Mucho gusto yo soy...

Ya era otro día, y tenían los chicos que ir a la escuela, en Righton High.

Todos se alistaban como de costumbre, excepto por Alex que le costó debido a que sus cosas seguían en cajas, pero finalmente lo hizo.

-Alex ¿desayunaras? –le pregunta desde su padre desde la cocina.

-Tomaré un yogurth –contesta indiferente-, como desearía que las cosas pudiesen desempacarse solas –dijo al salir de su cuarto.

Por obra de magia (literal), las cosas empezaron a desempacarse solas.

Mientras tanto en Righton High.

-Oye ya vi a la nueva vecina –le dice Diego a Daniel.

- ¿enserio?

-Sí, Gigi lo posteó.

-Por supuesto que si –se ríen ambos.

-Es linda, ¿Qué te dijo Morgan?

- ¿Sobre? –preguntó Daniel confundido.

-Gigi tambien posteó que Morgan se puso celosa cuando chocaron –hace un gesto picaro.

-Ya sabes cómo es Morgan –alza las cejas.

-Si… lo sé –suspira.

-Oye termina de sacar tus cosas del locker hay que ir a clase.

-Tranquilo “Dani” –dice Diego imitando a Morgan.

-No es gracioso.

-Si lo es –se ríe Diego- ¿oye hiciste la tarea de biología?

Daniel queda con la mirada perdida hacia el otro par de lockers.

-Hey… ¿estás bien Daniel? ¿Qué miras? –voltea Diego hacia donde Alex- oh ya veo, que no te vea Morgan o tendremos que oírla gritar.

- ¿Sabes su nombre? –dice Daniel.

-No, ¿Por qué no vas y le preguntas?

Daniel deja a Diego y va a hacia a Alex.

- ¡No hablaba enserio! –exclama Diego quien se va dejando a Daniel.

- ¡Hey! –dice Daniel sonriendo.

-Hey –contesta Alex de manera cortante.

-Soy Daniel.

-Qué bien por ti –responde sarcásticamente.

-Ayer te vi.

-Oh cierto, eres el chico que no sabe caminar –cierra su locker bruscamente.

- ¿Qué? No, bueno…-Daniel se empieza a poner nervioso.

- ¿siempre eres tan raro? –hace una mueca de desagrado.

-Normalmente dicen lo contrario.

- ¿Quiénes? Las chicas tontas que andan siguiéndote todo el tiempo por lo increíblemente popular, atlético, sociable… lindo –empezó a decir de manera grosera hasta calmar su voz en eso último.

- ¿Me conoces? –sonríe.

-No, vi las fotos juntos a todos los trofeos que de seguro son tuyos.

-No son solo míos, son del equipo.

-Como sea –vuelve a responder cortante.

-Pensaste que era lindo –sonríe pícaramente.

-Claro que no –frunce el ceño Alex.

-Eso no lo dice la vitrina de trofeos.

-Dani…-llega Morgan y los ve.

- ¡Morgan! –contesta sorprendido Daniel- hola.

Alex quedó viendo a ambos y entendió por la cara enojada de Morgan que ellos son algo y que ella esta celosa, así que sonríe pícaramente e intenta alejarse.

- ¿A dónde crees que vas? –toma del brazo Morgan a Alex.

- ¿A cualquier otro lado? –responde con sarcasmo.

- ¿Qué hacías con mi novio? ¡A solas! –dice enojada Morgan.

- ¿Tu novio? –Alex finge estar sorprendida- No lo sabía.

-Pues ya lo sabes.

-Si ya veo, ¿sabes que tambien veo? –sonríe hipócritamente y pone un gesto inocente- que deberías vigilar más a tu “novio” porque me estaba coqueteando.

- ¡Qué! –grita Morgan.

-Exacto… ¿Qué? –dice Daniel.

- ¡Daniel Miller! –exclamó la novia celosa.

- ¡Eso no es verdad!

-Bien… dejaré que solucionen sus problemas ustedes solos –se va Alex.

Daniel intentaba convencer a Morgan de que no coqueteaba con Alex, pero Morgan solo gritaba y alegaba, Daniel se fija si Alex sigue ahí, quien apenas se estaba yendo a la cafetería; Alex volteó para ver como seguía la pareja, y al ver que Daniel la estaba viendo sonrió pícaramente y guiñó un ojo.

-Así que tú eres la chica nueva –dijo Gigi mientras grababa.

-Supongo ¿y tú eres?

-Soy Gigi, ¿te molestaría responder alguna preguntas? Es para el blog.

-De hecho…si, no me gustan las fotos –baja la cámara de Gigi.

-Bueno puedo grabar solo el audio –dice Gigi intentando convencerla.

-Mejor dime donde queda la oficina del director.

-De aquí todo derecho luego la primera puerta a la izquierda.

-Gracias –sonríe falsamente.

Alex se dirigía a la dirección cuando se topó con una chica que iba entrando al mismo tiempo que ella al lugar.

-Yo entro primero –dijo la chica a Alex.

-Como sea –Alex remira los ojos.

-Buenos días chicas –habló el director.

- ¿Quería verme? –preguntó con respeto la chica de ojos grandes.

-Si Jean toma asiento –señala a la rubia- igual usted señorita Johansson.

- ¿Qué ocurre director Alonso? –preguntó Jean.

-La señorita Johansson es nueva y quería que le dieras el recorrido.

-No es necesario –contesta Alex.

-Insisto –dice el director- así que tienen la primera hora libre.

Las chicas salen de la oficina y se quedan mirando de reojo mutuamente.

-Bien sígueme –dice con tono mandón Jean.

-No necesito una guía de tour, gracias –responde con mal.

-No me interesa, ya oíste al director.

-Bien –Alex tuerce los labios y alza su ceja en señal de molestia.

Mientras ellas recorrían la escuela, los demás alumnos estaban en sus clases.

-Diego, ayúdame –dice Daniel desesperado.

- ¡Diablos viejo! ¿Qué te sucede? –preguntó Mac, un amigo de ellos.

-Morgan sucede –toma asiento para respirar.

- ¿Qué le pasa a Morgan? –pregunta Diego preocupado.

-Solo porque me vio hablando con la nueva empezó a hacerme una escena de celos.

- ¿con gritos y rabietas? –habla Mac en tono de burla.

-Lo de siempre… ¿Por qué aun no dices nada Jean? –empieza a voltear para ver que no está la rubia de ojos grandes.

-Jean aún no llega –comenta Diego.

- ¿Dónde está? –pregunta Daniel- haríamos el trabajo de biología juntos.