Capitulo XL: Familia

LOGAN

Me asuste demasiado no verla en la cama a mi lado, llame a Alaska y ella tampoco no sabía nada, sin embargo sentía su olor desde la ventana, busque con mi olfato y al entrar al interior del bosque, cuando de repente la veo a ella sostenida con fuerza en su cuello por Carlota, el enojo invadió mi sangre de lobo y me abalance contra Carlota, quien cayo asustada, tuve la fuerza para defenderme y al morderla en su brazo grita dolorida e intenta escapar pero no lo logra, no conmigo, casi lastima a Susan y eso no se lo permitiré a ella, luchaba contra sus poderes hasta que al final observo que sus soldados se habían ido y algunos muertos, entonces sin avisar se desapareció.

Me transformo en humano y me siento lastimado, al verme en la pierna me doy cuenta que tengo una herida, que no es tan grave, bueno, es lo que pienso, volteo a ver a donde esta Mark, Susan y Alaska, me encamino a donde esta Alaska, siento la mirada de Susan en mí, sin embargo no le hago caso.

-Llévate a Mark – le digo en un susurro en el oído, ella asiente y se encamina a donde se encuentra el chico, este al oír lo que dice le hace caso y los dos se transportan dejándome solo con la tercera bruja quien me mira con preocupación, sin duda piensa que la castigare pero no es así.

Cuando iba a dar mi paso firme para ir hacia ella, siento como mi pierna se contrae con un hueso, gruño dolido pero al ver me sorprendo que es una flecha para brujas, volteo a ver en seguida a Susan quien abre los ojos como platos y se acerca con rapidez hacia mí.

-¿Estas bien? – pregunta pero no le logro contestar, siento dolor muy fuerte y me preocupa saber porque – tiene veneno.

Al decir eso enarco una ceja al saber que me quieren matar con ello, siento debilidad y solo puedo caer pero no me dolió, sin duda Susan hizo algo, se acerca a mi lado y me hace que la mire en frente sus ojos, esos hermosos y dulces ojos.

-Logan no cierres los ojos – dice con preocupación, sin embargo siento un pesor en mis ojos que me deja completamente adormilado, el dolor están fuerte que no puedo evitar sentir pesar, hasta que al final no sé qué más sucede, los sueños se hacen presentes.

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Abro mis ojos con dificultad sintiendo un hormigueo en mi cuerpo, me acostumbro a la luz brillante y al hacerlo me doy cuenta que estoy en el mismo lugar donde estaba hace poco, volteo a ver a todos lados y observo a la chica que me tiene confuso a mi lado haciendo magia con sus manos.

Está de pie y hace que todas las hojas del suelo se mueven como un remolino estando ella en medio, sonríe al hacerlo con sus manos.

Es hermosa, su cabello negro cayendo en su pechos, sus ojos color miel relucientes y sin duda esa ropa de color miel la hace ver extremadamente sexy, trago grueso al ver su mirada puesta en mí, ella detiene las hojas y se encamina hacia donde estoy.

-¿Te encuentras mejor? – Pregunta sentándose a mi lado, me mira con una sonrisa de lado – será mejor que me respondas porque no tengo todo tu tiempo.

-¿Qué paso? – pregunto frunciendo el ceño ella sonríe apagadamente y luego mira el suelo.

-Solo ha pasado cinco minutos desde que te desmayaste, en menos de un minuto te cure – responde haciendo que entienda todo, sin embargo ella no se ve bien.

-¿Pasa algo? – pregunto y ella niega sonriendo de nuevo pero más parece una mueca.

-Es que hay algo que no te he contado – dice mirando sus pies cubiertos por unas botas de cuero, se ve triste – me iré.

-¿A dónde? – Pregunto enarcando una ceja - ¿a qué se debe esto?

-Tu manada ya está hecha – responde suspirando frustrada – sin embargo sería raro que una bruja como yo estuviese sola siendo la poderosa, Mark es hijo único y por eso debe hacer su propia manada.

-¿Entonces te iras con él? – pregunto frunciendo el ceño, ella empieza a reírse como si fuese un chiste que le haya contado pero no deja de hacerme sentir feliz verla de esa manera.

-Claro que no – me responde evitando reír – Mark ya tiene a su luna y es Yanis, en cambio yo no tengo a la persona que será el líder de nuestra propia manada, las brujas deben hacer sus clanes así como Scarlet y Carlota lo han hecho.

Sus palabras me dejaron perplejo, pensar que la fue una vez como mi novia, piensa en un futuro con otro licántropo, es algo en el cual me enfurece pero luego pienso.

¿Por qué lo haría?

Es hermosa y sin embargo yo no he sido una buena persona con ella, sin duda no siente nada por mí que la haga quedarse más, tienen derecho a una nueva vida con otra persona que la ame con todo corazón.

Pero nuestro vínculo es tan fuerte por la vida de Lucas que me hace sentir esa presión de no dejarla ir, pero sería un completo egoísta y mentalmente estúpido, aunque Brany y yo no somos nada pero…. ¡Carajo! No sé ni lo que digo.

-Sabes… - dice cortando la voz, la veo pensativa – quería proponerte algo.

-¿De qué se trata? – pregunto ansioso de su propuesta.

-Lucas se quedara contigo – dice con una media sonrisa – él es feliz en esta manada e integrarla en otra sería algo difícil para él, sin embargo quisiera pedirte que solo un día.

-¿Un día? – pregunto enarcando su ceja, sin duda su propuesta me hace algo razonable pero algo en mi me dice que la detenga con su plan.

-Si un día – responde asintiendo varias veces – un día estando como una familia, compartiendo con nuestro hijo como si… nos amaramos.

Escuchar eso de su boca me ha dejado completamente perplejo, no sabía que responder pues al decir que actuáramos era algo que me hace sentir tristeza pues quiere todo con su hijo y lo quiere complacer antes de que se vaya.

-¿Es lo único que quieres? – pregunto tragando grueso mientras la observo.

-Sí, para que antes que me vaya mi hijo tenga un buen recuerdo – responde y me deja en que pensar saber que no vendrá de nuevo – nos volveremos a ver, defender es lo único que haremos ante Carlota, la profecía no nos dijo mucho pero si hay que luchar lo haremos.