no? – pregunto curioso ya que ni lo golpee duro, este no dice nada y solo se levanta para buscar la ropa que callo en el suelo, mientras que yo solo observo esa gran espalda.

“Olvídate de la espalda, mejor observa ese gran miembro”

Ok eso si no me lo esperaba de mi conciencia, se cambia con rapidez y luego me voltea a ver a mí.

-Cámbiate ya que si vienen los demás se darán cuenta de esto – dice un poco cortante para luego regalarme una sonrisa muy dulce, camina hacia la puerta donde al abrirla desaparece de mi vista, sonrió al moverme en la cama.

Fue mi mejor experiencia en la cama sin duda, espero que no sea la última, aunque ya somos novios no significa que la pasemos solo con sexo pero entenderé si quiere o no.

Me levanto ágilmente ya que no me duele, me pongo mi ropa interior y luego mi pantalón junto mi blusa, luego entro al cuarto de baño donde me encuentro con un espejo, me observo mi cabello y está hecho un nido.

En seguida me lo arreglo poniéndome la coleta para una cola alta, salgo decidida a hacer como si no ha pasado nada, bueno si, pero que los demás no enteren.