Capítulo 14.

Alissa abrió los ojos lentamente cuando su padre la sacudió un poco.

  ─Hay alguien que vino a verte, Lissa.

  ─Papá, dile a Connor que hoy no estoy de humor.

  ─No soy Connor─Leyla estaba en la entrada de la habitación mirándola, sus ojos ya no estaban hinchados, pero había perdido esa chispa que solía iluminar su rostro.

  ─Voy a dejarlas solas, sí necesitan algo, estaré en la cocina.

La habitación se quedó en silencio, Alissa miró al suelo sin poder evitarlo.

  ─Connor no pudo venir hoy, así que me ofrecí a visitarte─Alissa asintió con entendimiento─, ¿por qué sigues escondiendote en tu habitación?.

  - No estoy escondiendome, ¿por qué lo haría?─sus ojos seguían clavados en el piso sin tener valor suficiente para mirar a su mejor amiga─, es sólo que duele y...

Leyla bufó interrumpiéndola.

  ─¿Crees que eres la única que sufre, Alissa?, él era tu novio, si, pero era mi hermano también, estuve con él desde que nacimos, juntos siempre y ahora no ésta más─Leyla sonaba enfadada─, tu no debes pasar por su habitación cada día, no tienes que escuchar a mamá encerrarse ahí para llorar toda la tarde, papá se la pasa viendo viejas fotografías todo el día y ya no presta atención a nada más.

  ─No lo entiendes, Leyla─Alissa elevó la voz─, es mi culpa, murió por mi culpa y no puedo con esa carga, es demasiado, no puedo ni mirarte a la cara, tu y tu familia deben odiarme por lo que pasó.

  ─No seas ridícula, Alissa─rodó los ojos─, él no murió por tu culpa, todos estábamos ahí, tú no le lanzaste ese ataque, murió para protegerte, porque te amaba y sabía que debías seguir viva, pero en vez de hacer lo que debes estás aquí, perdiendo el tiempo.

  ─¿Cómo puedes estar tan tranquila, Leyla?.

  ─Lo sabíamos, ambos teníamos el presentimiento de que algo malo pasaría, nos despedimos antes de que Connor y tu llegaran─suspiró─, me dijo que estaba dispuesto a sacrificarse por ti en el momento adecuado y, ya ves, así fue.

Alissa comenzó a llorar.

  ─No así, Leyla, no sé qué voy a hacer sin él, ¿cómo voy a levantarme cada día sabiendo que él ya no va a estar a mi lado?─Alissa se había negado a hablar con sus padres o Connor al respecto, pero parecía que ya no podía contener más las palabras─, es demasiado injusto, ustedes no deberían haber estado metidos en esto, y ahora él... sí tan sólo me hubiera alejado de ustedes a tiempo, él...

No pudo continuar debido al llanto.

  ─Lo sé, lo sé─la abrazó y acarició su espalda─, pero no puedes seguir aferrándote a él, Lissa... Luca murió y no podemos hacer nada al respecto.

Siguió llorando un rato más, necesitaba vaciarse de todo el dolor, no supo cuánto tiempo había pasado hasta que escuchó unos golpes en su puerta.

Sarah se asomó y sonrió con tristeza al ver la escena.

  ─¿Puedo hablar un segundo contigo, Lissa?─ella asintió.

  ─Voy por agua a la cocina─dijo Leyla y salió.

Sarah tenía una caja de madera en las manos, Alissa la reconoció enseguida, pero no dijo nada.

  ─Una mañana bastante liberadora, ¿verdad?, sé que es difícil todo esto, y no puedo prometerte que la situación va a mejorar, porque no quiero mentirte─se sentó junto a su hija─, pero hay algo que si puedo prometerte, es lo mismo que le prometí a tu padre cuando Thom murió, vas a aprender a vivir con el dolor, eres una Saintcox y los Saintcox somos fuertes, vas a hallar la manera de seguir─le tendió la caja y Alissa la miró con curiosidad─, quiero que la tengas, es algo que significa mucho para mi y espero que esto siempre te recuerde quién eres y de dónde vienes─se levantó─, voy a dejarte para que te cambies, el desayuno ésta listo.

Alissa miró la caja con el símbolo de los Maintless grabado en la tapa, acarició con las yemas de sus dedos el símbolo, un pequeño clic hizo que su corazón se acelerara.

Abrió la caja sin que ésta opusiera ninguna resistencia.

Mi madre solía decir que sólo se abre en momentos de necesidad─recordó las palabras de Sarah.

Adentro había un mapa que parecía demasiado antiguo, un collar redondo que cabía perfectamente en la palma de su mano y una nota:

"Ahí donde el dolor y el amor se juntan podrás hallar las respuestas, el portador de luz puede calmar tu duda sí a cambio le das lo que desea."

Alissa fruncio el ceño al mismo tiempo que recordaba la profecía del templo de los caídos.

Quizá sí encontraba al portador de luz, podría entender que debía hacer.

Se cambió rápidamente y bajó de prisa las escaleras.

  ─¿Vas a quedarte a desayunar, Leyla?─Alissa sintió como su corazón se estrujaba al recordar que esa pregunta antes estaba formulada en plural.